Blogia
mQh

trozos humanos en el bronx


[Al Baker y Sarah Garland] Asesino reparte trozos de cuerpo humano en barrio del Bronx.
Un hombre del Bronx fue acusado ayer del asesinato de un colega en una riña a altas horas de la noche en el apartamento de la novia de la víctima. Pero lo que asombró a detectives y vecinos no fue tanto el asesinato mismo, sino los extremos a los que llegó el acusado, según las autoridades, para deshacerse del cuerpo.
La policía dice que el sospechoso, Víctor González, utilizó tres cuchillos y un serrucho para desmembrar a su colega Wilfredo Pinto Jr., y luego cargó las partes en bolsas negras de jardín y las dispersó a través de Longwood.
Dos piernas y un brazo, cortado a la altura del codo, fueron hallados en una bolsa que fue arrojada en un tramo cubierto de hierbas de una acera en una esquina de Kelly Street. Ropas ensangrentadas fueron encontradas en otra bolsa a unos diez metros de allí, en Intervale Avenue cerca de Tiffany Street. Un edredón manchado de sangre fue arrojado debajo de un árbol en un parque en un tranquilo vecindario residencial. La cabeza de la víctima, envuelta en una chaqueta, fue arrojada a un tacho de basura en un callejón junto a la residencia de Dawson Street.
Otras partes, incluyendo un hombro, fueron arrojadas cerca de la Intermediate School 116. Una bolsa con parte de una pierna fue encontrada cerca del Bruckner Boulevard.
Y el torso de la víctima, la parte más pesada, fue hallado en una bolsa abandonada en un callejón junto al 923 de Kelly Street, donde los vecinos dijeron que González pasó un buen rato en el apartamento 3B, con la víctima y su novia, Sandra Estrada.
"Fue una locura, increíble", dijo Ángel Romero, que vive en el bloque y quien, con un conserje local, encontró la bolsa con los miembros y pasó las horas siguientes guiando a agentes de policía en su recorrido de lugar en lugar recogiendo los restos.
"Encontré un brazo y una pierna", agregó. "Nunca oí hablar de que encontraran un cuerpo cortado en pedazos. Y en mi propio bloque. Es una locura".
Para la policía, el asesinato cae en una categoría familiar: la víctima conocía al sospechoso; el asesinato ocurrió tarde por la noche; el motivo, dijo la policía, fue una riña, posiblemente por el afecto de la señorita Estrada.
Los detectives de homicidios tuvieron un alijo virtual de pruebas -las partes del cuerpo- que dejaron un horripilante rastro en el apartamento manchado de sangre donde la policía cree que se cometió el asesinato a eso de las 11:30 de la noches del jueves, y donde detuvieron a González ayer temprano.
Ayer el comisario de policía Raymond W. Kelly, dijo que los restos -y las herramientas utilizadas en el crimen- estaban siendo recogidos.
"Creemos que hemos encontrado todas las partes del cuerpo", dijo Kelly.
En total, la policía dijo ayer en la tarde que se habían recuperado seis bolsas con restos.
González y Pinto trabajaban juntos como techadores para Triboro Maintenance, en Kelly Street, dijo ayer un gerente de la compañía. Dijo que Pinto era el supervisor de una cuadrilla de trabajadores que incluía a González.
Los vecinos dijeron que el trabajo causaba tensiones en las vidas privadas de los hombres. Los vecinos describieron a Pinto como gritón y agresivo, y a menudo abusaba verbalmente de González.
Reina Laguna, 55, que vive en el edificio, describió a González como "un hombre muy tranquilo". Dijo que a Pinto le "gusta intimidarte".
El martes por la tarde Estrada cenó con ella y, una hora más tarde, su invitada volvió para decir que los dos hombres estaban peleando. "Dijo: ‘Empezaron otra vez'", dijo Laguna.
Como en ocasiones pasadas, dijo la policía, los hombres estaban bebiendo y empezaron a discutir. Estrada los abandonó temprano, dijo la policía. En algún momento González cogió un martillo y golpeó a Pinto con él, dijo la policía, antes de cortarlo en pedazos. Se cree que Estrada presenció la escena, dijo la policía.
Kelly dijo que la pelea puede haber tenido que ver con el trabajo. Un detective en el lugar de los hechos dijo que la mutilación del cuerpo había tomado horas, y que González entró y salió varias veces del apartamento para repartir las bolsas. Dijo que el acusado había sido carnicero en Puerto Rico.
A eso de las cinco de la mañana de ayer, la policía recibió una llamada telefónica de una mujer que dijo que su amigo estaba cortado en pedazos en bolsas. Fue más o menos a esa hora que los vecinos vieron a Estrada correr por la calle. "No es verdad, no es verdad", gritaba Estrada, de acuerdo a Martha Saninocencio, 31, que le ofreció una silla para que se sentara y trató de calmarla.
Steven Reed, portavoz del despacho del fiscal del Bronx, dijo que González será acusado de homicidio en segundo grado y otros cargos.
Dijo que González estaba todavía detenido en la comisaría de policía número 41 la tarde pasada.

11 de mayo de 2006
©new york times
©traducción mQh
rss

0 comentarios