literatura carcelaria
Reos se ‘evaden' mediante la creación de cuentos en Angol. Lanzamiento se hizo con presencia de autoridades de Conace y Gendarmería.
Angol, Chile. El oficial de Gendarmería Víctor Manosalva realizó un motivante llamado a los participantes por cambiar las historias de sus vidas.
Las causas por las que una persona es privada de su libertad, conllevan muchas veces historias muy fuertes cuyas potentes y duras experiencias de vida entregan lecciones para ellos mismos, y para el resto de la sociedad.
Esta situación es aprovechada de manera constructiva en la cárcel de Angol mediante una experiencia literaria que involucra a unos 20 jóvenes reclusos, además de Gendarmería, profesionales de la Comisión Nacional de Control de Estupefacientes (Conace) y la asesoría experta de la Universidad Mayor.
Concurso
En dicho contexto, este jueves fue lanzado un concurso de cuentos para internos, quienes además de las situaciones penales que enfrentan, deben lidiar con los efectos de una relación muy estrecha, prolongada y perjudicial con las drogas, situación que buscan de alguna manera revertir mediante la reflexión y análisis que se plantea en el sano ejercicio de construir una narración que refleje su visión del problema.
Esta temática, es el punto de partida para que los presos practiquen las habilidades literarias enseñadas en un taller dictado por profesionales y puedan desahogarse creando o contando experiencias que cual terapia, puedan ser útiles para la anhela reinserción social.
De esta manera la unidad penal en conjunto con Conace lanzaron el concurso ‘Yo cuento. Más libre de drogas', como una competencia literaria que por primera vez se ejecuta en este recinto penal. En este sentido, Fernando, un joven recluso, manifestó que esto es algo nuevo que jamas había intentado ni hecho y "en lo personal creo que jóvenes que están en consumo y riesgo delictual les va a servir por que en el cuento van escenas y experiencias de lo que implica vivir de esta manera", explicó.
Angol, Chile. El oficial de Gendarmería Víctor Manosalva realizó un motivante llamado a los participantes por cambiar las historias de sus vidas.Las causas por las que una persona es privada de su libertad, conllevan muchas veces historias muy fuertes cuyas potentes y duras experiencias de vida entregan lecciones para ellos mismos, y para el resto de la sociedad.
Esta situación es aprovechada de manera constructiva en la cárcel de Angol mediante una experiencia literaria que involucra a unos 20 jóvenes reclusos, además de Gendarmería, profesionales de la Comisión Nacional de Control de Estupefacientes (Conace) y la asesoría experta de la Universidad Mayor.
Concurso
En dicho contexto, este jueves fue lanzado un concurso de cuentos para internos, quienes además de las situaciones penales que enfrentan, deben lidiar con los efectos de una relación muy estrecha, prolongada y perjudicial con las drogas, situación que buscan de alguna manera revertir mediante la reflexión y análisis que se plantea en el sano ejercicio de construir una narración que refleje su visión del problema.
Esta temática, es el punto de partida para que los presos practiquen las habilidades literarias enseñadas en un taller dictado por profesionales y puedan desahogarse creando o contando experiencias que cual terapia, puedan ser útiles para la anhela reinserción social.
De esta manera la unidad penal en conjunto con Conace lanzaron el concurso ‘Yo cuento. Más libre de drogas', como una competencia literaria que por primera vez se ejecuta en este recinto penal. En este sentido, Fernando, un joven recluso, manifestó que esto es algo nuevo que jamas había intentado ni hecho y "en lo personal creo que jóvenes que están en consumo y riesgo delictual les va a servir por que en el cuento van escenas y experiencias de lo que implica vivir de esta manera", explicó.
21 de julio de 2007
©renacer de angol 
0 comentarios