libre novio acusado de violación
[Daniel Yee] Tribunal de Georgia deja en libertad a implicado en caso de sexo adolescente.
Forsyth, Georgia, Estados Unidos. Durante los más de dos años que estuvo en una penitenciaría del estado, Genarlow Wilson nunca perdió la certeza de que se haría justicia y lo dejarían en libertad. El viernes las esperanzas del joven, que fue sentenciado a diez años de cárcel por tener sexo oral consintiente con otra adolescente, finalmente se vieron realizadas: La corte más alta del estado resolvió que su sentencia equivalía a un trato inusual y cruel.
"Sabía que ocurriría", dijo Wilson tras ser liberado. "Pero no sabía cuándo ocurriría".
Wilson, con las manos en los bolsillos, llevaba pantalones azulo oscuro cuando salió de la prisión. Su abogado B.J. Bernstein dijo que los llevó durante meses en el maletero de su SUV, esperando su libertad.
Abrazó a su madre, Juannessa Bennett, a su hermana Jaiya, de nueve, y a Bernstein.
Wilson dijo otro recluso le contó sobre la decisión de la corte, diciéndole que la había oído en la radio. Pero Wilson dijo que no quiso creer hasta que la decisión la oyó él mismo.
Su caso provocó extendidas protestas contra la severidad de los jueces. Sus defensores dijeron que una razón de esa severidad era la raza, observando que la diferencia de edad de él y ella, ambos negros, era de dos años.
Dijo que también quiere ayudar a otros adolescentes, ofreciéndoles este consejo: "Deberían pensárselo bien antes de meterse con algunos tipos y antes de tomar algunas decisiones".
En su decisión de 4 a 3, la Corte Suprema de Georgia observó que los legisladores del estado revocaron más tarde la ley que imponía una pena de prisión de diez años.
Ese cambio, dijo la corte, representaba "un enorme cambio en el punto de vista de la legislatura sobre la gravedad del sexo oral entre dos participantes adolescentes consintientes".
Los jueces dijeron también que la sentencia de Wilson no hacía ninguna "contribución medible a castigos aceptables", y su delito no llegó al "nivel de adultos que acechan a niños".
Después de ser encarcelado, Wilson se convirtió en el tema de importantes editoriales y transmisiones radiales nacionales. Su sentencia fue denunciada incluso por miembros del jurado que lo condenó y el autor de la ley de 1995 que lo puso en prisión.
Sus defensores, incluyendo al ex presidente Jimmy Carter, dijo que el caso planteaba inquietantes interrogantes sobre la raza y el sistema judicial. Wilson y la chica son ambos negros.
Wilson fue condenado por acoso agravado de menor de edad después de una fiesta en el cuarto de un hotel la Nochevieja de 2003, donde fue filmado teniendo sexo oral con una niña de quince.
Wilson, que tenía diecisiete en la época, fue absuelto de violar a otra niña de diecisiete, que también estaba en la fiesta. El hombre que acusó a Wilson, el fiscal de distrito del condado de Douglas, David McDade, dijo que estaba de acuerdo con la decisión, pero respetaba a la corte como "el último árbitro".
Los defensores de Wilson estaban extasiados.
"Nunca perdí la fe en nuestro sistema judicial, y nunca perdí la esperanza en todas las oraciones de la gente por nosotros", dijo la madre de Wilson, Juannessa Bennett.
El representante John Lewis, demócrata de Atlanta, dijo: "Cada día de este joven en la cárcel fue un día de más".
La ley de 1995 que violó Wilson, fue modificada en 2006 y convirtió el sexo oral entre adolescentes cercanos en edad como una falta, similar a la ley sobre al intercurso sexual adolescente. Pero más tarde la Corte Suprema del estado mantuvo una resolución de un tribunal menor que decía que la ley de 2006 no se podía aplicar retrospectivamente.
El alto tribunal rechazó la apelación de Wilson de su condena y sentencia, pero los jueces accedieron acatar la resolución de un juez de reducir la sentencia de Wilson a doce meses, y dejarlo en libertad. Ese juez calificó la sentencia de diez años como un "grave error judicial".
Wilson dijo que piensa volver a la escuela y a los deportes y que posiblemente estudiará sociología. De momento, quiere pasar más tiempo con su familia.
"Creo que ya he estado bastante tiempo lejos de mi familia", dijo. "A veces hemos tenido que luchar contra la adversidad. Ahora mi familia finalmente obtuvo algo de felicidad".
Forsyth, Georgia, Estados Unidos. Durante los más de dos años que estuvo en una penitenciaría del estado, Genarlow Wilson nunca perdió la certeza de que se haría justicia y lo dejarían en libertad. El viernes las esperanzas del joven, que fue sentenciado a diez años de cárcel por tener sexo oral consintiente con otra adolescente, finalmente se vieron realizadas: La corte más alta del estado resolvió que su sentencia equivalía a un trato inusual y cruel."Sabía que ocurriría", dijo Wilson tras ser liberado. "Pero no sabía cuándo ocurriría".
Wilson, con las manos en los bolsillos, llevaba pantalones azulo oscuro cuando salió de la prisión. Su abogado B.J. Bernstein dijo que los llevó durante meses en el maletero de su SUV, esperando su libertad.
Abrazó a su madre, Juannessa Bennett, a su hermana Jaiya, de nueve, y a Bernstein.
Wilson dijo otro recluso le contó sobre la decisión de la corte, diciéndole que la había oído en la radio. Pero Wilson dijo que no quiso creer hasta que la decisión la oyó él mismo.
Su caso provocó extendidas protestas contra la severidad de los jueces. Sus defensores dijeron que una razón de esa severidad era la raza, observando que la diferencia de edad de él y ella, ambos negros, era de dos años.
Dijo que también quiere ayudar a otros adolescentes, ofreciéndoles este consejo: "Deberían pensárselo bien antes de meterse con algunos tipos y antes de tomar algunas decisiones".
En su decisión de 4 a 3, la Corte Suprema de Georgia observó que los legisladores del estado revocaron más tarde la ley que imponía una pena de prisión de diez años.
Ese cambio, dijo la corte, representaba "un enorme cambio en el punto de vista de la legislatura sobre la gravedad del sexo oral entre dos participantes adolescentes consintientes".
Los jueces dijeron también que la sentencia de Wilson no hacía ninguna "contribución medible a castigos aceptables", y su delito no llegó al "nivel de adultos que acechan a niños".
Después de ser encarcelado, Wilson se convirtió en el tema de importantes editoriales y transmisiones radiales nacionales. Su sentencia fue denunciada incluso por miembros del jurado que lo condenó y el autor de la ley de 1995 que lo puso en prisión.
Sus defensores, incluyendo al ex presidente Jimmy Carter, dijo que el caso planteaba inquietantes interrogantes sobre la raza y el sistema judicial. Wilson y la chica son ambos negros.
Wilson fue condenado por acoso agravado de menor de edad después de una fiesta en el cuarto de un hotel la Nochevieja de 2003, donde fue filmado teniendo sexo oral con una niña de quince.
Wilson, que tenía diecisiete en la época, fue absuelto de violar a otra niña de diecisiete, que también estaba en la fiesta. El hombre que acusó a Wilson, el fiscal de distrito del condado de Douglas, David McDade, dijo que estaba de acuerdo con la decisión, pero respetaba a la corte como "el último árbitro".
Los defensores de Wilson estaban extasiados.
"Nunca perdí la fe en nuestro sistema judicial, y nunca perdí la esperanza en todas las oraciones de la gente por nosotros", dijo la madre de Wilson, Juannessa Bennett.
El representante John Lewis, demócrata de Atlanta, dijo: "Cada día de este joven en la cárcel fue un día de más".
La ley de 1995 que violó Wilson, fue modificada en 2006 y convirtió el sexo oral entre adolescentes cercanos en edad como una falta, similar a la ley sobre al intercurso sexual adolescente. Pero más tarde la Corte Suprema del estado mantuvo una resolución de un tribunal menor que decía que la ley de 2006 no se podía aplicar retrospectivamente.
El alto tribunal rechazó la apelación de Wilson de su condena y sentencia, pero los jueces accedieron acatar la resolución de un juez de reducir la sentencia de Wilson a doce meses, y dejarlo en libertad. Ese juez calificó la sentencia de diez años como un "grave error judicial".
Wilson dijo que piensa volver a la escuela y a los deportes y que posiblemente estudiará sociología. De momento, quiere pasar más tiempo con su familia.
"Creo que ya he estado bastante tiempo lejos de mi familia", dijo. "A veces hemos tenido que luchar contra la adversidad. Ahora mi familia finalmente obtuvo algo de felicidad".
Dorie Turner en Atlanta y Ben Evans en Washington contribuyeron a este artículo.
27 de octubre de 2007
©pokono record
©traducción mQh
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