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murió phylllis whitney


[Valerie J. Nelson] La gran dama de la narrativa gótica estadounidense. A los 104.
Murió Phyllis A. Whitney, la gran dama de la ficción gótica norteamericana que contribuyó al renacimiento del género en libros de bolsillo y escribió más de setenta cuentos y novelas de misterio para lectores de todas las edades en una carrera que se extendió durante seis décadas. Tenía 104 años.
Whitney murió el viernes, de neumonía, en un hospital de Charlottesville, informó su hija Georgia Pearson.
La autora del éxito de ventas ‘Thunder Heights' es considerada la primera escritora de novelas románticas góticas modernas en libros de bolsillo, de acuerdo a ‘13 Mistresses of Murder', un estudio de las escritoras de novelas de misterio de 1986.
La idea del libro surgió después de que un editora de Ace Books viera a su madre leyendo ‘Rebeca' [Rebecca] (1938), una de las novelas más famosas de la novelista británica Daphne du Maurier, "y pensé que podría haber un mercado para este tipo de libros", dijo Whitney en ‘13 Mistresses of Murder'. La cubierta del libro de bolsillo mostraba la ahora familiar imagen de una mujer huyendo de una siniestra mansión.
El editor Gerald Gross se maravillaba del constante y persistente éxito de ‘Rebecca' y empezó a buscar una novela que se le pareciera, de acuerdo a ‘The Cultural Studies Reader' (1993).
Escogió ‘Thunder Heights' y la volvió a publicar en 1960 como la primera novela en una nueva línea de gótico dirigido a las mujeres. La categoría tuvo un rápido éxito.
Las historias de suspenso de Whitney, ambientadas en lugares exóticos, eran conocidas por sus "osadas damiselas en desgracia", pero la enervaba la definición ‘escritora romántica'.
Decía que las escritoras de novelas de detective que incluían amores castos no habían obtenido el reconocimiento que merecían.
"Me gustaría pensar en algún nombre conveniente para el tipo de escritura que practico yo", escribió en 1981 en un artículo para la Asociación de Escritores de Misterio de América [Mystery Writers of America]. "Nos leen millones de lectores... Pero, sin embargo, nunca hemos logrado que se nos reconozca. Decir que somos el ‘gótico' no lo logra. Es un término demasiado restrictivo... ‘Escritoras de novelas de suspense romántico suena terriblemente ñoño. Aunque creo que mientras esperamos algo mejor, tendremos que aceptar esta definición".
Publicó su primera novela en 1941 -‘A Place for Ann', un libro para jóvenes adultos. Whitney tenía 94 cuando se publicó en 1977 su novela romántica de misterio ‘Amethyst Dreams', ambientada en una isla frente a las costas de Carolina del Norte.
De sus 73 novelas se vendieron millones de ejemplares, y ha sido publicadas en más de treinta países. Escribió 39 novelas de misterio para adultos, veinte novelas de misterio para adolescentes y catorce novelas para niños.
Su cuarto libro, ‘Red Is for Murder' (1943), fue su primera novela para adultos. Pero escribir para adultos era tan mal pagado que no intentó escribir otra novela para adultos durante doce años, dijo una vez Whitney.
Cuando intentó abordar problemas raciales en una novela para niños, su editor la rechazó. Whitney encontró otra editorial para ‘Willow Hill' (1947). Es la historia de una joven blanca y sus amigos de la secundaria adaptándose a la integración; se convirtió en uno de sus libros para niños más populares.
La Asociación de Escritores de Misterio de Amércia otorgó a Whitney su prestigioso Grand Master Award por su obra en 1988. La organización también le otorgó dos Edgard por sus novelas juveniles ‘The Mystery of the Haunted Pool' (1960) y ‘The Mystery of the Hidden Hand' (1963).
"En mis libros, las niñas resuelven sus propios problemas", dijo Whitney a la revista Parade en 1975. "Han sido siempre feministas porque... siempre he hecho lo que querido hacer".

Phyllis Ayame Whitney nació el 9 de septiembre de 1903 en Yokohama, Japón, como hija única de sus padres estadounidenses, Charles y Lillian Whitney. En japonés su segundo nombre significa ‘lirio'.
La historia de la relación de sus padres era una historia de amor, y Whitney reconoció en ella la inspiración para sus historias.
Sus padres empezaron a salir cuando eran jóvenes, pero no se casaron sino después de que Lillian enviudara y Charles Whitney la llamara desde Japón.
Su padre, que trabajaba en la hostelería y con buques de pasajeros, se mudó con la familia a Filipinas y China. Murió cuando Phyllis tenía quince años. Su madre volvió con Whitney a Estados Unidos, pero murió poco después.
Whitney se trasladó desde San Antonio a Chicago para vivir con una tía y terminó la secundaria a los veinte. Se había retrasado cuando asistía a una escuela de misioneros en Asia.
La literatura le había intrigado desde que tenía doce años, y empezó a vender cuentos a revistas cuando trabajaba en una librería.
También se convirtió en una editora de libros para niños para el Chicago Sun y el Philadelphia Inquirer en los años cuarenta.
En 1925 se casó con George Garner, con quien tuvo su única hija. La pareja se divorció en 1945, en parte porque él no apoyaba su carrera literaria. Para entonces Whitney ya escribía novelas y enseñaba en la Universidad Northwestern University y en la Universidad de Nueva York.
La segunda vez, en 1950, se caso "bien", decía a menudo. Lovell Jahnke era un ejecutivo de la Mobil Oil con el que recorrió el mundo. Los viajes eran tanto su pasatiempo como parte de sus investigaciones.
"Descubrí que necesito un telón de fondo fresco cada vez que empiezo algo", dijo en el Times-Dispatch de Virginia Richmond en 1991. "Me gusta escribir sobre lugares bonitos, lugares que me parezcan interesantes".
Tras la muerte de su marido en 1973, se mudó de Nueva Jersey a Long Island, Nueva York. A los 84 le encargó a un biznieto que diseñara una casa en Faber, Virginia, donde vivió el resto de su vida cerca de su hija, que la sobrevive.
También le sobreviven dos nietos y dos biznietos.
Atribuía su longevidad a su interés en la nutrición, que había adquirido cincuenta años antes. Whitney eliminó el azúcar de su dieta y tomaba 86 vitaminas y minerales al día. A los 88 dijo que los antioxidantes no impedían la vejez prematura, pero "hacen trabajar tu cerebro".
Hasta hace poco estuvo trabajando en su autobiografía, que no llegó a terminar.

valerie.nelson@latimes.com

21 de febrero de 2008
14 de febrero de 2008
©los angeles times
cc traducción mQh
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