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qué es el ejército de resistencia del señor


La justificación que ha esgrimido el presidente Obama para bombardear la frontera somalí es que el Ejército de Resistencia del Señor amenaza la estabilidad regional. Algunos republicanos acusan a Obama de querer, en su condición de Anticristo, exterminar a los cristianos.
[Lucinda Andersson] Uganda. En 1986, una mujer llamada Alice Lakwena, de la tribu acholi de Uganda, fundó un movimiento de resistencia basado en creencias en el Espíritu Santo de Dios. Lakwena misma decía ser una profeta que recibía mensajes del Espíritu Santo. Estaba convencida de que los acholi podían derrocar al gobierno ugandés, con Museveni a la cabeza, que había amenazado a su pueblo con brujerías y el espiritualismo enraizado en su cultura.
De acuerdo a los mensajes que recibía de Dios, sus seguidores podían evitar que las balas impactaran en sus cuerpos embadurnándose con aceite de nuez de karité. Si lo hacían, sus seguidores no tendrían que retroceder nunca ni tenían necesidad de no exponerse durante enfrentamientos. Lakwena y sus soldados ganaron importantes batallas e iniciaron una marcha hacia Kampala, pero no lograron conquistar la capital.
Entretanto, otro líder místico había entrado en el movimiento. Se llamaba Joseph Koney, y decía que estaba poseído por espíritus. Jospeh Koney fundó el Ejército de Resistencia del Señor, que fue el sucesor del Movimiento Espíritu Santo. Ha sido su líder desde entonces. Lakwena, que huyó del país en 1997, ha criticado abiertamente a Koney, argumentando que el Espíritu Santo no quiere que mate a civiles ni a prisioneros de guerra.
La milicia armada de Koney se ha hecho conocer como uno de los grupos paramilitares más brutales del mundo, famoso por sus masacres de civiles, secuestros, violaciones y el uso de niños soldados y de esclavas sexuales.
El gobierno ugandés dice que la guerrilla sólo tiene entre quinientos y mil soldados, aunque otras fuentes la estiman en tres mil soldados, más cerca de mil quinientas mujeres y niños.
Desde el principio, el Ejército de Resistencia del Señor operó en las regiones septentrionales de Uganda, aunque ahora ha sido empujado fuera del país y está operando fundamentalmente desde Sudán, la República Centroafricana y la República Democrática del Congo.
Durante los veintitrés años de existencia, el Ejército de Resistencia del Señor ha obligado a más de veinte mil niños y niñas a participar en la guerra. La guerra civil en Uganda, que es uno de los conflictos más prolongados de África, se ha cobrado la vida de miles de personas y ha provocado desplazamientos demográficos. Hoy en día, más de un millón doscientas mil personas viven en campos de refugiados en las regiones septentrionales de Uganda. El conflicto se ha extendido a los países vecinos, causando pánico y muertes de civiles en la ya desolada República Democrática del Congo.
Hace poco, Human Rights Watch publicó un informe concluyendo que al menos 321 personas fueron asesinadas en una masacre del Ejército de Resistencia del Señor en el distrito de Haut-Uele en el nordeste de la RDC. Durante la masacre, que tuvo lugar entre el 14 y el 17 de diciembre de 2009, al menos 250 civiles fueron capturados -de los cuales al menos ochenta niños.
Hay desacuerdos en cuanto a los objetivos de la lucha del Ejército de Resistencia del Señor. Según ellos mismos, el objetivo es derrocar al gobierno ugandés y reemplazarlo con un gobierno basado en los Diez Mandamientos de la Biblia.
"El Ejército de Resistencia del Señor es sólo el nombre del movimiento, porque estamos luchando en nombre de Dios. Dios es el que nos ayuda en la selva. Es por eso que le dimos este nombre al movimiento. Y la gente siempre nos pregunta si estamos luchando por los Diez Mandamientos de la Biblia de Dios. Esa es la verdad, porque los Diez Mandamientos de Dios es la constitución que dio Dios al pueblo del mundo. A toda la gente. Si lees la constitución, nadie aceptará que la gente robe, nadie aceptará que se tome a la mujer de otro, nadie aceptará matar a inocentes. Los Diez Mandamientos implican todo eso", dijo Vincent Otti, uno de los líderes del Ejército de Resistencia del Señor en una entrevista con IRIN.
Algunos dicen que es un movimiento nacionalista que lucha por los derechos de los acholi, lo que puede ser difícil de creer por algunos ya que la milicia ha maltratado y asesinado a su propia gente. Otros dicen que su resistencia tiene objetivos ideológicos más generales, como el derrocamiento de la dictadura y el establecimiento de la democracia y de derechos iguales para todos los ugandeses. La creencia común, especialmente entre los gobernantes del mundo y diplomáticos parece ser que el Ejército de Resistencia del Señor no tiene objetivos políticos, que son simplemente cristianos fundamentalistas, dementes, que disfrutan aterrorizando a su propia gente. "El Ejército de Resistencia del Señor no tiene ni ideología ni programa político. Al menos, la gente nunca ha oído nada sobre eso", escribió Robert Gersony en un informe de la embajada de Estados Unidos en Kampala en 1997.
En 2005, la Corte Penal Internacional emitió órdenes de detención contra los cinco líderes del Ejército de Resistencia del Señor: Joseph Kony, Vincent Otti, Raska Lukwiya, Okot Odhiambo y Dominic Ongwen. Fueron acusados de crímenes contra la humanidad y crímenes de guerra, incluyendo asesinatos, violaciones, esclavitud sexual y reclutamiento de niños. Desde entonces, al menos dos de esos líderes murieron asesinados: Lukwiya en 2006 y Otti en 2007 y circulan rumores de que Odhiambo también fue asesinado. Ninguno ha sido juzgado.
Las opiniones difieren en cuanto a los objetivos del Ejército de Resistencia del Señor. Lo que sí es indesmentible es que han torturado y asesinado y que decenas de miles de niños han sido capturados, indoctrinados y utilizados como soldados y esclavos sexuales, o vendidos a señores de la guerra a cambio de armas. Pero la pregunta persiste: ¿Por qué están luchando? ¿Por qué utilizan métodos tan brutales? ¿Cómo puede decir que sus objetivos justifican sus medios? ¿Pueden hacerlo?
4 de noviembre de 2011
4 de abril de 2010
©resistance studies
cc traducción c. lísperguer

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