china identifica compañías parias
[Jane Hooker y Walt Bogdanich] China promete controlar sus productos destinados a la exportación.
Pekín, China. Inspectores chinos reconocieron por primera vez el jueves que dos compañías chinas se habían hecho culpables de delitos por etiquetar fraudulentamente, y vender un ingrediente tóxico que terminó en una medicina contra el catarro, causando la muerte de al menos cien personas en Panamá el año pasado.
Pero los inspectores dijeron que la principal responsabilidad por las muertes recaía en los importadores en España y Panamá, que sabían que el producto no era apropiado para su uso en medicinas, aunque era vendido de todos modos con ese propósito. Las dos compañías importadores rechazan la acusación.
Las compañías chinas vendieron el ingrediente como glicerina con un grado de pureza de 99.5 por ciento, pese a que contenía un 24 por ciento de glicol dietileno, un veneno utilizado normalmente en los anticongelantes, de acuerdo a la Administración de Fármacos y Alimentos [FDA] de Estados Unidos.
Las autoridades chinas dijeron también que la pasta dental hecha en China y que contenía pequeñas cantidades de glicol dietileno no constituía un peligro y que su fabricante no había violado ninguna ley. Pero los funcionarios también dijeron que se impondrían nuevos controles para el uso del químico en la pasta dental y que se empezaría a controlar la pasta dental destinada a la exportación.
Decenas de miles de tubos de pasta dental hecha en China fueron requisados hace poco en Panamá y en al menos otros tres países latinoamericanos. La FDA está ahora analizando muestras de todas las pastas dentales chinas importadas por Estados Unidos.
Las conclusiones del gobierno chino reflejan su creciente preocupación por la percepción de que las normas de seguridad el país no están a la altura de su próspera economía de exportación.
Hace poco funcionarios norteamericanos acusaron a dos compañías chinas de enviar a sabiendas alimento para mascotas con ingredientes contaminados con un químico industrial, melamina, a Estados Unidos, provocando uno de los retiros de alimentos para mascotas más grandes de la historia. Tras rechazar inicialmente las acusaciones, funcionarios de Pekín prohibieron el uso de la melamina y han prometido mejorar las normas de seguridad de los alimentos y controlar la exportación.
Las autoridades chinas reabrieron una investigación sobre la intoxicación en Panamá en respuesta a un informe publicado el mes pasado en el New York Times que trazó los 45 barriles de veneno mal etiquetado desde la ciudad portuaria de Panamá, Colón, pasando por Barcelona, España, a una compañía exportadora de Pekín y finalmente hasta su origen en la Fábrica de Glicerina de Taixing, en el delta del Yangtze.
Wei Chuanzhong, director de la investigación y subdirector de la Administración General de Cuarentenas, Inspección y Control de Calidad, reconoció que la fábrica había etiquetado los barriles como glicerina pese a que contenían considerables cantidades de glicol dietileno. Un funcionario confirmó que habían pasado por la aduana china como glicerina.
Pero Wei dijo que el fabricante y su exportador, CNSC Fortune Way en Pekín, habían vendido los barriles como glicerina TD -sucedáneo de glicerina- para usos industriales, no médicos. Además acusó a la compañía importadora panameña, el Medicom Business Group, de haber adulterado los documentos, describiendo la substancia como adecuada para usos farmacéuticos.
Wei no explicó por qué las compañías chinas habían exportado los barriles con certificados de análisis falsos, indicando que su contenido era glicerina de un grado de pureza del 99.5 por ciento. Ambas compañías están siendo investigadas, de acuerdo a las autoridades chinas.
La FDA dijo que la explicación china pasaba por alto un hecho crítico: el engaño había empezado con los certificados de análisis falsos. "Si los barriles hubiesen contenido glicerina 99.5 por ciento pura, en Panamá no habría muerto nadie", dijo la agencia.
Ascensión Criado, gerente de la compañía exportadora española Rasfer International, dijo que China no tenía argumentos para criticar a su compañía. "Nosotros pedimos glicerina y ellos nos mandaron otra cosa", dijo.
Valentín Jaén, abogado de Medicom, el importador panameño, dijo: "El estado chino no tiene ni motivos ni justificación para acusar a Medicom de nada".
El jueves Nicaragua anunció el requisamiento de más de cuarenta mil tubos de pasta dental china de la que se sospecha que puede estar contaminada, y que en el mercado local todavía se pueden encontrar ochenta mil tubos de pasta dental Excel y Mr. Cool.
Pero los inspectores dijeron que la principal responsabilidad por las muertes recaía en los importadores en España y Panamá, que sabían que el producto no era apropiado para su uso en medicinas, aunque era vendido de todos modos con ese propósito. Las dos compañías importadores rechazan la acusación.
Las compañías chinas vendieron el ingrediente como glicerina con un grado de pureza de 99.5 por ciento, pese a que contenía un 24 por ciento de glicol dietileno, un veneno utilizado normalmente en los anticongelantes, de acuerdo a la Administración de Fármacos y Alimentos [FDA] de Estados Unidos.
Las autoridades chinas dijeron también que la pasta dental hecha en China y que contenía pequeñas cantidades de glicol dietileno no constituía un peligro y que su fabricante no había violado ninguna ley. Pero los funcionarios también dijeron que se impondrían nuevos controles para el uso del químico en la pasta dental y que se empezaría a controlar la pasta dental destinada a la exportación.
Decenas de miles de tubos de pasta dental hecha en China fueron requisados hace poco en Panamá y en al menos otros tres países latinoamericanos. La FDA está ahora analizando muestras de todas las pastas dentales chinas importadas por Estados Unidos.
Las conclusiones del gobierno chino reflejan su creciente preocupación por la percepción de que las normas de seguridad el país no están a la altura de su próspera economía de exportación.
Hace poco funcionarios norteamericanos acusaron a dos compañías chinas de enviar a sabiendas alimento para mascotas con ingredientes contaminados con un químico industrial, melamina, a Estados Unidos, provocando uno de los retiros de alimentos para mascotas más grandes de la historia. Tras rechazar inicialmente las acusaciones, funcionarios de Pekín prohibieron el uso de la melamina y han prometido mejorar las normas de seguridad de los alimentos y controlar la exportación.
Las autoridades chinas reabrieron una investigación sobre la intoxicación en Panamá en respuesta a un informe publicado el mes pasado en el New York Times que trazó los 45 barriles de veneno mal etiquetado desde la ciudad portuaria de Panamá, Colón, pasando por Barcelona, España, a una compañía exportadora de Pekín y finalmente hasta su origen en la Fábrica de Glicerina de Taixing, en el delta del Yangtze.
Wei Chuanzhong, director de la investigación y subdirector de la Administración General de Cuarentenas, Inspección y Control de Calidad, reconoció que la fábrica había etiquetado los barriles como glicerina pese a que contenían considerables cantidades de glicol dietileno. Un funcionario confirmó que habían pasado por la aduana china como glicerina.
Pero Wei dijo que el fabricante y su exportador, CNSC Fortune Way en Pekín, habían vendido los barriles como glicerina TD -sucedáneo de glicerina- para usos industriales, no médicos. Además acusó a la compañía importadora panameña, el Medicom Business Group, de haber adulterado los documentos, describiendo la substancia como adecuada para usos farmacéuticos.
Wei no explicó por qué las compañías chinas habían exportado los barriles con certificados de análisis falsos, indicando que su contenido era glicerina de un grado de pureza del 99.5 por ciento. Ambas compañías están siendo investigadas, de acuerdo a las autoridades chinas.
La FDA dijo que la explicación china pasaba por alto un hecho crítico: el engaño había empezado con los certificados de análisis falsos. "Si los barriles hubiesen contenido glicerina 99.5 por ciento pura, en Panamá no habría muerto nadie", dijo la agencia.
Ascensión Criado, gerente de la compañía exportadora española Rasfer International, dijo que China no tenía argumentos para criticar a su compañía. "Nosotros pedimos glicerina y ellos nos mandaron otra cosa", dijo.
Valentín Jaén, abogado de Medicom, el importador panameño, dijo: "El estado chino no tiene ni motivos ni justificación para acusar a Medicom de nada".
El jueves Nicaragua anunció el requisamiento de más de cuarenta mil tubos de pasta dental china de la que se sospecha que puede estar contaminada, y que en el mercado local todavía se pueden encontrar ochenta mil tubos de pasta dental Excel y Mr. Cool.
Jake Hooker informó desde Pekín, y Walt Bogdanich desde Nueva York. Renwick McLean contribuyó desde Nueva York, y R. M. Koster desde Panamá.
14 de junio de 2007
31 de mayo de 2007
©new york times
©traducción mQh
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