caballeros del templo indultados
[Philip Pullella] Caballeros del Templo indultados después de 700 años.
Vaticano. Los Caballeros del Templo, la orden militar cristiana de la Edad Media acusada de herejía y delitos sexuales, será pronto rehabilitada cuando el Vaticano publique documentos judiciales que había conservado celosamente durante setecientos años.
Una reproducción de las actas de los juicios contra los templarios, ‘Processus Contra Templarios -Papal Inquiry into the Trial of the Templars' [Proceso contra templarios: pesquisa papal de los juicios de los templarios], es una inmensa obra y mucho más que un libro -y tiene un precio de 5.900 euros, unos 8.333 dólares.
"Esto es un hito, porque es la primera vez que el Vaticano libera estos documentos, que le da un sello de autoridad a todo el proyecto", dijo la profesora Barbara Frale, historiadora medievalista en los Archivos Secretos del Vaticano.
"Antes no había nada que ofreciera a los estudiosos, documentos originales de los juicios de los templarios", dijo a Reuters en una conferencia telefónica antes de la presentación oficial del trabajo el 25 de octubre.
La epopeya viene en una caja de cuero blando que incluye un libro en gran formato con comentarios académicos, reproducciones de los pergaminos originales en latín y, para atormentar a los aficionados a los templarios, réplicas de los sellos en cera usados por los inquisidores del siglo catorce.
Reuters pudo hojear el trabajo, del que se han impreso solamente 799 ejemplares numerados.
Un pergamino de medio metro de ancho y unos dos metros de largo es tan detallado que incluye reproducciones de manchas y otras imperfecciones detectadas en los originales.
El Papa Benedicto recibirá el primer juego, publicado por los Archivos Secretos del Vaticano en colaboración con la fundación cultural italiana Scrinium, que actuó de curador y se quedará con los derechos exclusivos de distribución.
Los templarios, cuyo nombre completo era ‘Pobres Soldados de Cristo y del Templo de Salomón', fueron fundados en 1119 por caballeros que juraron proteger a los peregrinos cristianos que visitaban Tierra Santa después de que los cruzados capturaran Jerusalén en 1099.
Los templarios acumularon enormes riquezas y contribuyeron a financiar las guerras de algunos monarcas europeos. Las leyendas sobre sus tesoros escondidos, rituales secretos y poder han sido tratados en películas durante años, tales como ‘El código Da Vinci'.
Los caballeros también han sido retratados como guardianes del legendario Santo Grial, la copa usada por Cristo en la Última Cena antes de su crucifixión.
El Vaticano supone que la mayoría de los ejemplares los comprarán bibliotecas especializadas de universidades prestigiosas y por académicos importantes en la historia medievalista.
Quemadas en la Hoguera
Los templarios empezaron a declinar después de que los musulmanes reconquistaran Tierra Santa a fines del siglo trece y fueran acusados por el Rey Felipe IV de Francia, su principal enemigo. Sus supuestos delitos incluían negar a Cristo y adorar clandestinamente a ídolos.
La parte más titilante de los documentos es el llamado Pergamino Chinon, que contiene frases en las que el Papa Clemente V absuelve a los templarios de los cargos de herejía, que habían sido la columna vertebral de los intentos de eliminarlos del Rey Felipe de eliminarlos.
Los templarios fueron quemados en la hoguera por herejía por agentes del Rey Felipe después de que estos confesaran, lo que la mayoría de los historiadores creen que fueron confesiones obtenidas bajo apremios.
El pergamino, conocido también como la Hoja de Chinon, estuvo "extraviado" en los archivos del Vaticano hasta 2001, cuando Frale tropezó con ellos.
"En algún momento el pergamino fue catalogado incorrectamente. Al principio no creí lo que estaba viendo. No lo creía", dijo.
"Este era el documento de un montón de historiadores andaban buscando", dijo la académica de 37 años.
Felipe estaba pesadamente endeudado con los templarios, que lo habían ayudado a financiar sus guerras, y deshacerse de ellos era un modo conveniente de cancelar sus deudas, dicen algunos historiadores.
Frale dijo que el Papa Clemente estaba convencido de que, aunque habían cometido graves pecados, los templarios no eran herejes.
Escupiendo la Cruz
Se cree que su ceremonia de iniciación incluía escupir a la cruz, pero Frale dijo que ellos lo justificaban como un ritual de obediencia como preparación para el caso de que fueran capturados por los musulmanes. También se decía que practicaban la sodomía.
"Dicho llanamente, el Papa reconocía que no eran herejes, pero sí culpables de muchos otros delitos menores, tales como maltratos, violencia y actos pecaminosos dentro de la orden", dijo. "Pero eso no es lo mismo que la herejía".
Pese a su convicción de que los templarios no eran culpables de herejía, en 1312 el Papa Clemente ordenó el desbande de los templarios por lo que Frale llamó "el bien de la Iglesia", después de repetidos enfrentamientos con el rey francés.
Frale describió los juicios contra los templarios entre 1307 y 1312 como una batalla de voluntades políticas entre Clemente y Felipe, y dijo que el documento quiere decir que los historiadores deben revisar la posición de Clemente.
"Esto permitirá que todos puedan ver cómo son en realidad estos documentos y desinflar las leyendas que están tan de moda en estos días", dijo.
Rosi Fontana, que ha ayudado al Vaticano a coordinar el proyecto, dijo: "Lo más increíble es que han pasado setecientos años y a la gente todavía le fascina todo esto".
"La reproducción precisa de los pergaminos permitirá que los investigadores los puedan estudiar, tocar, admirarlos como si tuvieran en sus manos los originales", dijo Fontana.
"Pero incluso mejor, quiere decir que los originales no se deteriorarán tan rápidamente como ocurriría si fueran constantemente consultados", dijo.
Una reproducción de las actas de los juicios contra los templarios, ‘Processus Contra Templarios -Papal Inquiry into the Trial of the Templars' [Proceso contra templarios: pesquisa papal de los juicios de los templarios], es una inmensa obra y mucho más que un libro -y tiene un precio de 5.900 euros, unos 8.333 dólares.
"Esto es un hito, porque es la primera vez que el Vaticano libera estos documentos, que le da un sello de autoridad a todo el proyecto", dijo la profesora Barbara Frale, historiadora medievalista en los Archivos Secretos del Vaticano.
"Antes no había nada que ofreciera a los estudiosos, documentos originales de los juicios de los templarios", dijo a Reuters en una conferencia telefónica antes de la presentación oficial del trabajo el 25 de octubre.
La epopeya viene en una caja de cuero blando que incluye un libro en gran formato con comentarios académicos, reproducciones de los pergaminos originales en latín y, para atormentar a los aficionados a los templarios, réplicas de los sellos en cera usados por los inquisidores del siglo catorce.
Reuters pudo hojear el trabajo, del que se han impreso solamente 799 ejemplares numerados.
Un pergamino de medio metro de ancho y unos dos metros de largo es tan detallado que incluye reproducciones de manchas y otras imperfecciones detectadas en los originales.
El Papa Benedicto recibirá el primer juego, publicado por los Archivos Secretos del Vaticano en colaboración con la fundación cultural italiana Scrinium, que actuó de curador y se quedará con los derechos exclusivos de distribución.
Los templarios, cuyo nombre completo era ‘Pobres Soldados de Cristo y del Templo de Salomón', fueron fundados en 1119 por caballeros que juraron proteger a los peregrinos cristianos que visitaban Tierra Santa después de que los cruzados capturaran Jerusalén en 1099.
Los templarios acumularon enormes riquezas y contribuyeron a financiar las guerras de algunos monarcas europeos. Las leyendas sobre sus tesoros escondidos, rituales secretos y poder han sido tratados en películas durante años, tales como ‘El código Da Vinci'.
Los caballeros también han sido retratados como guardianes del legendario Santo Grial, la copa usada por Cristo en la Última Cena antes de su crucifixión.
El Vaticano supone que la mayoría de los ejemplares los comprarán bibliotecas especializadas de universidades prestigiosas y por académicos importantes en la historia medievalista.
Quemadas en la Hoguera
Los templarios empezaron a declinar después de que los musulmanes reconquistaran Tierra Santa a fines del siglo trece y fueran acusados por el Rey Felipe IV de Francia, su principal enemigo. Sus supuestos delitos incluían negar a Cristo y adorar clandestinamente a ídolos.
La parte más titilante de los documentos es el llamado Pergamino Chinon, que contiene frases en las que el Papa Clemente V absuelve a los templarios de los cargos de herejía, que habían sido la columna vertebral de los intentos de eliminarlos del Rey Felipe de eliminarlos.
Los templarios fueron quemados en la hoguera por herejía por agentes del Rey Felipe después de que estos confesaran, lo que la mayoría de los historiadores creen que fueron confesiones obtenidas bajo apremios.
El pergamino, conocido también como la Hoja de Chinon, estuvo "extraviado" en los archivos del Vaticano hasta 2001, cuando Frale tropezó con ellos.
"En algún momento el pergamino fue catalogado incorrectamente. Al principio no creí lo que estaba viendo. No lo creía", dijo.
"Este era el documento de un montón de historiadores andaban buscando", dijo la académica de 37 años.
Felipe estaba pesadamente endeudado con los templarios, que lo habían ayudado a financiar sus guerras, y deshacerse de ellos era un modo conveniente de cancelar sus deudas, dicen algunos historiadores.
Frale dijo que el Papa Clemente estaba convencido de que, aunque habían cometido graves pecados, los templarios no eran herejes.
Escupiendo la Cruz
Se cree que su ceremonia de iniciación incluía escupir a la cruz, pero Frale dijo que ellos lo justificaban como un ritual de obediencia como preparación para el caso de que fueran capturados por los musulmanes. También se decía que practicaban la sodomía.
"Dicho llanamente, el Papa reconocía que no eran herejes, pero sí culpables de muchos otros delitos menores, tales como maltratos, violencia y actos pecaminosos dentro de la orden", dijo. "Pero eso no es lo mismo que la herejía".
Pese a su convicción de que los templarios no eran culpables de herejía, en 1312 el Papa Clemente ordenó el desbande de los templarios por lo que Frale llamó "el bien de la Iglesia", después de repetidos enfrentamientos con el rey francés.
Frale describió los juicios contra los templarios entre 1307 y 1312 como una batalla de voluntades políticas entre Clemente y Felipe, y dijo que el documento quiere decir que los historiadores deben revisar la posición de Clemente.
"Esto permitirá que todos puedan ver cómo son en realidad estos documentos y desinflar las leyendas que están tan de moda en estos días", dijo.
Rosi Fontana, que ha ayudado al Vaticano a coordinar el proyecto, dijo: "Lo más increíble es que han pasado setecientos años y a la gente todavía le fascina todo esto".
"La reproducción precisa de los pergaminos permitirá que los investigadores los puedan estudiar, tocar, admirarlos como si tuvieran en sus manos los originales", dijo Fontana.
"Pero incluso mejor, quiere decir que los originales no se deteriorarán tan rápidamente como ocurriría si fueran constantemente consultados", dijo.
23 de octubre de 2007
©reuters
©traducción mQh
1 comentario
Victor Mendoza Meneses -
Creo que este documento se lo debe publicar lo mas pronto posible para bien de las instituciones que se inspiran en Los Caballeros Templarios y de Iglesia Católica.