conspiración neo-nazi contra obama
Seema Mehta contribuyó a esta nota. 27 de octubre de 2008
Los conspiradores también discutieron el asesinato de 88 afroamericanos y la decapitación de otros catorce en una ola de homicidios en todo el país, escogiendo los números 88 y catorce porque, según la policía, "tienen un significado especial en el movimiento del Poder Blanco".
Daniel Cowart, 20, de Bells, Tennessee, y Paul Schlesselman, 18, de West Helena, Arkansas, fueron acusados en un tribunal de distrito en Nashville de posesión ilegal de una escopeta recortada, conspiración para cometer un atraco contra una tienda de armas y por amenazar al candidato presidencial.
De acuerdo Jim Cavanaugh, agente especial de la Oficina Federal de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF), Obama era el objetivo final.
"Dijeron que ese sería su último acto", dijo Cavanaugh. "Dijeron que tratarían de matar al senador Obama. No creían que lo lograran, pero que morirían en el intento".
El comité de campaña de Obama se negó a comentar la conspiración, que es su reacción normal cuando se trata de asuntos que tienen que ver con la seguridad.
Brian A. Weaks, agente especial de la ATF e investigador jefe en el caso, dijo en una declaración ante el tribunal que los dos acusados habían confesado a las autoridades que esperaban realizar con estilo el intento de asesinato.
"Los dos dijeron que se proponían llevar esmoquin blanco y sombrero de copa durante el atentado", dijo Weaks. "Los dos dijeron que sabían que los matarían y estaban dispuestos a morir en el atentado".
Para prepararse los dos dispararon desde la ventana de una iglesia y escribieron luego marcas con tiza -incluyendo suásticas- en su coche. En el capó garabatearon los números 88 y catorce.
La octava letra del alfabeto es la H, y dos veces el número 8 significa ‘HH’. Es la taquigrafía para el saludo nazi ‘Heil Hitler’. Y el catorce corresponde con el número de palabras en el lema del Poder Blanco: "Debemos asegurar la vida de nuestro pueblo y el futuro de nuestros hijos blancos".
©los angeles times
cc traducción mQh
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