lectura del rescate de los 33
columna de lísperguer
Editorial de La Nación augura nueva cultura de prevención y seguridad laboral.
El rescate de los mineros ofrece numerosas lecturas, algunas literarias. Con algunos de sus episodios y personajes se puede escribir una trama contundente. Que el presidente Piñera haya rescatado del fondo de la tierra al hijo de un dirigente sindical asesinado durante la dictadura, es una potentísima imagen. El padre del minero 33 fue asesinado precisamente por luchar para que en su gremio no ocurriesen accidentes como el que le ocurriría a su hijo, cuando el país era presa, como hoy, de la codicia y la barbarie capitalistas. Su rescate por un presidente de derechas, y la promesa de este de que en el futuro la seguridad de los trabajadores será central en el país, puede ser un punto de partida para una nueva relación entre capital y trabajo. Potentísima es también la historia del último rescatista, que halló hace un tiempo, en el desierto, los cadáveres de tres chilenos ejecutados y desaparecidos por la dictadura. Hay muchas cosas que no pueden volver a ocurrir.
lísperguer
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