querellas por violencia sexual
Violencia sexual en dictadura: presentan nuevas querellas.Las detenidas sufrieron violaciones y vejámenes sistemáticos.
[Carolina Miranda C.] Santiago, Chile. Cuatro acciones judiciales interpondrá hoy, en la Corte de Apelaciones de Santiago, la ONG Corporación Humanas con el fin de poner sobre el tapete la violencia sexual como método de tortura y obligar al Estado a investigar estos hechos a la luz del derecho internacional, sancionar a los culpables y reparar a las víctimas.
Hoy, a las 11 horas en la Corte de Apelaciones de Santiago, la Corporación Humanas, a través de la abogada Paulina Maturana, dará un paso más en el esfuerzo de la ONG para que se investigue la violencia sexual aplicada, como método de tortura, a víctimas de la dictadura.
La presentación de cuatro nuevas querellas será realizada en el marco de la investigación sobre violaciones de DDHH que realiza el juez Mario Carroza y que contempla 725 casos de ejecutados políticos y las causas de la muerte del presidente Salvador Allende.
En la práctica, Corporación Humanas considera sustancial visibilizar la violencia sexual como método de tortura y por ende, obligar al Estado chileno a investigar estos hechos a la luz del derecho internacional, sancionar a los culpables y reparar a las víctimas.
Las acciones judiciales serán por delitos de asociación ilícita para secuestrar, torturar y aplicar tratos crueles, inhumanos y degradantes en los casos de Elizabeth Rubio, Catalina Palma, Ximena Zavala y Carmen Gloria Díaz, que sufrieron violencia sexual durante el régimen militar.
Un aspecto relevante es que -en estas nuevas querellas- se presentan casos de mujeres chilenas que fueron torturadas en Argentina, en el marco de la Operación Cóndor, lo que presenta un antecedente que permite no sólo concluir que la tortura fue una práctica sistemática en Chile, sino que también investigar la conexión entre las dictaduras de cono sur.
Este hecho, asegura la abogada Maturana, "permitirá a la Justicia Chilena investigar y establecer la existencia de una asociación ilícita entre las dictaduras de Chile y Argentina para la tortura de mujeres chilenas".
Hasta antes de la presentación de querellas por parte de Corporación Humanas, no existían procesos judiciales que apuntaran a la dimensión de género de la tortura. En definitiva, explica la jurista, "no se ha considerado la especial situación de las mujeres víctimas de la dictadura, cuya forma de tortura fue el abuso sexual".
En diciembre, la Corporación Humanas interpuso la primera querella por violencia sexual como forma de tortura aplicada a Patricia Herrera, militante del Partido Socialista que fue detenida en 1974 y víctima de vejaciones.
Herrera tenía 19 años y era estudiante universitaria. Fue detenida en la noche del 27 de junio de 1974 y llevada a un centro de detención y tortura que había en la época bajo la Plaza de la Constitución, frente al Palacio de La Moneda, donde, mientras la tenían encañonada con una pistola, la violaron sistemáticamente durante 11 días.
Tras pasar por otros centros de tortura, un pabellón secreto en el que se convirtió en una "desaparecida" y por un campo de concentración, el 2 de septiembre de 1975 fue puesta en libertad y empezó su exilio en París.
"Es una querella simbólica, porque es la primera vez que estamos diciendo con todas sus letras: las mujeres fueron torturadas durante el gobierno militar y la forma de tortura que sufrieron fue la violencia sexual", dijo -en esa ocasión- Maturana.
La abogada ha señalado que durante el régimen militar miles de mujeres fueron violadas de forma "sistemática y generalizada".
Lo Que Dice el Derecho Internacional
Distintas normas internacionales prohíben la tortura. Chile ha suscrito:
· Convenios de Ginebra, relativos al Derecho Internacional Humanitario o derecho de los conflictos armados. En ellos, se define la aplicación de tortura como una infracción grave y se le califica como crimen de guerra. Se establece un régimen especial respecto a la prescripción, amnistía y punición por toda la Comunidad Internacional.
· La Declaración Sobre Protección a Todas las Personas Contra la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos y Degradantes, adoptada en Resolución 3452 del 9 de Diciembre de 1975, que es el precedente de la Convención contra la Tortura.
· La Convención Internacional Contra la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos y Degradantes, que define tortura como "todo acto por el cual se infrinja intencionadamente a una persona dolores y sufrimientos graves, ya sea físico o mental, con el fin de obtener de ella o de un tercero información o una confesión, de castigarla por un acto que haya cometido o se sospeche que haya cometido o de intimidar o coaccionar a una persona o a otras o por cualquier razón basada en cualquier tipo de discriminación cuando dichos dolores sean ocasionados por funcionarios públicos u otras personas en ejercicio de funciones públicas a instigación suya o con su consentimiento o aquiescencia. No se considerarán torturas los dolores o sufrimientos que sean consecuencia únicamente de sanciones legítimas o sean inherentes o incidentales a éstas".
Garantías de No Repetición
En Chile, a pesar de que 3.399 mujeres prestaron su testimonio ante la Comisión Valech, existe un déficit de relatos de mujeres que se expresa en la ausencia de un análisis global de lo ocurrido con ellas en dictadura. Hasta antes de la presentación de querellas por parte de Corporación Humanas, no existían procesos judiciales que revelaran la dimensión de género de la tortura. En definitiva, no se ha considerado la especial situación de las mujeres víctimas de la dictadura, cuya forma de tortura fue el abuso sexual.
5 de febrero de 2011
3 de febrero de 2011
©la nación
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