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penas de libertad para pinochetistas


Oficiales (R) de la Armada cumplirán condena en libertad por muerte de socialista. Se trata del teniente (R) Pedro Arancibia Solar y el comandante (R) Sergio Mendoza Rojas, sentenciados a 5 y 3 años de prisión, por el homicidio calificado de Óscar Farías Urzúa ocurrido el 20 de septiembre de 1973.
Santiago, Chile. La Corte Suprema condenó este lunes a dos oficiales retirados de la Armada por el homicidio calificado de un opositor a la dictadura de Augusto Pinochet tras el golpe militar de 1973, informaron fuentes judiciales.
Los condenados, que por resolución del máximo tribunal chileno podrán cumplir sus penas en libertad vigilada y con firma periódica en un juzgado, son el teniente (R) Pedro Arancibia Solar, sentenciado a 5 años de prisión como autor y el comandante (R) Sergio Mendoza Rojas, condenado a 3 años como encubridor.
La víctima, Óscar Farías Urzúa, de 33 años, era miembro del Partido Socialista y funcionario de una empresa intervenida por el Estado, quien fue detenido en su lugar de trabajo por efectivos de la Armada el 12 de septiembre de 1973.

Se Rechazó Indemnización a la Familia
Farías fue conducido a la base aeronaval El Belloto y también a declarar a una Fiscalía Naval, murió el 20 de septiembre a consecuencia de tres disparos. La Armada entregó el cuerpo a su familia, que procedió a sepultarlo.
La II Sala Penal de la Corte Suprema, que condenó a los oficiales en votación dividida de 3-2, rechazó una demanda de indemnización presentada por la familia de la víctima.
Según organizaciones de derechos humanos, los condenados Arancibia Solar y Mendoza Rojas están también involucrados en la desaparición del dirigente socialista Jaime Aldoney, regidor de la localidad de Limache, quien fue detenido el 12 de septiembre de 1973 y llevado a la base El Belloto.

[La sentencia contó con la oposición de los jueces pinochetistas Nibaldo Segura y Rubén Ballesteros, que proponían aplicar la prescripción penal.]
[En la foto, el magistrado Segura.]
26 de julio de 2011
25 de julio de 2011
©la nación

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