demasiado islam
[Edmund Sanders] Laicos iraquíes temen que conservadores religiosos obtengan demasiado poder.
Bagdad, Iraq. Mientras la Asamblea Nacional provisional se prepara para votar un nuevo borrador de constitución, juristas y algunos dirigentes políticos advirtieron el miércoles que el reconocimiento explícito del islam podría dar a los conservadores religiosos del ala dura un firme control de un país que era en el pasado uno de los más laicos de Oriente Medio.
En un intento de cerrar un compromiso entre las comunidades religiosas y laicas del país, la propuesta constitución iraquí reserva un lugar central a la ley islámica en el sistema jurídico, al mismo tiempo que garantiza las libertades personales y la democracia.
Pero el ambiguo lenguaje de la formulación y disposiciones aparentemente contradictorias no dejaron a ningún lado contento, y si se aprueba, el documento será probablemente materia de debate en tribunales iraquíes durante muchos años.
Por ejemplo, el borrador de la constitución declara al islam la "religión oficial" de Iraq y "una importante fuente" de legislación, antes que "la" fuente, como pretendían muchos chiíes conservadores. Pero los laicos siguen alarmados por una cláusula que prohíbe toda ley que "contradiga las normas indisputables del islam".
Los críticos temen que la disposición pueda ser usada por ultras religiosos para imponer una estricta versión de la ley islámica, tales como prohibir el alcohol, restringir los derechos de las mujeres e imponer los severos castigos coránicos, como la lapidación.
El borrador de la constitución iraquí también invoca la igualdad de los sexos y el derecho a la intimidad y prohíbe leyes que contradigan la democracia o las "libertades básicas" garantizadas por la constitución.
"No es un documento viable", dijo Abdullahi Ahmed An-Naim, un académico musulmán y profesor de leyes en la Universidad de Emory. "Barrieron sus diferencias debajo de la alfombra y redactaron un documento por el que pudieran votar. Es una bomba de tiempo que estallará tan pronto como se implemente", dijo.
An-Naim dijo que una decisión similar de ajustar las leyes al islam por el gobierno árabe de Sudán en los años ochenta, encendió una guerra civil de 20 años tras rebelarse los cristianos del sur. "Fue un desastre".
En Iraq, Iyad Jamal Din, un clérigo musulmán chií y activista político que se opone a revolver la religión con la política, expresó preocupaciones similares. "Trata de conservar los derechos humanos, pero dentro de una sociedad sofocante que es una clonación del sistema iraní", dijo. "Temo que esta constitución nos conduzca a una sociedad tenebrosa controlada por extremistas".
Aunque la constitución iraquí no intenta instalar a un "líder supremo" como el ayatollah Ali Khamenei de Irán, ya están surgiendo interrogantes sobre algunas disposiciones. Por ejemplo, ¿cuáles son las "normas indisputables" del islam? ¿Qué quiere decir "contradecir"? Ya que el Corán prohíbe el alcohol, ¿debería Iraq convertirse en un país abstemio? ¿Deben las mujeres cubrirse la cabeza? ¿Si un ladrón es condenado a una pena de prisión, se contradice al Corán, que estipula la amputación de una mano?
"El problema es que no hay acuerdo sobre estos asuntos", dijo Peter W. Galbraith, ex embajador norteamericano en Croacia que asesoró sobre la constitución a políticos kurdos. "Permite que cualquier clérigo haga su propia interpretación de la ley y abre la puerta a toda una amplia gama de abusos".
Galbraith dijo que el borrador estaba lejos del tipo de gobierno democrático que el gobierno de Bush esperaba instalar en Iraq. "Ahora Estados Unidos tiene que reconocer que derrocaron a Saddam Hussein para remplazarlo por un régimen pro-iraní", dijo.
Los negociadores kurdos habían hecho objeciones a muchas de las disposiciones, pero finalmente accedieron a aprobarlas después de que se incorporara una disposición que les permitirá redactar su propia constitución regional, que podría pasar por encima de la constitución nacional en temas como la religión y los derechos humanos, dijo Galbraith.
Por lo mismo, los chiíes en el sur intentarían aprobar una constitución regional con reglas todavía más estrictas que las nacionales, agregó.
Funcionarios estadounidenses en Washington e Iraq han encomiado el borrador. El presidente Bush observó que una disposición establece que se destine a mujeres un 25 por ciento de los escaños parlamentarios.
Zalmay Khalilzad, el embajador norteamericano en Iraq, dijo que la constitución era la mejor posible a la luz de las diferencias religiosas y étnicas de Iraq. Dijo que el documento reflejaba con precisión las opiniones de muchos iraquíes, que creían firmemente que el islam debería jugar un papel en el estado.
"Esta es una síntesis de tradiciones musulmanas y principios universales de democracia y derechos humanos", dijo Khalilzad a los periodistas luego que, esta semana, se sometiera el borrador a la aprobación de la Asamblea Nacional. "Abre un nuevo camino para otros en el futuro".
Como enviado estadounidense a Afganistán, Khalilzad supervisó un párrafo de la constitución que da al islam todavía mayor autoridad que el borrador iraquí. Pero la constitución afgana fue considerada por muchos en Occidente como un paso adelante debido que era mucho más liberal que el régimen talibán que remplazaba.
En Iraq, no-musulmanes dijeron que estaban angustiados acerca de sus derechos bajo la propuesta de constitución. Parado frente a una hilera de botellas de whisky de color ámbar, el dependiente Bassam Aboudi, cristiano, se está preparando para más intimidaciones de fanáticos religiosos.
Cientos de dueños de licorerías han cerrado sus tiendas o huido del país en medio de atentados con bomba e intentos de asesinato a manos de islamitas. Si el país adopta oficialmente la ley islámica, dijo Aboudi, él se unirá al éxodo. "Esto es lo que está llevando a tanta gente a abandonar el país".
Defensores de los derechos de la mujer, que habían esperado libertades adicionales, también expresaron su desilusión. Están especialmente preocupadas sobre la posición de un popular y antiguo código civil que resuelve pleitos en torno a asuntos familiares, tales como el divorcio, la tutoría de los hijos y las herencias.
El borrador no menciona la ley, pero se refiere a saldar esas materias basándose en creencias religiosas, evocando el espectro de los tribunales religiosos islámicos.
"Las mujeres iraquíes perderán mucho si se aprueba esta constitución", dijo Suha Azzawi, profesor en la Universidad de Bagdad que es miembro del comité constitucional.
Líderes religiosos, como el clérigo chií más importante de Iraq, el gran ayatollah Ali Sistani, esperaban que la constitución diera al islam un papel todavía más prominente, convirtiéndolo en "la" fuente de toda legislación, dijo el primer ministro Ibrahim Jafari, también chií. También trataron de incorporar una posición especial para los clérigos chiíes de la ciudad de Nayaf, pero dejaron de lado la cláusula cuando se opusieron los kurdos. A cambio, ganaron la disposición que prohíbe las leyes que contradicen al islam.
Líderes chiíes dijeron que el borrador está bien equilibrado.
"La democracia no contradice el islam", dijo Humam Hamoodi, presidente de la comisión de redacción de la constitución.
Juristas dicen que las inclinaciones islámicas en el borrador de constitución son de tipo medio si se las compara con otras constituciones del mundo musulmán. No es en absoluto tan severa como la de Irán, donde el islam es supremo, pero es más conservadora que la del Líbano, un país musulmán-cristiano cuya constitución no menciona la religión.
El nuevo texto iraquí se desvía de las constituciones iraquíes durante el dominio británico y el régimen de Saddam Hussein, que mencionaban en general el "espíritu del islam" como parte del tejido de la nación.
Luego de su aprobación en la Asamblea Nacional, será sometido a un referéndum nacional en octubre. Si se adopta, las probables batallas jurídicas para definir la constitución quedará en manos de una nueva Corte Suprema, que incluirá a clérigos islámicos y juristas. Borradores anteriores estipulaban que los clérigos debían tomar parte de la corte, pero los detalles de su composición serán ahora dejados en manos de los legisladores.
Un importante abogado iraquí dijo que no preveía una avalancha de pleitos para probar los límites de la constitución.
"Después de todo lo que ha pasado Iraq, todos los problemas, la gente no quiere volver a revolver las cosas", dijo Tariq Harb, un conocido jurista que apoya el borrador. "Están cansados de pelear".
Caesar Ahmed contribuyó a este reportaje.
26 de agosto de 2005
©los angeles times
©traducción mQh
En un intento de cerrar un compromiso entre las comunidades religiosas y laicas del país, la propuesta constitución iraquí reserva un lugar central a la ley islámica en el sistema jurídico, al mismo tiempo que garantiza las libertades personales y la democracia.
Pero el ambiguo lenguaje de la formulación y disposiciones aparentemente contradictorias no dejaron a ningún lado contento, y si se aprueba, el documento será probablemente materia de debate en tribunales iraquíes durante muchos años.
Por ejemplo, el borrador de la constitución declara al islam la "religión oficial" de Iraq y "una importante fuente" de legislación, antes que "la" fuente, como pretendían muchos chiíes conservadores. Pero los laicos siguen alarmados por una cláusula que prohíbe toda ley que "contradiga las normas indisputables del islam".
Los críticos temen que la disposición pueda ser usada por ultras religiosos para imponer una estricta versión de la ley islámica, tales como prohibir el alcohol, restringir los derechos de las mujeres e imponer los severos castigos coránicos, como la lapidación.
El borrador de la constitución iraquí también invoca la igualdad de los sexos y el derecho a la intimidad y prohíbe leyes que contradigan la democracia o las "libertades básicas" garantizadas por la constitución.
"No es un documento viable", dijo Abdullahi Ahmed An-Naim, un académico musulmán y profesor de leyes en la Universidad de Emory. "Barrieron sus diferencias debajo de la alfombra y redactaron un documento por el que pudieran votar. Es una bomba de tiempo que estallará tan pronto como se implemente", dijo.
An-Naim dijo que una decisión similar de ajustar las leyes al islam por el gobierno árabe de Sudán en los años ochenta, encendió una guerra civil de 20 años tras rebelarse los cristianos del sur. "Fue un desastre".
En Iraq, Iyad Jamal Din, un clérigo musulmán chií y activista político que se opone a revolver la religión con la política, expresó preocupaciones similares. "Trata de conservar los derechos humanos, pero dentro de una sociedad sofocante que es una clonación del sistema iraní", dijo. "Temo que esta constitución nos conduzca a una sociedad tenebrosa controlada por extremistas".
Aunque la constitución iraquí no intenta instalar a un "líder supremo" como el ayatollah Ali Khamenei de Irán, ya están surgiendo interrogantes sobre algunas disposiciones. Por ejemplo, ¿cuáles son las "normas indisputables" del islam? ¿Qué quiere decir "contradecir"? Ya que el Corán prohíbe el alcohol, ¿debería Iraq convertirse en un país abstemio? ¿Deben las mujeres cubrirse la cabeza? ¿Si un ladrón es condenado a una pena de prisión, se contradice al Corán, que estipula la amputación de una mano?
"El problema es que no hay acuerdo sobre estos asuntos", dijo Peter W. Galbraith, ex embajador norteamericano en Croacia que asesoró sobre la constitución a políticos kurdos. "Permite que cualquier clérigo haga su propia interpretación de la ley y abre la puerta a toda una amplia gama de abusos".
Galbraith dijo que el borrador estaba lejos del tipo de gobierno democrático que el gobierno de Bush esperaba instalar en Iraq. "Ahora Estados Unidos tiene que reconocer que derrocaron a Saddam Hussein para remplazarlo por un régimen pro-iraní", dijo.
Los negociadores kurdos habían hecho objeciones a muchas de las disposiciones, pero finalmente accedieron a aprobarlas después de que se incorporara una disposición que les permitirá redactar su propia constitución regional, que podría pasar por encima de la constitución nacional en temas como la religión y los derechos humanos, dijo Galbraith.
Por lo mismo, los chiíes en el sur intentarían aprobar una constitución regional con reglas todavía más estrictas que las nacionales, agregó.
Funcionarios estadounidenses en Washington e Iraq han encomiado el borrador. El presidente Bush observó que una disposición establece que se destine a mujeres un 25 por ciento de los escaños parlamentarios.
Zalmay Khalilzad, el embajador norteamericano en Iraq, dijo que la constitución era la mejor posible a la luz de las diferencias religiosas y étnicas de Iraq. Dijo que el documento reflejaba con precisión las opiniones de muchos iraquíes, que creían firmemente que el islam debería jugar un papel en el estado.
"Esta es una síntesis de tradiciones musulmanas y principios universales de democracia y derechos humanos", dijo Khalilzad a los periodistas luego que, esta semana, se sometiera el borrador a la aprobación de la Asamblea Nacional. "Abre un nuevo camino para otros en el futuro".
Como enviado estadounidense a Afganistán, Khalilzad supervisó un párrafo de la constitución que da al islam todavía mayor autoridad que el borrador iraquí. Pero la constitución afgana fue considerada por muchos en Occidente como un paso adelante debido que era mucho más liberal que el régimen talibán que remplazaba.
En Iraq, no-musulmanes dijeron que estaban angustiados acerca de sus derechos bajo la propuesta de constitución. Parado frente a una hilera de botellas de whisky de color ámbar, el dependiente Bassam Aboudi, cristiano, se está preparando para más intimidaciones de fanáticos religiosos.
Cientos de dueños de licorerías han cerrado sus tiendas o huido del país en medio de atentados con bomba e intentos de asesinato a manos de islamitas. Si el país adopta oficialmente la ley islámica, dijo Aboudi, él se unirá al éxodo. "Esto es lo que está llevando a tanta gente a abandonar el país".
Defensores de los derechos de la mujer, que habían esperado libertades adicionales, también expresaron su desilusión. Están especialmente preocupadas sobre la posición de un popular y antiguo código civil que resuelve pleitos en torno a asuntos familiares, tales como el divorcio, la tutoría de los hijos y las herencias.
El borrador no menciona la ley, pero se refiere a saldar esas materias basándose en creencias religiosas, evocando el espectro de los tribunales religiosos islámicos.
"Las mujeres iraquíes perderán mucho si se aprueba esta constitución", dijo Suha Azzawi, profesor en la Universidad de Bagdad que es miembro del comité constitucional.
Líderes religiosos, como el clérigo chií más importante de Iraq, el gran ayatollah Ali Sistani, esperaban que la constitución diera al islam un papel todavía más prominente, convirtiéndolo en "la" fuente de toda legislación, dijo el primer ministro Ibrahim Jafari, también chií. También trataron de incorporar una posición especial para los clérigos chiíes de la ciudad de Nayaf, pero dejaron de lado la cláusula cuando se opusieron los kurdos. A cambio, ganaron la disposición que prohíbe las leyes que contradicen al islam.
Líderes chiíes dijeron que el borrador está bien equilibrado.
"La democracia no contradice el islam", dijo Humam Hamoodi, presidente de la comisión de redacción de la constitución.
Juristas dicen que las inclinaciones islámicas en el borrador de constitución son de tipo medio si se las compara con otras constituciones del mundo musulmán. No es en absoluto tan severa como la de Irán, donde el islam es supremo, pero es más conservadora que la del Líbano, un país musulmán-cristiano cuya constitución no menciona la religión.
El nuevo texto iraquí se desvía de las constituciones iraquíes durante el dominio británico y el régimen de Saddam Hussein, que mencionaban en general el "espíritu del islam" como parte del tejido de la nación.
Luego de su aprobación en la Asamblea Nacional, será sometido a un referéndum nacional en octubre. Si se adopta, las probables batallas jurídicas para definir la constitución quedará en manos de una nueva Corte Suprema, que incluirá a clérigos islámicos y juristas. Borradores anteriores estipulaban que los clérigos debían tomar parte de la corte, pero los detalles de su composición serán ahora dejados en manos de los legisladores.
Un importante abogado iraquí dijo que no preveía una avalancha de pleitos para probar los límites de la constitución.
"Después de todo lo que ha pasado Iraq, todos los problemas, la gente no quiere volver a revolver las cosas", dijo Tariq Harb, un conocido jurista que apoya el borrador. "Están cansados de pelear".
Caesar Ahmed contribuyó a este reportaje.
26 de agosto de 2005
©los angeles times
©traducción mQh
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