treces veces más ricos que los pobres
[Víctor Toloza Jiménez] Economía de la Región del Biobío. Ingresos de hogares más ricos crecen dos dígitos y superan trece veces a los pobres.
Bíobío, Chile. La situación más delicada la vive la clase media, que puede pasar rápidamente a engrosar las filas de la pobreza, por ejemplo, si un integrante del hogar pierde el empleo.
Al considerar los subsidios estatales aportados al 20% de la población más pobre, la diferencia del ingreso monetario con el quinto quintil se reduce a casi once veces.
El 79,3% de la población regional, equivalente a un millón 546 mil personas no es pobre. Son considerados en esa categoría quienes disponen al menos de $47.099 mensuales, en caso de vivir en sector urbano, y $23.549, para quienes habitan en sectores rurales.
Los ingresos del 20% de los hogares más ricos de la Región del Biobío crecieron 10,7% en los últimos tres años y superan en casi 13 veces al 20% más pobre.
Este es uno de los detalles más finos que entrega la última Encuesta Casen para la zona, aunque en rigor los cinco quintiles mejoraron sus niveles de dinero disponible por generación propia.
Tramo con Más Ingresos
El 20% de los hogares más ricos de la Región del Biobío vive con un promedio de un millón 200 mil pesos mensuales, sumando un ingreso promedio per cápita de 406.056 pesos.
La cifra que beneficia a 104.707 hogares y unas 329 mil personas, registra 3,1 personas en promedio, vale decir, un integrante menos que los dos quintiles más pobres.
Uno de los detalles más impresionantes es que el 20% de población más rica de la Región Metropolitana duplica los ingresos del sector con más recursos a nivel local.
Los hogares del quinto quintil de Santiago viven con 2 millones 230 mil pesos.
Debe precisarse que los datos están construidos sobre los ingresos autónomos, vale decir, aquellos que genera la propia familia.
Por otra parte están los subsidios monetarios, que son los entregados por el Estado. Aquí se consideran el subsidio de agua potable, pensiones asistenciales, asignaciones familiares y subsidio de cesantía, entre otros.
No están considerados los subsidios no monetarios que incluyen los aportes indirectos a educación y salud entregados a través de los municipios.
Sumados el ingreso autónomo y los subsidios monetarios, resulta el ingreso monetario.
Es indudable que las materias claves para mejorar los indicadores aquí medidos se relacionan primero con la tenencia de empleo, y básicamente dos, considerando el promedio de los salarios promedio regionales.
Por otra parte, un aspecto citado es el relacionado con el número de integrantes de un hogar que es mínimo en los estratos más pudientes, incrementándose conforme avanzan las capas con menos medios económicos.
Esto mejora el nivel de remuneraciones por unidad, mejorando la calidad de vida de los integrantes, lo que parece estar asumido por los grupos que buscan más confort.
Promedios Regionales
El promedio del ingreso autónomo regional es uno de los peores el país, sólo supera a la Región de La Araucanía.
Esto considerando que aumentó un 16,2% (crecimiento real sobre IPC), desde poco más de $385 mil, hasta $448.045.
Mientras, el país lo hizo en 14.7%, de $534.735 a $613.206.
Al respecto, María Luz Gajardo, seremi de Serplac detalló los avances al respecto, particularmente los resultados de la focalización.
La lógica es la siguiente. El ingreso autónomo del 20% más vigoroso es 13.7 veces superior que el 20% más pobre, diferencia que se redujo en los últimos tres años, ya que en 2003 ascendía a 14.5 veces.
No obstante, al considerar los ingresos monetarios, la brecha disminuye a 10.7 veces, un punto menos que en 2003, confirmando la efectividad de las políticas sociales, afirmó Gajardo.
La importancia del aporte estatal es tan considerable que en el primer quintil el ingreso monetario es un 22% representado por los subsidios fiscales.
En el quintil cinco, ese aporte sólo representa el 0.5% del ingreso monetario.
"Esto no es dependencia de subsidios, es para mejorar la calidad de vida de quienes más lo necesitan", afirmó la seremi.
Quintiles
El total de hogares se divide en cinco grupos de 20% cada uno, equivalente a los quintiles.
El primer quintil es el más pobre, siguiendo consecutivamente con los tramos con mayor disponibilidad de ingreso.
La ya comentada abismante diferencia entre el tramo más rico y el más desposeído es tema aparte.
El ingreso promedio del primer quintil de hogares en la región apenas suma 87.386 pesos mensuales, con un ingreso máximo per cápita de 37.019 pesos mensuales.
En la misma idea, es llamativa la fragilidad de la clase media.
Por ejemplo, la pérdida de empleo, significa caer inmediatamente en los escalafones.
Composición
En la Región, del total de 1,8 millones de habitantes, poco más de 80 mil pertenecen al tramo más poderoso, mientras aproximadamente 576 mil son pobres.
Concepción y Talcahuano muestran índices mucho mejores, ya que en la capital regional, el ABC1 asciende al 11,9% (unas 25 mil personas) y el segmento E -el más desprotegidollega al 12,8%, casi 28 mil personas.
Mientras, en la ciudad puerto, el ABC1 es casi tres veces menor, en tanto que el sector en extrema pobreza llega al 16,3%, aproximadamente 40 mil personas.
En ambos casos, el grueso lo compone la clase media alta y baja, de acuerdo al Modelo Estimativo del Nivel Socioeconómico en los Hogares de Chile de la consultora Adimark.
Bíobío, Chile. La situación más delicada la vive la clase media, que puede pasar rápidamente a engrosar las filas de la pobreza, por ejemplo, si un integrante del hogar pierde el empleo.Al considerar los subsidios estatales aportados al 20% de la población más pobre, la diferencia del ingreso monetario con el quinto quintil se reduce a casi once veces.
El 79,3% de la población regional, equivalente a un millón 546 mil personas no es pobre. Son considerados en esa categoría quienes disponen al menos de $47.099 mensuales, en caso de vivir en sector urbano, y $23.549, para quienes habitan en sectores rurales.
Los ingresos del 20% de los hogares más ricos de la Región del Biobío crecieron 10,7% en los últimos tres años y superan en casi 13 veces al 20% más pobre.
Este es uno de los detalles más finos que entrega la última Encuesta Casen para la zona, aunque en rigor los cinco quintiles mejoraron sus niveles de dinero disponible por generación propia.
Tramo con Más Ingresos
El 20% de los hogares más ricos de la Región del Biobío vive con un promedio de un millón 200 mil pesos mensuales, sumando un ingreso promedio per cápita de 406.056 pesos.
La cifra que beneficia a 104.707 hogares y unas 329 mil personas, registra 3,1 personas en promedio, vale decir, un integrante menos que los dos quintiles más pobres.
Uno de los detalles más impresionantes es que el 20% de población más rica de la Región Metropolitana duplica los ingresos del sector con más recursos a nivel local.
Los hogares del quinto quintil de Santiago viven con 2 millones 230 mil pesos.
Debe precisarse que los datos están construidos sobre los ingresos autónomos, vale decir, aquellos que genera la propia familia.
Por otra parte están los subsidios monetarios, que son los entregados por el Estado. Aquí se consideran el subsidio de agua potable, pensiones asistenciales, asignaciones familiares y subsidio de cesantía, entre otros.
No están considerados los subsidios no monetarios que incluyen los aportes indirectos a educación y salud entregados a través de los municipios.
Sumados el ingreso autónomo y los subsidios monetarios, resulta el ingreso monetario.
Es indudable que las materias claves para mejorar los indicadores aquí medidos se relacionan primero con la tenencia de empleo, y básicamente dos, considerando el promedio de los salarios promedio regionales.
Por otra parte, un aspecto citado es el relacionado con el número de integrantes de un hogar que es mínimo en los estratos más pudientes, incrementándose conforme avanzan las capas con menos medios económicos.
Esto mejora el nivel de remuneraciones por unidad, mejorando la calidad de vida de los integrantes, lo que parece estar asumido por los grupos que buscan más confort.
Promedios Regionales
El promedio del ingreso autónomo regional es uno de los peores el país, sólo supera a la Región de La Araucanía.
Esto considerando que aumentó un 16,2% (crecimiento real sobre IPC), desde poco más de $385 mil, hasta $448.045.
Mientras, el país lo hizo en 14.7%, de $534.735 a $613.206.
Al respecto, María Luz Gajardo, seremi de Serplac detalló los avances al respecto, particularmente los resultados de la focalización.
La lógica es la siguiente. El ingreso autónomo del 20% más vigoroso es 13.7 veces superior que el 20% más pobre, diferencia que se redujo en los últimos tres años, ya que en 2003 ascendía a 14.5 veces.
No obstante, al considerar los ingresos monetarios, la brecha disminuye a 10.7 veces, un punto menos que en 2003, confirmando la efectividad de las políticas sociales, afirmó Gajardo.
La importancia del aporte estatal es tan considerable que en el primer quintil el ingreso monetario es un 22% representado por los subsidios fiscales.
En el quintil cinco, ese aporte sólo representa el 0.5% del ingreso monetario.
"Esto no es dependencia de subsidios, es para mejorar la calidad de vida de quienes más lo necesitan", afirmó la seremi.
Quintiles
El total de hogares se divide en cinco grupos de 20% cada uno, equivalente a los quintiles.
El primer quintil es el más pobre, siguiendo consecutivamente con los tramos con mayor disponibilidad de ingreso.
La ya comentada abismante diferencia entre el tramo más rico y el más desposeído es tema aparte.
El ingreso promedio del primer quintil de hogares en la región apenas suma 87.386 pesos mensuales, con un ingreso máximo per cápita de 37.019 pesos mensuales.
En la misma idea, es llamativa la fragilidad de la clase media.
Por ejemplo, la pérdida de empleo, significa caer inmediatamente en los escalafones.
Composición
En la Región, del total de 1,8 millones de habitantes, poco más de 80 mil pertenecen al tramo más poderoso, mientras aproximadamente 576 mil son pobres.
Concepción y Talcahuano muestran índices mucho mejores, ya que en la capital regional, el ABC1 asciende al 11,9% (unas 25 mil personas) y el segmento E -el más desprotegidollega al 12,8%, casi 28 mil personas.
Mientras, en la ciudad puerto, el ABC1 es casi tres veces menor, en tanto que el sector en extrema pobreza llega al 16,3%, aproximadamente 40 mil personas.
En ambos casos, el grueso lo compone la clase media alta y baja, de acuerdo al Modelo Estimativo del Nivel Socioeconómico en los Hogares de Chile de la consultora Adimark.
vtoloza@diarioelsur.cl
22 de julio de 2007
©el sur 
0 comentarios