quieren proteger a niños en reformatorios
24 de junio de 2008
Santiago, Chile. El Centro Derechos Humanos de la Universidad Diego Portales presentará una petición de medidas cautelares ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, CIDH, con el objeto de exigir al Estado de Chile la adopción de medidas de protección urgentes en favor de los adolescentes que se encuentran privados de libertad en el Centro Antuhué del Servicio Nacional de Menores, Sename, ubicado en Graneros.
La presentación de estas medidas son en el marco de una denuncia presentada por el mismo centro en contra del Estado en el mes de abril, debido a las deficientes condiciones carcelarias presentadas por los centros abiertos, semicerrados y cerrados dependientes del Sename.
En dicha denuncia internacional, se sostiene que en los recintos aludidos se vulneran sistemáticamente los derechos a la vida, a la integridad física y psíquica, a la libertad personal, al deber general de respetar los derechos del niño, a la protección judicial efectiva, al deber de adoptar medidas para el desarrollo progresivo de los derechos de contenido económico y social, todos ellos en relación a las obligaciones de respetar y garantizar los derechos establecidos en los tratados internacionales y las leyes.
Sumario
El director del Servicio Nacional de Menores, Eugenio San Martín, afirmó que los ansiolíticos y antidepresivos que intoxicaron a 10 adolescentes en Graneros estaban fuera de su alcance y que ha abierto un sumario para determinar responsabilidades en el hecho.
"Hay medicamentos que se suministran en los centros, por profesionales del Consejo Nacional de Control de Estupefacientes (Conace) y que las instrucciones dadas en ese centro en particular era que esos medicamentos se mantuvieran fuera del centro en las oficinas administrativas, entonces es materia de investigación saber cómo tuvieron acceso a esos medicamentos", explicó San Martín.
El director del servicio afirmó que hay unas 450 plazas que Conace utiliza dentro de los centros para la rehabilitación en drogas, y 16 de ellas se encuentran en Graneros.
Respecto a la salud de los intoxicados, cuyas edades fluctúan entre los 14 y 17 años, San Martín informó que ocho ya fueron dados de alta y otros dos serán liberados este lunes del hospital porque se encuentran fuera de peligro.
Ante las críticas de los padres de los menores ante las heridas presentes en ellos, San Martín se defendió afirmando que sólo tomó conocimiento de lo que le informó la directora regional y que a veces en los centros hay peleas entre ellos que generan lesiones.
"Si hay situaciones de riesgo para la salud de los jóvenes por autolesiones o cualquier otra circunstancia, nuestra obligación es tomar acciones para evitar que estas situaciones se produzcan", finalizó San Martín en conversación con Radio Cooperativa.
©la tercera 
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