cidh admite denuncia contra colombia
Caso Aisalla, primera vez que CIDH admite una denuncia de un país a otro. Si la CIDH concluye que Colombia violó los derechos humanos del ciudadano ecuatoriano, presentará entonces en su informe de fondo recomendaciones que pueden variar entre la exigencia de investigaciones a fondo, sanciones a perpetradores, reparación pecuniaria o simbólica, oferta de disculpas o reformas legislativas.
Colombia. La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) admitió este viernes una denuncia presentada por Ecuador contra Colombia por muerte de un ciudadano ecuatoriano durante el ataque transfronterizo de las Fuerzas Armadas de Colombia a un campamento de las Farc en 2008.
Ecuador alega que Colombia violó los derechos a la vida, integridad personal, garantías judiciales y protección judicial de Franklin Guillermo Aisalla Molina por su presunta ejecución extrajudicial por parte de agentes de la fuerza pública colombiana el 1 de marzo del 2008 en territorio ecuatoriano.
Es la segunda demanda interestatal presentada por violación de derechos humanos y apenas la primera admitida por la CIDH, que en 2007 rechazó una demanda presentada el año anterior por Nicaragua contra Costa Rica. La CIDH anunció el viernes la decisión de admisibilidad, que fue adoptada el 21 de octubre durante el 140 periodo ordinario de sesiones celebrado hasta la semana pasada en la capital estadounidense.
Si la CIDH concluye que Colombia violó los derechos humanos del ciudadano ecuatoriano, presentará entonces en su informe de fondo recomendaciones que pueden variar entre la exigencia de investigaciones a fondo, sanciones a perpetradores, reparación pecuniaria o simbólica, oferta de disculpas o reformas legislativas. La comisión pasaría el caso a la Corte Interamericana de Derechos Humanos solamente si queda inconforme sobre el cumplimiento de esas recomendaciones.
"La decisión de admisibilidad no implica prejuzgamiento de fondo, establece que desde el punto de vista formal la petición interestatal presentada por Ecuador satisface el requerimiento de la convención (Americana de Derechos Humanos)", dijo en conferencia de prensa el presidente de la comisión, Felipe González. "No es una denuncia frívola, podría llegar a constituir violaciones a los derechos humanos si son debidamente acreditadas".
González explicó que al admitir la demanda, la CIDH decidió no esperar el agotamiento de los recursos internos tras evaluar el progreso de los procesos actualmente en curso en los tribunales colombianos. Agregó que ambos estados han reconocido la competencia de la jurisdicción de la CIDH para conocer de este caso.
"Es muy positivo que la CIDH pueda servir para esclarecer estas situaciones. No debe verse algo anormal que la CIDH decida admitir peticiones de esta naturaleza. Históricamente no se usaba, y el que se use ahora es un paso positivo de resolución pacífica" a manos de un organismo no político, agregó González.
El secretario ejecutivo de la CIDH Santiago Cantón señaló que los dos estados fueron notificados y tienen tres meses para responder en esta etapa inicial llamada "de fondo". La CIDH podría decidir la celebración de una audiencia de fondo para escuchar alegatos de ambas partes.
El primer caso en el que un Estado denunció a otro fue Nicaragua contra Costa Rica en el 2006, por xenofobia y discriminación contra inmigrantes nicaragüenses, pero la CIDH declaró la denuncia inadmisible un año después.
Ecuador presentó la denuncia en junio del 2009 específicamente por la muerte de Aisalla.
En una audiencia en Washington en marzo de este año ante la CIDH, el procurador general de Ecuador, Diego García, pidió a Colombia una investigación imparcial y exhaustiva de los hechos, con el fin de juzgar y sancionar a todos los responsables materiales e intelectuales de la "ejecución extrajudicial" de la víctima.
Pidió, además, que Colombia dé reparaciones económicas a los familiares de la víctima y que garantice que no acometerá acciones militares similares.
El presidente Juan Manuel Santos era ministro de Defensa cuando ocurrió el bombardeo y hay contra él un proceso abierto en un tribunal ecuatoriano por su papel en esa operación.
En su denuncia ante la CIDH, el gobierno de Ecuador mantiene que Aisalla falleció en "una ejecución sumaria en territorio ecuatoriano por parte de un Estado extranjero", y según su versión de los hechos, pereció por golpes repetidos en la parte posterior de la cabeza.
Por su parte, Colombia dice que el ecuatoriano murió por el bombardeo en sí, puesto que la autopsia indica, de acuerdo con su versión, que sufrió "lesiones por elementos explosivos y penetrantes que comprometieron el cráneo, las estructuras encefálicas y vísceras torácico-abdominales".
6 de noviembre de 2010
4 de noviembre de 2010
©semana
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