armas a punta de pala
El comercio ilegal de armas de fuego encuentra constantemente nuevas maneras de introducir armas en Holanda. Y ahora toma más tiempo que antes sacarlas de circulación.
La Haya, Holanda. La detección por parte de la policía y justicia del contrabando de armas de fuego es insuficiente. Así lo determinó la Universidad de Tilburgo después de una investigación a cargo del Programa Policía y Ciencia, nombrado por el ministerio de Asuntos Interiores.
Entre diez mil y quince mil armas de fuego ingresan al año en Holanda. Provienen sobre todo de Europa del Este, Portugal, Bélgica y Alemania.
Según el investigador Toine Spapens las armas pueden circular en los medios de delincuentes durante quince años antes de que caigan en manos de la policía.
Esto ocurre en parte porque la policía y justicia encuentran importante el requisamiento de armas de fuego, pero sólo en papel, porque no dedican demasiados esfuerzos a ello. Las armas de fuego son "consideradas sobre todo como un subproducto de actividades fuera de la ley, y no un problema en sí mismo". Por eso se necesitan fondos a corto plazo para el adiestramiento de expertos en armas de fuego adicionales, según Spapens.
Por otro lado, los contrabandistas son cada vez más listos. Encuentran continuamente nuevas maneras de proporcionar armas a los delincuentes. En los últimos años cientos de pistolas de alarma de Italia y Portugal han sido transformadas en armas verdaderas y luego llevadas de contrabando a Holanda y otros países de Europa.
Además, sobre todo en Alemania se pueden comprar armas de fuego desarmadas y desechadas y transformarlas en armas operativas.
Un tercer método es declarar la exportación de una partida de armas hacia el extranjero. Las armas no llegan a destino, pero sí terminan en medios criminales.
©traducción mQh
23 de julio de 2004
©hetparool
Entre diez mil y quince mil armas de fuego ingresan al año en Holanda. Provienen sobre todo de Europa del Este, Portugal, Bélgica y Alemania.
Según el investigador Toine Spapens las armas pueden circular en los medios de delincuentes durante quince años antes de que caigan en manos de la policía.
Esto ocurre en parte porque la policía y justicia encuentran importante el requisamiento de armas de fuego, pero sólo en papel, porque no dedican demasiados esfuerzos a ello. Las armas de fuego son "consideradas sobre todo como un subproducto de actividades fuera de la ley, y no un problema en sí mismo". Por eso se necesitan fondos a corto plazo para el adiestramiento de expertos en armas de fuego adicionales, según Spapens.
Por otro lado, los contrabandistas son cada vez más listos. Encuentran continuamente nuevas maneras de proporcionar armas a los delincuentes. En los últimos años cientos de pistolas de alarma de Italia y Portugal han sido transformadas en armas verdaderas y luego llevadas de contrabando a Holanda y otros países de Europa.
Además, sobre todo en Alemania se pueden comprar armas de fuego desarmadas y desechadas y transformarlas en armas operativas.
Un tercer método es declarar la exportación de una partida de armas hacia el extranjero. Las armas no llegan a destino, pero sí terminan en medios criminales.
©traducción mQh
23 de julio de 2004
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