ASESINADO: DOSSIER NÚMERO 8.17.8025 - iñaki oñorbe genovesi
El refugiado somalí Abdinassir Abdilatif Ali fue asesinado a tiros en Mogadishu después de haber sido deportado por el gobierno holandés. Justicia ha extraviado su dossier y no se hace responsable.
Abdinassir Abdilatif Ali, 24, fue matado a tiros el 10 de junio en las calles de Mogadishu, nueve meses después de que fuera deportado de Holanda como solicitante de asilo. Los atracadores lo mataron por los dólares que había ahorrado para volver a Europa. La primera bala lo paralizó; la segunda le quitó la vida.
Amnistía Internacional dio a conocer el asesinato este miércoles. Lo mismo que le ocurrió al refugiado somalí rechazado Mohamed Yahya, que fue devuelto por Dinamarca. Los dos hombres, que no contaban con la protección de su clan, fueron presa fácil de los atracadores.
GroenLinks y el Partido Socialista SP han hecho preguntas en la Cámara a la ministro Verdonk, de Extranjería. Justicia declaró que no puede decir nada mientras no encuentren el dossier extraviado.
Abdinassir Abdilatif Ali partió la tarde del 3 de octubre de 2003 con destino a Nairobi, vuelo KL 4341, para ser trasladado desde ahí a Mogadishu. La intención era que él continuaría viaje hacia el norte de Somalia, que, según Holanda, es seguro. Pero se quedó atrapado en la capital.
El abogado Marcel van der Linde había presentado el día anterior a su partida un recurso: su cliente no debía ser deportado por la ruta Ámsterdam-Nairobi-Mogadishu. Esta es la ruta, dice el abogado, por la que son retornados normalmente, según Holanda, delincuentes somalíes. Y Abdilatif no le había hecho nunca daño a nadie. Debía ser expulsado por la ruta de Dubai, no por Ámsterdam-Nairobi-Mogadishu.
El abogado también puso en duda la legalidad de la expulsión. Abdilatif corría peligro, y lo retornaron con documentos inválidos. El Servicio de Inmigración y Naturalización, IND, no ha reaccionado ante las críticas y debe aun determinar si las deportaciones han ocurrido de acuerdo a las reglas.
Entretanto, Abdilatif se mantuvo escondido en un hotel de la capital somalí. Allá trató de reunir los dólares suficientes para pagar a los transportistas que, como la vez anterior, lo llevarían vía Nairobi y Dubai a Holanda.
Como miembro del clan hawaije, en Mogadishu su vida no estaba segura. Por eso había llegado a Holanda en 2000, después de haber dejado atrás a su mujer embarazada, Faduma Igaal, 20, y abandonado su trabajo en la tienda de ropas y abarrotes de su tío en el barrio de Medina. Su tío fue asesinado, porque habría tenido contactos con las tropas del ejército etíope.
Abdilatif sería el siguiente. Eso también lo contó el 17 de agosto de 2000, cuando pidió asilo en Holanda. Abdilatif recibió el número de dossier del IND 0008.17.8025 y vivió durante un tiempo en el centro de acogida de Dordrecht. Luego se mudó a un centro para refugiados en Alkmaar. El IND rechazó su petición de asilo el 16 de febrero de 2001. Dijeron que no se desprendía de la historia de Abdilatif que corriera peligro. Él apeló y trató de informar a su familia y mujer en Mogadishu a través del BBC Worldservice. Pero no resultó. Por miedo a los asesinos de su tío se habían escondido.
La decisión del IND se hizo esperar y Abdilatif se inquietó. El centro de refugiados lo agobiaba, le dijo a su amigo somalí Ibrahim, que todavía vive en Holanda. Trabajaba duro y hablaba inglés. A comienzos de julio de 2002 Abdilatif se aburrió de esperar y partió a Inglaterra, donde viven muchos somalíes. En el aeropuerto de Londres pidió asilo con el nombre de Abdi Ali Mohamed, donde fue detenido.
El 1 de julio los británicos pidieron informaciones a las autoridades holandesas. La respuesta llegó tres meses más tarde: es conocido y está en trámite de petición de asilo. Abdilatif debió volver, porque había solicitado asilo por primera vez en Holanda.
El 8 de octubre de 2002 el IND cerró su dossier. "No sabemos dónde está", informó el IND al abogado Van der Linde. En ese momento Abdilatif esperaba en una celda inglesa el transporte hacia Holanda. En marzo de 2003 aterrizó finalmente en Schiphol. Su dossier había sido cerrado; Abdilatif tenía que presentar una nueva petición de asilo.
Para la segunda petición el IND exigió nuevos hechos y circunstancias, que Abdilatif no tenía. Un mes después el IND rechazó su petición. Abditalif fue trasladado a la cárcel de frontera de Ámsterdam de donde fue deportado a Somalia.
©volkskrant ©traducción mQh
Amnistía Internacional dio a conocer el asesinato este miércoles. Lo mismo que le ocurrió al refugiado somalí rechazado Mohamed Yahya, que fue devuelto por Dinamarca. Los dos hombres, que no contaban con la protección de su clan, fueron presa fácil de los atracadores.
GroenLinks y el Partido Socialista SP han hecho preguntas en la Cámara a la ministro Verdonk, de Extranjería. Justicia declaró que no puede decir nada mientras no encuentren el dossier extraviado.
Abdinassir Abdilatif Ali partió la tarde del 3 de octubre de 2003 con destino a Nairobi, vuelo KL 4341, para ser trasladado desde ahí a Mogadishu. La intención era que él continuaría viaje hacia el norte de Somalia, que, según Holanda, es seguro. Pero se quedó atrapado en la capital.
El abogado Marcel van der Linde había presentado el día anterior a su partida un recurso: su cliente no debía ser deportado por la ruta Ámsterdam-Nairobi-Mogadishu. Esta es la ruta, dice el abogado, por la que son retornados normalmente, según Holanda, delincuentes somalíes. Y Abdilatif no le había hecho nunca daño a nadie. Debía ser expulsado por la ruta de Dubai, no por Ámsterdam-Nairobi-Mogadishu.
El abogado también puso en duda la legalidad de la expulsión. Abdilatif corría peligro, y lo retornaron con documentos inválidos. El Servicio de Inmigración y Naturalización, IND, no ha reaccionado ante las críticas y debe aun determinar si las deportaciones han ocurrido de acuerdo a las reglas.
Entretanto, Abdilatif se mantuvo escondido en un hotel de la capital somalí. Allá trató de reunir los dólares suficientes para pagar a los transportistas que, como la vez anterior, lo llevarían vía Nairobi y Dubai a Holanda.
Como miembro del clan hawaije, en Mogadishu su vida no estaba segura. Por eso había llegado a Holanda en 2000, después de haber dejado atrás a su mujer embarazada, Faduma Igaal, 20, y abandonado su trabajo en la tienda de ropas y abarrotes de su tío en el barrio de Medina. Su tío fue asesinado, porque habría tenido contactos con las tropas del ejército etíope.
Abdilatif sería el siguiente. Eso también lo contó el 17 de agosto de 2000, cuando pidió asilo en Holanda. Abdilatif recibió el número de dossier del IND 0008.17.8025 y vivió durante un tiempo en el centro de acogida de Dordrecht. Luego se mudó a un centro para refugiados en Alkmaar. El IND rechazó su petición de asilo el 16 de febrero de 2001. Dijeron que no se desprendía de la historia de Abdilatif que corriera peligro. Él apeló y trató de informar a su familia y mujer en Mogadishu a través del BBC Worldservice. Pero no resultó. Por miedo a los asesinos de su tío se habían escondido.
La decisión del IND se hizo esperar y Abdilatif se inquietó. El centro de refugiados lo agobiaba, le dijo a su amigo somalí Ibrahim, que todavía vive en Holanda. Trabajaba duro y hablaba inglés. A comienzos de julio de 2002 Abdilatif se aburrió de esperar y partió a Inglaterra, donde viven muchos somalíes. En el aeropuerto de Londres pidió asilo con el nombre de Abdi Ali Mohamed, donde fue detenido.
El 1 de julio los británicos pidieron informaciones a las autoridades holandesas. La respuesta llegó tres meses más tarde: es conocido y está en trámite de petición de asilo. Abdilatif debió volver, porque había solicitado asilo por primera vez en Holanda.
El 8 de octubre de 2002 el IND cerró su dossier. "No sabemos dónde está", informó el IND al abogado Van der Linde. En ese momento Abdilatif esperaba en una celda inglesa el transporte hacia Holanda. En marzo de 2003 aterrizó finalmente en Schiphol. Su dossier había sido cerrado; Abdilatif tenía que presentar una nueva petición de asilo.
Para la segunda petición el IND exigió nuevos hechos y circunstancias, que Abdilatif no tenía. Un mes después el IND rechazó su petición. Abditalif fue trasladado a la cárcel de frontera de Ámsterdam de donde fue deportado a Somalia.
©volkskrant ©traducción mQh
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