muere histórica líder comunista
La histórica líder del Partido Comunista chileno Gladys Marín, uno de los símbolos de la lucha contra de la dictadura del general Augusto Pinochet (1973-1990), falleció en la madrugada de este domingo en Santiago, a los 63 años, víctima de un tumor cerebral irreversible, informaron dirigentes partidarios.
Santiago, Chile. "A la una de la madrugada de hoy, 6 de marzo de 2005, pocas horas después de entrar en estado de coma, ha fallecido nuestra muy querida compañera Gladys Marín Millie, presidenta de nuestro partido", informó el secretario general del PC, Guillermo Teillier.
"Durante casi un año y medio, ella libró una dura batalla por superar el cáncer que la afectaba", señaló el dirigente.
Gladys Marín estaba aquejada de un agresivo cáncer cerebral del tipo "glioblastoma multiforme", considerado como altamente maligno e irreversible, enfermedad que le fue diagnosticada en septiembre de 2003.
Marín falleció en su residencia de la comuna de La Florida, en el sureste de Santiago, en compañía de familiares, amigos y miembros del Partido Comunista.
Su deceso se produjo tras una larga agonía que se extendió por casi dos meses, después que regresó a Chile desde Cuba, donde fue sometida a tratamiento médico.
Al conocerse su deceso, el gobierno cubano emitió un comunicado en el que subrayó que con la muerte de Marín "Chile pierde a una de sus hijas más ilustres y el movimiento revolucionario latinoamericano una de sus figuras más admirables y queridas".
Sus restos fueron trasladados en la mañana del domingo hasta el ex Congreso Nacional, en cuyo recorrido la dirigenta recibió el cariño y el respeto de miles de chilenos, mientras dirigentes del Partido Comunista no descartaron una ceremonia religiosa.
El ministro del Interior, José Miguel Insulza informó que el gobierno decretó duelo nacional para los días lunes y martes, día de los funerales.
El presidente Ricardo Lagos rindió un emotivo homenaje a la líder comunista Gladys Marín en la sede del ex Congreso Nacional, donde calificó a la dirigenta como "ejemplo de libertad, democracia y justicia" y sostuvo que a pesar de las diferencias políticas ella representó los mejores ideales del país.
Explicó que "el duelo decretado por el gobierno es una expresión de nuestro respeto a lo que ella encarnó y a los miles y miles (de personas) que en democracia la siguen".
"Creo que hoy día, más allá de las banderas de cada uno están las banderas de Chile y por ese Chile mejor por el cual Gladys Marín luchó", agregó Lagos al salir del recinto.
La visita de Lagos se realizó en medio de los gritos de "¡Verdad y Justicia!" que exigían cientos de militantes del Partido Comunista que con banderas rojas colmaban la sede, mientras otros aplaudían al gobernante.
Lagos junto a todos los presentes entonó en el lugar el Himno de la Internacional, mientras era acompañado por su esposa.
Entretanto, miles de chilenos desfilaban el domingo ante el féretro. Portando rosas rojas, mujeres y jóvenes, amas de casa, trabajadores y visitantes llegaban hasta la ex sede del Congreso que permanecerá abierta hasta cerca de medianoche.
La diputada del Partido Socialista Isabel Allende, hija del extinto presidente Salvador Allende, expresó que "toda la familia Allende comparte este momento con mucho cariño, con mucha solidaridad hacia la familia de Gladys".
Agregó que "ella estuvo siempre en todas las campañas con mi padre como parlamentaria y yo, en lo personal, creo que fue una extraordinaria luchadora social, consecuente, una mujer con mucho dolor y coraje".
Cuando se instaló la dictadura de 17 años de Pinochet, Gladys Marín era diputada y secretaria general de las juventudes del Partido Comunista, colectividad que fue proscrita y sus dirigentes fueron perseguidos implacablemente.
La dirigenta debió salir al exilio, mientras agentes de la dictadura detenían en 1976 a su esposo Jorge Muñoz y a miembros de la cúpula del PCCH, todos quienes integran la lista de 1.198 detenidos desaparecidos que dejó la dictadura. Marín, que tuvo dos hijos, Rodrigo y Álvaro, se mantenía como líder del Partido Comunista chileno desde 1994.
Sus funerales se efectuarán el martes, coincidiendo con la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, confirmaron dirigentes del Partido Comunista.
8 de marzo de 2005
©mi punto
"Durante casi un año y medio, ella libró una dura batalla por superar el cáncer que la afectaba", señaló el dirigente.
Gladys Marín estaba aquejada de un agresivo cáncer cerebral del tipo "glioblastoma multiforme", considerado como altamente maligno e irreversible, enfermedad que le fue diagnosticada en septiembre de 2003.
Marín falleció en su residencia de la comuna de La Florida, en el sureste de Santiago, en compañía de familiares, amigos y miembros del Partido Comunista.
Su deceso se produjo tras una larga agonía que se extendió por casi dos meses, después que regresó a Chile desde Cuba, donde fue sometida a tratamiento médico.
Al conocerse su deceso, el gobierno cubano emitió un comunicado en el que subrayó que con la muerte de Marín "Chile pierde a una de sus hijas más ilustres y el movimiento revolucionario latinoamericano una de sus figuras más admirables y queridas".
Sus restos fueron trasladados en la mañana del domingo hasta el ex Congreso Nacional, en cuyo recorrido la dirigenta recibió el cariño y el respeto de miles de chilenos, mientras dirigentes del Partido Comunista no descartaron una ceremonia religiosa.
El ministro del Interior, José Miguel Insulza informó que el gobierno decretó duelo nacional para los días lunes y martes, día de los funerales.
El presidente Ricardo Lagos rindió un emotivo homenaje a la líder comunista Gladys Marín en la sede del ex Congreso Nacional, donde calificó a la dirigenta como "ejemplo de libertad, democracia y justicia" y sostuvo que a pesar de las diferencias políticas ella representó los mejores ideales del país.
Explicó que "el duelo decretado por el gobierno es una expresión de nuestro respeto a lo que ella encarnó y a los miles y miles (de personas) que en democracia la siguen".
"Creo que hoy día, más allá de las banderas de cada uno están las banderas de Chile y por ese Chile mejor por el cual Gladys Marín luchó", agregó Lagos al salir del recinto.
La visita de Lagos se realizó en medio de los gritos de "¡Verdad y Justicia!" que exigían cientos de militantes del Partido Comunista que con banderas rojas colmaban la sede, mientras otros aplaudían al gobernante.
Lagos junto a todos los presentes entonó en el lugar el Himno de la Internacional, mientras era acompañado por su esposa.
Entretanto, miles de chilenos desfilaban el domingo ante el féretro. Portando rosas rojas, mujeres y jóvenes, amas de casa, trabajadores y visitantes llegaban hasta la ex sede del Congreso que permanecerá abierta hasta cerca de medianoche.
La diputada del Partido Socialista Isabel Allende, hija del extinto presidente Salvador Allende, expresó que "toda la familia Allende comparte este momento con mucho cariño, con mucha solidaridad hacia la familia de Gladys".
Agregó que "ella estuvo siempre en todas las campañas con mi padre como parlamentaria y yo, en lo personal, creo que fue una extraordinaria luchadora social, consecuente, una mujer con mucho dolor y coraje".
Cuando se instaló la dictadura de 17 años de Pinochet, Gladys Marín era diputada y secretaria general de las juventudes del Partido Comunista, colectividad que fue proscrita y sus dirigentes fueron perseguidos implacablemente.
La dirigenta debió salir al exilio, mientras agentes de la dictadura detenían en 1976 a su esposo Jorge Muñoz y a miembros de la cúpula del PCCH, todos quienes integran la lista de 1.198 detenidos desaparecidos que dejó la dictadura. Marín, que tuvo dos hijos, Rodrigo y Álvaro, se mantenía como líder del Partido Comunista chileno desde 1994.
Sus funerales se efectuarán el martes, coincidiendo con la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, confirmaron dirigentes del Partido Comunista.
8 de marzo de 2005
©mi punto
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