discriminan a marroquíes
Rechazados para hacer sus prácticas, en encuesta telefónica.
La Haya, Holanda. Los jóvenes marroquíes tienen en promedio un 30 por ciento menos de posibilidades de ser admitidos para hacer una práctica, que sus compañeros nativos de la misma edad. En la construcción tienen incluso tres veces menos posibilidades. Sólo en la hostelería son bienvenidos, incluso por encima de otros. Así se desprende de una investigación de la Universidad de Utrecht, por encargo de Izquierda Verde.
Para la investigación estudiantes secundarios profesionales nativos y marroquíes llamaron a empresas pidiendo ser admitidos para hacer la práctica. Se llamó a 336 empresas.
De los 61 marroquíes que llamaron a una empresa de construcción, 9 fueron invitados a una entrevista. De los 49 holandeses que llamaron a una empresa, 20 fueron invitados. En el comercio detallista la diferencia es menor: 22 por ciento de los marroquíes fueron invitados, en comparación con el 29 por ciento de los nativos. En la hostelería los marroquíes fueron invitados más a menudo (32 por ciento) que los estudiantes nativos.
Los investigares explican la reticencia de las empresas constructoras parcialmente por su escasa experiencia con trabajadores extranjeros. De las ramas involucradas en la encuesta, la construcción tenía en servicio al porcentaje más bajo de extranjeros: un 3 por ciento.
Una parte de los resultados se pueden explicar por el método de trabajo de los investigadores: las empresas constructoras fueron llamadas solamente por jóvenes, las tiendas y locales de hostelería sólo por mujeres. "El alto grado de discriminación en la construcción se puede derivar del estatus más bajo de los jóvenes marroquíes, en comparación con las mujeres marroquíes", según los investigadores.
La parlamentaria Azough, de Izquierda Verde, piensa que la investigación demuestra que en la construcción se discrimina. Enfatizó que son en particular empresas reconocidas por el estado las que prefieren a los nativos. Son empresas que reciben ayudas del estado para contratar a estudiantes para sus prácticas. El partido pide al gabinete y a las organizaciones profesionales que tomen medidas más severas contra empresas que discriminan. El reconocimiento y ayudas que reciben deben ser revocados. Las escuelas deben presentar denuncias de discriminación más a menudo.
Elco Brinkman, presidente de la Federación General de Empresas Constructoras AVVB, hizo saber el viernes que tomaba en serio la investigación. "La discriminación es absolutamente inaceptable". Pero culpó del problema en parte a los marroquíes mismos. "En Marruecos no se considera que la construcción sea un oficio interesante. Es considerado como trabajo menor. Si ariscas la nariz, obviamente te vas a complicar la vida".
27 de agosto de 2005
©volkskrant
©traducción mQh
La Haya, Holanda. Los jóvenes marroquíes tienen en promedio un 30 por ciento menos de posibilidades de ser admitidos para hacer una práctica, que sus compañeros nativos de la misma edad. En la construcción tienen incluso tres veces menos posibilidades. Sólo en la hostelería son bienvenidos, incluso por encima de otros. Así se desprende de una investigación de la Universidad de Utrecht, por encargo de Izquierda Verde.Para la investigación estudiantes secundarios profesionales nativos y marroquíes llamaron a empresas pidiendo ser admitidos para hacer la práctica. Se llamó a 336 empresas.
De los 61 marroquíes que llamaron a una empresa de construcción, 9 fueron invitados a una entrevista. De los 49 holandeses que llamaron a una empresa, 20 fueron invitados. En el comercio detallista la diferencia es menor: 22 por ciento de los marroquíes fueron invitados, en comparación con el 29 por ciento de los nativos. En la hostelería los marroquíes fueron invitados más a menudo (32 por ciento) que los estudiantes nativos.
Los investigares explican la reticencia de las empresas constructoras parcialmente por su escasa experiencia con trabajadores extranjeros. De las ramas involucradas en la encuesta, la construcción tenía en servicio al porcentaje más bajo de extranjeros: un 3 por ciento.
Una parte de los resultados se pueden explicar por el método de trabajo de los investigadores: las empresas constructoras fueron llamadas solamente por jóvenes, las tiendas y locales de hostelería sólo por mujeres. "El alto grado de discriminación en la construcción se puede derivar del estatus más bajo de los jóvenes marroquíes, en comparación con las mujeres marroquíes", según los investigadores.
La parlamentaria Azough, de Izquierda Verde, piensa que la investigación demuestra que en la construcción se discrimina. Enfatizó que son en particular empresas reconocidas por el estado las que prefieren a los nativos. Son empresas que reciben ayudas del estado para contratar a estudiantes para sus prácticas. El partido pide al gabinete y a las organizaciones profesionales que tomen medidas más severas contra empresas que discriminan. El reconocimiento y ayudas que reciben deben ser revocados. Las escuelas deben presentar denuncias de discriminación más a menudo.
Elco Brinkman, presidente de la Federación General de Empresas Constructoras AVVB, hizo saber el viernes que tomaba en serio la investigación. "La discriminación es absolutamente inaceptable". Pero culpó del problema en parte a los marroquíes mismos. "En Marruecos no se considera que la construcción sea un oficio interesante. Es considerado como trabajo menor. Si ariscas la nariz, obviamente te vas a complicar la vida".
27 de agosto de 2005
©volkskrant
©traducción mQh
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