decapitan a oficial del ejército
Encuentran cuerpo de oficial mexicano.
Acapulco, México. El domingo fue encontrado el cuerpo de un capitán del ejército mexicano en el estado de Guerrero, al sur de México, un día después de que su cabeza cercenada fuera dejada frente a una base militar con una nota que hace suponer que las bandas criminales están desafiando la creciente presencia del ejército.
También en Guerrero atacantes no identificados arrojaron el sábado noche una granada contra una comisaría de policía en Tecpan, causando daños a dos coches policiales, pero sin ocasionar daños personales.
La policía encontró al capitán Jacinto Pablo Granda, 36, cerca de una autopista en la capital de Guerrero, Chilpancingo, a unos 97 kilómetros al nordeste de Acapulco, con dos heridas de bala en la cabeza, dijo Erit Montufar, director de la policía de investigaciones del estado.
Granda estaba de vacaciones con su familia cuando fue secuestrado el sábado por un grupo de hombres armados cerca de la base militar de Chilpancingo, dijo Montufar. No está claro si los atacantes conocían a Granda, que estaba asignado a otra base, dijo un oficial.
El presidente Felipe Calderón ha enviado más de 24 mil soldados y agentes de la policía federal a zonas asoladas por la violencia relacionada con las drogas, y los criminales aparentemente han respondido atacando a tropas del ejército. Este mes ya han muerto cinco soldados.
El sábado, la cabeza de un mecánico raptado fue dejada en una caja junto a dos granadas y una nota de los presuntos miembros de una banda, frente a un cuartel militar en Veracruz. "Vamos a seguir, incluso con las fuerzas federales aquí", decía la nota, según las autoridades.
También en Guerrero atacantes no identificados arrojaron el sábado noche una granada contra una comisaría de policía en Tecpan, causando daños a dos coches policiales, pero sin ocasionar daños personales.
La policía encontró al capitán Jacinto Pablo Granda, 36, cerca de una autopista en la capital de Guerrero, Chilpancingo, a unos 97 kilómetros al nordeste de Acapulco, con dos heridas de bala en la cabeza, dijo Erit Montufar, director de la policía de investigaciones del estado.
Granda estaba de vacaciones con su familia cuando fue secuestrado el sábado por un grupo de hombres armados cerca de la base militar de Chilpancingo, dijo Montufar. No está claro si los atacantes conocían a Granda, que estaba asignado a otra base, dijo un oficial.
El presidente Felipe Calderón ha enviado más de 24 mil soldados y agentes de la policía federal a zonas asoladas por la violencia relacionada con las drogas, y los criminales aparentemente han respondido atacando a tropas del ejército. Este mes ya han muerto cinco soldados.
El sábado, la cabeza de un mecánico raptado fue dejada en una caja junto a dos granadas y una nota de los presuntos miembros de una banda, frente a un cuartel militar en Veracruz. "Vamos a seguir, incluso con las fuerzas federales aquí", decía la nota, según las autoridades.
14 de mayo de 2007
©los angeles times
©traducción mQh
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