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crece culto de san jesús malverde


[Kate Murphy] Robin Hood mexicano gana notoriedad en Estados Unidos.
Houston, Estados Unidos. Jesús Malverde ha sido venerado durante casi un siglo en el noroeste de México. De acuerdo al folclore, era un Robin Hood mexicano que robaba a los ricos y repartía el botín entre los pobres hasta que fue asesinado por la policía en 1909.
Raúl González, dueño de Mystic Products, dice que alguna gente cree que la estatuilla de Malverde les protege de la policía.
Ahora, los inmigrantes han llevado su leyenda a Estados Unidos. Su imagen, que se piensa que ofrece protección contra la policía, se encuentra entre otros artículos que incluyen camisetas y limpiadores.
Malverde es considerado ampliamente como el santo patrono de los vendedores de droga, dicen funcionarios policiales y expertos en cultura mexicana. Se ha erigido un santuario encima de su tumba en la remota ciudad de Culiacán, en el estado mexicano de Sinaloa, que ha sido asociado durante largo tiempo con el tráfico de opio y marihuana.
"La gente metida en la droga visita el santuario y piden ayuda y vuelven en grandes coches con pilas de dinero para dar las gracias", dijo James H. Creechan, sociólogo canadiense y profesor de la Universidad Autónoma de Sinaloa en Culiacán.
Pero Creechan, que presentó un artículo sobre Malverde en la Sociedad Americana de Criminología en 2005, agregó que los pobres también le piden a Malverde por dinero y un pasaje seguro por la frontera de Estados Unidos.
El influjo de inmigrantes desde la región de Sinaloa en los últimos años ha hecho cada vez más visible la imagen de Malverde a este lado de la frontera, especialmente en el sudoeste y en California. Su leyenda se ha extendido entre los hispanos, dice Creechan, inspirando a muchos para levantar altares a Malverde en sus casas, así como a usar colonia Malverde.
Su imagen, que se parece sospechosamente a la de Pedro Infante, el icono mexicano de matiné en los años cuarenta, se ve en camisetas y en parches cosidos en chaquetas y mochilas. Se pueden ver bustos de Malverde junto a las cajas en restaurantes, bares y discotecas.
Manuel Simental, inmigrante de Sinaloa, tiene un altar a Malverde en su restaurante El Paisa, en Lynwood, California. Le lleva suerte, dijo Simental. Sus clientes dejan billetes de un dólar y monedas de cambio en el altar, que dijo que recogía y repartía entre los pobres cuando visita México.
Hace cinco años, Indio Products, un fabricante del área de Los Angeles que distribuye productos místicos, no tenía ningún artículo relacionado con Malverde. Hoy, tiene toda una línea de productos Malverde, incluyendo sirios, rosarios, tarjetas de colección, sellos, aceite capilar y detergentes para el baño. El presidente de la compañía, Martin Mayer, dijo que la popularidad de Malverde estaba aumentando.
"La semana pasada envié un pedido de bustos de Malverde a Italia", dijo Mayer. "Se me ocurre que los pidió la mafia", dijo bromeando.
Los artículos Malverde se venden normalmente en botánicas -farmacias de medicina alternativa que se encuentran en barrios hispanos que venden hierbas, pomadas y una variedad de amuletos y pociones para la buena y mala suerte.
"La gente dice: ‘Malverde me ayudó con esto o esto otro'; se trata principalmente de gente que está metida en las drogas y que cree que Malverde les protege de la policía", dijo Raúl González, propietario de una botánica llamada Mystic Products en Compton, California. "Es el poder de la mente, sabes. Ellos creen en eso, así que se arriesgan, pero al final igual los pillan".
En realidad, autoridades de antinarcóticos en México y Estados Unidos dicen que las estatuillas, tatuajes y amuletos de Malverde pueden delatar actividades ilegales.
"Mandamos patrullas a los estacionamientos de hoteles y moteles de la localidad para ver si hay coches con símbolos de Malverde en los parabrisas o colgando del espejo retrovisor", dijo el sargento Rico García, de la división antinarcóticos del Departamento de Policía de Houston. "Nos entrega un indicio de lo que está ocurriendo probablemente".
Tribunales en California, Kansas, Nebraska y Texas han resuelto que baratijas y talismanes de Malverde son admisibles como evidencia en casos de drogas y de lavado de dinero.
"No es un indicio directo de culpabilidad, pero definitivamente puede ser usado en combinación con otras cosas", como fajos de billetes, pantalones holgados y balanzas, dijo José Martínez, agente especial de la agencia antinarcóticos de Estados Unidos [Drug Enforcement Agency].
El mes pasado, la Cervecería Minerva, una pequeña cervecería mexicana en el estado de Jalisco, al centro-oeste del país, lanzó al mercado una cerveza llamada Malverde. Empleados de la compañía dijeron que eligieron el nombre e imagen de Malverde porque era el personajes más reconocible y la figura más admirada de los grupos focales.
"Los traficantes la beben como si fuera agua bendita", dijo el sargento García.
Omnipresente en la cultura hispana, Malverde se ha introducido en programas de televisión tradicionales, películas y piezas de teatro. Algunos santuarios con su imagen fueron mostrados en un episodio reciente de la serie de televisión de la CBS, ‘CSI', y en la película de 2003, ‘Diablo' [A Man Apart], con Vin Diesel.
Malverde fue el tema de una pieza titulada ‘Always and Forever', que se estrenó el año pasado en el Watts Village Theater de Los Angeles. Y existe un cantante de hip-hop que actúa bajo el nombre de Malverde.
"El atractivo de Jesús Malverde es que era un inconformista", dijo Guillermo Avilés-Rodríguez, director artístico del Watts Village Theater. Que la iglesia católica no reconozca a Malverde como uno de sus santos corresponde con su imagen como un marginal.
"Eso también es bello, porque fue la gente la que lo convirtió en santo", dijo Avilés-Rodríguez. "Malverde representa la creencia, el poder y la voluntad de la gente".

8 de febrero de 2008
©new york times
cc traducción mQh
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