la nación entrevista a obispo goic
5 de mayo de 2008
[Beatriz Michell] Santiago, Chile. Es el curita que instaló el tema del salario ético, le puso cifra y se ganó el respeto de los trabajadores más incendiarios. No le gusta el modelo económico, cree que Estados Unidos es el corazón del ’imperio’ y que la lógica del lucro es perversa. No es un revolucionario, pero un día llegó a mediar en un conflicto laboral y nunca más pudo desligarse de ese mundo.
Alejandro Goic llega de su sesión de acupuntura manejando su camioneta, la estaciona y se dirige a su escritorio. "El kinesiólogo me lo recomendó por mis problemas a la espalda", confiesa, mientras corre unas sillas para que todos puedan sentarse durante el encuentro. Se acomoda detrás de su mesa, sonríe con suavidad y comienza a disparar diplomáticamente contra el "neoliberalismo". Es viernes y su casa está casi vacía porque le dio libre a los trabajadores del epicopado "para que puedan estar con sus familias". No le importa que lo tilden de comunista por asegurar que no hay democracia sin justicia social, y habla de Jesús como si se tratara del Che Guevara. Criticado por Evelyn Matthei por proponer un salario ético "sin saber de economía", el presidente de la Conferencia Episcopal fue el único que logró un acuerdo entre los trabajadores del cobre y Codelco el año pasado. Un dirigente de la Iglesia que defiende la negociación colectiva con tanta fuerza como el fallo del Tribunal Constitucional contra la píldora y que en medio de un nuevo conflicto de los subcontratistas de la minera y del Día del Trabajo, vuelve a hablar de economía. No importa si lo hacen callar.
En su prédica del Día del Trabajo, usted dijo que hay que resolver los conflictos laborales de la manera más justa posible. ¿Qué significa eso concretamente?
Es inevitable que en la sociedad existan conflictos, pero la manera humana y racional de enfrentarlos es a través del diálogo. Es el único camino humano para resolver los conflictos. Cuando se usa la violencia, en que el más fuerte derrota al más débil, no cabe la paz social. Esa es la manera más justa: que los distintos actores de un conflicto se sienten, escuchen las razones que tiene uno y que tiene el otro y que sean capaces de ceder. Si sólo quiere ganar uno, no tiene sentido el diálogo.
Codelco ha dicho que los trabajadores deben negociar con sus empresas directas. Legalmente, el argumento de la estatal es muy válido. ¿Qué opina usted al respecto?
Es válido y así lo manifiesta la Ley de Subcontratación, pero acá hay que enfrentar una realidad concreta. El año pasado hubo un conflicto y el acuerdo marco se firmó entre Codelco y los contratistas. Si la política de ahora en adelante es que los trabajadores contratistas conversen con su empresa contratista, de acuerdo; pero el acuerdo marco del año pasado se firmó entre Codelco y la CTC [Confederación de Trabajadores del Cobre]. Ante este desacuerdo, ¿por qué no dialogar?
Según los antecedentes que usted tiene, ¿el acuerdo marco se cumplió o no?
Yo he escuchado en estas semanas a ambos y no tengo por qué dudar de la palabra de unos ni de otros. Cuando estuve de facilitador se crearon comisiones para salud, vivienda, educación y bono de productividad. Uno de los altos ejecutivos de Codelco dijo que esto iba a traer dificultades. La verdad es que hubo muy pocas reuniones. Se juntaron algunas veces, los ejecutivos de Codelco cedieron algunos puntos y los dirigentes de la CTC también cedieron. Pero hubo temas en que no llegaron a acuerdo y ahí estamos.
Pero Codelco dice que no se va a sentar a negociar con los contratistas, y al ministro Osvaldo Andrade lo criticaron por apoyar el diálogo. ¿Cree que el conflicto va a llegar a buen puerto en algún momento?
Yo creo que sí. No se puede mantener una situación que no le hace bien a nadie sólo porque quiero que se haga lo que yo digo. No le hace bien al país. El país depende de lo que le da Codelco, y no beneficia a los trabajadores ni a las esposas de los contratistas que están sin recibir salario. Hay un grupo violentista que se escuda en el anonimato y tampoco deja trabajar a los trabajadores de planta. El gobierno y Codelco deben ponderar cuál es la forma de solución mediante el diálogo.
¿Estos grupos violentistas son trabajadores o personas ajenas al movimiento?
Por lo que he sabido, son muy pocos los que son propiamente contratistas. Hay algunos también. Pero hay muchos que están encapuchados y no los han detenido, así que uno no sabe quiénes son. El jueves, en la marcha de la CUT, que fue muy importante, al final hubo un incidente, pero los incidentes los provocan violentistas que parece que están como preparados para generar esta especie de anarquía.
Libertad con Hambre
El jueves, el cardenal Errázuriz dijo que hay que mejorar las condiciones laborales y que las empresas tienen que velar por el bien común de los trabajadores y no sólo por el lucro. ¿Qué significa mejorar las condiciones laborales?
El Papa Benedicto dice que en el mundo hay dos lógicas en términos económicos: la lógica del lucro y la lógica del compartir. La lógica del lucro es cuando quiero todo para mí. La lógica del compartir es para mí, dueño o empresario, y también para los que me ayudan a desarrollar la empresa. El camino humano es crear una economía en que la lógica esté en el compartir. Desde mi llamado al sueldo ético hubo empresas en que todos los sueldos menores a los 250 mil pesos los subieron hasta esa cifra, y otras han hecho el esfuerzo para subirlo. Esto significa que no es algo imposible en Chile. A mí me criticaron mucho cuando le puse cifra al salario ético.
Le dijeron que no sabía nada de economía.
Exactamente, se ríe . Pero los investigadores sociales me dijeron que fue un acierto haberle puesto cifra, porque si no no habría pasado nada. Siempre se ha hablado de que hay que mejorar los sueldos, pero nos quedábamos ahí. Uno tiene que ponerse en el lugar de los otros. Cuando voy al supermercado a comprar las cosas para el mes con el sacerdote que vive conmigo, gasto 90 ó 100 mil pesos en un carrito de supermercado. Y hay tanta gente a la que apenas le entran 120 ó 130 mil pesos. ¿¡Cómo viven!? ¿Cómo no ponernos en su lugar? Decimos que Chile es un país solidario, un país de hermanos. Bueno, que eso se traduzca en el esfuerzo.
¿El esfuerzo de subir los sueldos de los trabajadores?
Hoy hay un gigante económico que tiene una economía neoliberal, China, y que está creciendo económicamente al 7 u 8%, pero a costa de sus trabajadores, que ganan dos o tres dólares al día. Hay países que tienen economías sumamente neoliberales, pero ninguna libertad política. Por otro lado, Estados Unidos, que es el corazón del imperio, tiene este sistema neoliberal que no tiene la lógica del compartir detrás. Hay algo en el mundo que funciona mal. No es políticamente correcto hablar mal de los gigantes económicos porque hacemos acuerdos comerciales con ellos. ¿Pero no defendemos la libertad humana?, ¿no defendemos al ser humano en su integridad? Seamos coherentes.
¿Es posible crear un sistema económico con crecimiento, prosperidad y equidad?
Sí. Ese es el desafío. Libertad, desarrollo y compartir los bienes. Esa es una verdadera democracia. Si tengo un gran desarrollo económico pero no tengo libertad, poco me sirve. Si tengo libertad pero estoy pasando hambre, poco me sirve.
¿En Chile hay personas que tienen más libertad que otras?
Si entendemos por libertad gozar de los bienes de este mundo, de una buena educación, de una vivienda digna, claro que hay personas que tienen más libertad que otras. Jesús no habla específicamente de la economía de mercado, pero habla de la capacidad de amar, del que sufre, del pobre. Todas las necesidades del ser humano, para uno que cree en Cristo, tienen que ser mis propias necesidades. No puedo dormir tranquilo si hay gente que está pasando frío, hambre, viviendo en viviendas precarias, etc. Es lo que decía San Alberto Hurtado: no habrá democracia integral sin justicia social.
Y lo tildaron de comunista.
Lo tildaron de comunista. Bueno, pero así es. Esa es la verdad.
Quizá van a decir lo mismo de usted.
No importa se ríe con ganas . Cuando hablo de otros temas me tildan de conservador. Bueno, así es la vida.
Oír a los Trabajadores
Usted dice que tiene la esperanza de que el Consejo de Trabajo y Equidad llegue a buen puerto, pero sobre el tema de negociación colectiva no hay consenso. ¿Es posible un acuerdo amplio para mejorar las condiciones laborales, considerando que hay muchos intereses individuales?
Yo tengo mucha esperanza de lo que va a proponer la Comisión de Equidad. Hay gente muy inteligente de los distintos sectores. No puedo hablar del documento porque sólo sé lo que se ha filtrado, pero es un derecho legítimo de los trabajadores el poder organizarse y formar sindicatos. Es lamentable que en Chile sea tan baja la tasa de organización sindical. Los trabajadores tienen que hacer oír su voz, así como hacen oír su voz los empresarios, como hace oír su voz el gobierno. No es una concesión gratuita que el estado le da a las personas, es un derecho de los trabajadores a organizarse y a negociar sus legítimas aspiraciones en condiciones razonables. Sin negociación colectiva es difícil llegar a mayor equidad.
¿Qué llamado haría usted a los trabajadores, políticos y empresarios católicos?
Si son creyentes, hay que ser serio y coherente con el mensaje de Jesús. Él dice claramente que el santo es el hombre justo, el que practica la justicia y toma una opción preferencial y clara por los más pobres. Un trabajador católico, un gobernante católico y un empresario católico tienen que trabajar con este mensaje. Hay dos principios en el tema de capital y trabajo. Primero, que la persona del trabajador vale por el trabajo que realiza, independiente de cuál sea este trabajo. Por ejemplo, el trabajo de la persona que nos recoge los desechos de nuestros hogares, así como el trabajo de la Presidenta, tiene un valor en sí mismo, porque la persona que realiza el trabajo es la que importa. Lo segundo es que hay una primacía del trabajo por sobre el capital. Por lo tanto, los que somos católicos y tenemos responsabilidades tenemos que organizar las relaciones laborales en torno a estos dos principios. En Chile hay una desproporción gigantesca. Hay un porcentaje de personas que gana sueldos millonarios al mes, y que un obrero no lo gana en toda su vida. Eso es un escándalo.
Temporeros en Paro
El 1 de mayo del año pasado los obreros forestales encabezaron la marcha de la CUT. Este año fueron los subcontratistas de Codelco. El próximo año serán otros. Los conflictos sindicales explotaron con fuerza el 2007 y no piensan cesar. Salmoneros, forestales y mineros han manifestado claramente su intención de movilizarse aunque la ley no los acompañe. Hay otros sectores de la economía que se están organizando. Uno de los más fuertes es el de los temporeros, que ya comenzaron a protestar en diciembre de 2007. La organización que aglutina a los campesinos es la Confederación Campesina y del Agro Ranquil.
En marzo cerca de 200 temporeros que trabajaban en un fundo de la empresa Verfrut se tomaron una carretera en Las Cabras en protesta por los bajos e inestables salarios. "Estamos pidiendo un sueldo base de 251 mil pesos, que fue el sueldo ético que planteó la Iglesia y el respeto por la dignidad de los trabajadores", aseguró entonces el presidente de la Ranquil, Luis Cáceres. El 16 y 17 de abril, un grupo de trabajadores se tomaron un fundo en Copiapó, atrasando en un mes la entrega de fruta al extranjero. "Si los trabajadores se paran, los empresarios no pueden cumplir con los contratos que tienen a nivel internacional", asegura Eduardo Osses, activista de la Ranquil.
A partir del invierno comenzarán nuevas movilizaciones, que ya se están preparando, pero las más fuertes vendrán en la temporada de verano, que comienza en noviembre.
©la nación 
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