MÉDICOS EN REINO UNIDO DENUNCIAN A GOBIERNO POR NEGAR ATENCIÓN A ILEGALES - tash shifrin
Londres, Reino Unido. Los médicos han lanzado una campaña exigiendo "lo mejor que puede ofrecer el Servicio Nacional de Salud" para refugiados y solicitantes de asilo. Califica los controles de la situación de los pacientes refugiados como "poco éticos e ineficientes".La Unión de Médicos Practicantes (MPU, Medical Practitioners' Union), parte de la súper unión Amicus, ha comenzado una petición contras las reglas de gobierno que impiden al Servicio Nacional de Salud atender a pacientes refugiados cuyas peticiones de asilo han sido rechazadas.
Los ministros están actualmente consultando planes que también excluirán de los servicios médicos a los refugiados rechazados.
El grupo de doctores ha pedido que los trabajadores de la salud tengan derecho a negarse a entregar la identidad de un paciente si con ello se le quiere privar de cuidados médicos.
En un artículo, Ron Singer, presidente de la Unión de Médicos Practicantes y médico practicante de Londres, publicado en la revista médica Lancet en su edición de esta semana dice: "Nadie puede distinguir entre un inmigrante ilegal y un solicitante de asilo rechazado, excepto basándose en suposiciones, o haciendo preguntas tendenciosas, de la gente que suena como extranjera o que se ve como extranjera".
Continúa: "Los médicos tenemos el deber de no considerar factores no clínicos de un paciente mientras no se satisfaga sus necesidades médicas inmediatas. Pero los médicos de hospitales tienen ahora dos nuevas prioridades: primero, decidir si pueden ser calificados de casos urgentes y por tanto que pueden recibir atención del SNS, y, segundo, si no es urgente, si el paciente tiene derecho a atención clínica según las regulaciones del SNS".
El doctor Singer escribe: "Esto es poco ético e ineficiente. Los trabajadores de la salud no ser puestos en esta posición en que hay que mezclar imperativos médicos con cuestiones legales".
Agrega que al rechazar a pacientes antes de que se transformen en casos urgentes se crea "una falsa economía, ya que los costes de un tratamiento de urgencia eventuales serán probablemente mucho más altos".
El MPU ha llamado al gobierno a devolver los cuidados médicos gratuitos del SNS a los pacientes refugiados cuyas solicitudes de asilo han sido rechazadas y a abolir la polémica sección 55 de la Ley 2002 de Nacionalidad, Inmigración y Asilo, que rehúsa a los solicitantes de asilo todo tipo de beneficio si no se registran dentro de tres días de su llegada al Reino Unido.
La unión ha escrito a la Asociación Médica Británica, a los colegios reales y otras organizaciones de la salud pidiéndoles su apoyo oficial de la campaña.
El doctor Jonathan Fluxman, médico practicante de Londres, dijo: "A los trabajadores de la salud nos preocupa cada vez más los ataques del gobierno contra los solicitantes de asilo y el efecto negativo que tiene en la salud de la gente. Negar a la gente el derecho a atención médica ciertamente va a causar sufrimientos y seguramente muertes entre un grupo muy vulnerable de la sociedad.
"Lo que el gobierno nos pide va contra uno de los principios básicos del servicio médico: que el cuidado médico es un derecho de todos".
El doctor Singer agregó: "El gobierno se comporta de manera groseramente hipócrita y engaña al público: los refugiados no son la causa de los problemas del Servicio Médico Nacional. La verdadera causa es la sub-financiación del SNS en los últimos 25 años, de 237 billones de libras de acuerdo al informe Derek Wanless para Hacienda.
"Llamamos a todos los trabajadores de la salud a unirse a esta campaña, firmen la petición y pidan al gobierno que cambie su desdichada actitud hacia la gente necesitada".
9 junio 2004
©guardian ©traducción mQh
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