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PRISIÓN Y DOS AÑOS DE LIBERTAD VIGILADA POR MANCHAR CON TOMATE A MINISTRO


Penas de prisión para las activistas que mancharon con salsa de tomate a la ministro responsable de las deportaciones de refugiados, con un período de libertad vigilada de dos años. La extrema derecha quiere atemorizar a sus opositores.

Ámsterdam, Holanda. Las dos mujeres que el mes pasado mancharon con salsa de tomate a la ministro Verdonk (Extranjería e Integración) fueron condenados ayer por un juez de policía de Ámsterdam en ausencia a 18 días de cárcel.
De la pena impuesta, una semana es condicional, con un período de probación de dos años. La pena incondicional corresponde al período de detención preventiva de las mujeres, que se extendió durante once días. El juez dio por probado que las mujeres son culpables de agresión, resistencia ante la autoridad y destrozos en el traje de la ministro. Las dos deben pagar los costes de la tintorería, 15,35 euros. El fiscal había pedido cuatro semanas, de las cuales dos condicionales y dos años de prueba.
El juez de policía dispuso en su sentencia que el "incidente de la salsa de tomates" es un hecho aislado y no está relacionado con otras amenazas más graves a la ministro. Tampoco aceptó la calificación de la procuraduría de que semejante acción "está cercana al terrorismo". En la motivación de la pena llamó la atención sobre las emociones que despertó en la sociedad, dados los incidentes en el pasado.
Las dos activistas no se presentaron a la corte ayer, porque creen que han tenido "suficiente", según se desprende de una declaración de la que citaron los abogados. Con su acción simbólica quieren solamente mostrar su rechazo a la política de deportaciones de la ministro Verdonk. Como la ministro es de difícil acceso, querían de esa manera "entrar con contacto con ella".
La política fue manchada por salsa de tomate el 16 de junio durante una visita a Ámsterdam. La policía detuvo a las mujeres. Se negaron a entregar su identidad y fueron llevadas a tribunales al día siguiente. La procuraduría pública OM las quería dejar en prisión hasta el día del juicio, pero el juez de distrito las dejó en libertad. Una semana más tarde determinó el tribunal de Ámsterdam en apelación que las activistas debían seguir en prisión. Las mujeres se presentaron voluntariamente y fueron detenidas durante diez días.
La defensa denunció la manera en que la Cámara ha tratado el asunto. Debido a ello no fue posible un proceso honesto. Por eso pidieron a la procuraduría que se declarara incompetente. El tribunal rechazó la petición.
La Cámara realizó un debate urgente a petición de la LPF (neo-nazis) con los ministros Donner (Justicia) y Remkes (Asuntos Interiores). Muchos partidos se expresaron en términos negativos sobre la conducta de la procuraduría y del juez de distrito y dijeron que la pena había sido sugerida por la Cámara.

25 de julio de 2004
©traducción mQh
©nrc

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