ABSENTA LEGALIZADA OTRA VEZ - stasja köhler
Después de casi un siglo, se puede volver a beber absenta, la bebida que le costó una oreja a Vincent van Gogh. "Después del primer vaso ves las cosas como las quieres ver. Después del segundo, como no son. Y después del tercero, como realmente son y es lo más horrible de todo" (Oscar Wilde).
Ámsterdam, Holanda. El juez de policía decidió el viernes que la bebida de anís alcohólica puede venderse otra vez, después de casi 95 años."Si Menno gana, toda Holanda brindará con absenta". Esto es lo que dice en la camiseta del bodeguero Menno Boorsma (63). Y Menno ganó. Tras oir de la decisión del juez no ha podido contener las lágrimas. Esta bebida mágica' de anís estaba estrictamente prohibida en Holanda desde 1909, pues se supone que alucinas si la bebes. Vincent van Gogh parece que se cortó la oreja bajo el efecto de este trago.
A Boorsma le pusieron una multa de 450 euros a principio de año por vender absenta. Él se negó a pagarla y decidió luchar por esta bebida, que sabe como Ricard y raki. La bebida contiene thujon, que, combinada con un alto porcentaje de alcohol, puede provocar alucinaciones.
La ley de la absenta de 1909 dice, no obstante, que los biters, entre los que se encuentra la absenta, pueden llevar hasta 35 miligramos de thujon. Las botellas que el señor Boorsma vendía llevaban 12 mg solaemnte, lo cual no es delito. "El juez no tenía donde agarrarse", dice Boorsma. Pero el ministerio público quiere recurrir la sentencia.
El bodeguero parte de que las botellas que adquiere no contienen una dosis más alta a la permitida. Él no se va a poner a controlarlo, por lo que es posible que alguna botella haya con más de 35 miligramos de thujon. Ahí le pueden volver a poner una multa. "Si eso ocurre les declaro lal guerra", dice.
Su proveedor ya huele los billetes y ya le ha suministrado a 100 botellas de absenta a Boorsma, que tiene la botillería en la Ferdinand Bolstraat. "Estas se me acaban en una semana", declara alegre. También él mismo disfrutará de unos vasitos de absenta. Por cierto, que él nunca vio casas raras. "Pero sí después de beberme una botella de güiski".
25 juli 2004
©hetparool
©traducción mQh
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