EN BRASIL, 281 POLICÍAS FUERON ASESINADOS EN LO QUE VA DEL AÑO
Inusitada violencia en ciudades de Brasil: 281 policías asesinados entre enero y julio. En Estados Unidos, en el mismo período: 34. Los dos bandos aplican extremada violencia en sus enfrentamientos.
Río de Janeiro, Brasil. Brasil registra otro récord provocado por sus altísimos niveles de violencia: 281 policías fueron asesinados entre enero y julio de 2004, según un relevamiento realizado por el diario Folha de Sao Paulo.
El estado brasileño más cruento para los policías es Río de Janeiro, que cuenta con 14 millones de habitantes, donde fueron asesinados 81 policías entre enero y julio. En Río, la policía enfrenta a poderosas facciones de narcotraficantes que controlan las favelas y las prisiones de la ciudad.
En el mismo período, 34 policías fueron asesinados en Estados Unidos y 65 en Colombia, país azotado por una guerra civil.
En el estado de Sao Paulo, el más poblado de Brasil con 35 millones de habitantes, 59 policías fueron ultimados en los primeros siete meses del año.
Según la socióloga Julita Lemgruber, "mueren más policías en Brasil porque las autoridades de aquí combaten la violencia con violencia".
Entre enero y mayo de este año, 497 personas fueron ultimadas por la policía en Río de Janeiro, mientras que en 2003, la policía mató a 1.195 personas en este estado (32,7% más que en 2002), según una investigación de la ONG Centro de Justicia Global y del Grupo de Investigación de Violencia y Criminalidad de la Universidad del Estado de Río.
El 83% de las personas muertas en Río por la policía en 2003 fueron abatidas en acciones sin testigos, 65% de las víctimas no tenía antecedentes penales y 61% presentaba disparos en la cabeza o en la espalda.
En el estado de Sao Paulo, la policía mató a 915 personas en 2003 (11% más que el año anterior).
El relevamiento de Folha arrojó que 71% de los policías asesinados lo fueron cuando estaban fuera de servicio.
Los delincuentes responden a las ejecuciones extrajudiciales practicadas por la policía con el asesinato de policías, cuando los identifican.
El investigador Gláucio Soares, del Instituto Universitario de Investigación del estado de Rio de Janeiro, indicó que los altos números de policías muertos se debe a que para los delincuentes brasileños "un buen policía es un policía muerto".
El director de la Asociación de Policías militarizados de Brasil, teniente Melquisedec do Nascimento, indicó que debido a sus bajos salarios los policías deben residir en favelas donde el riesgo de ser asesinados es mayor. Las favelas están controladas por bandas de narcotraficantes.
Además, los policías brasileños trabajan como guardias de seguridad en sus horas libres y los que mueren en esas funciones engrosan la lista de los muertos fuera de servicio.
Brasil, con 180 millones de habitantes, registró 44.000 homicidios en 2003, informó la Secretaría nacional de Derechos Humanos.
4 de agosto de 2004
©mipunto
El estado brasileño más cruento para los policías es Río de Janeiro, que cuenta con 14 millones de habitantes, donde fueron asesinados 81 policías entre enero y julio. En Río, la policía enfrenta a poderosas facciones de narcotraficantes que controlan las favelas y las prisiones de la ciudad.
En el mismo período, 34 policías fueron asesinados en Estados Unidos y 65 en Colombia, país azotado por una guerra civil.
En el estado de Sao Paulo, el más poblado de Brasil con 35 millones de habitantes, 59 policías fueron ultimados en los primeros siete meses del año.
Según la socióloga Julita Lemgruber, "mueren más policías en Brasil porque las autoridades de aquí combaten la violencia con violencia".
Entre enero y mayo de este año, 497 personas fueron ultimadas por la policía en Río de Janeiro, mientras que en 2003, la policía mató a 1.195 personas en este estado (32,7% más que en 2002), según una investigación de la ONG Centro de Justicia Global y del Grupo de Investigación de Violencia y Criminalidad de la Universidad del Estado de Río.
El 83% de las personas muertas en Río por la policía en 2003 fueron abatidas en acciones sin testigos, 65% de las víctimas no tenía antecedentes penales y 61% presentaba disparos en la cabeza o en la espalda.
En el estado de Sao Paulo, la policía mató a 915 personas en 2003 (11% más que el año anterior).
El relevamiento de Folha arrojó que 71% de los policías asesinados lo fueron cuando estaban fuera de servicio.
Los delincuentes responden a las ejecuciones extrajudiciales practicadas por la policía con el asesinato de policías, cuando los identifican.
El investigador Gláucio Soares, del Instituto Universitario de Investigación del estado de Rio de Janeiro, indicó que los altos números de policías muertos se debe a que para los delincuentes brasileños "un buen policía es un policía muerto".
El director de la Asociación de Policías militarizados de Brasil, teniente Melquisedec do Nascimento, indicó que debido a sus bajos salarios los policías deben residir en favelas donde el riesgo de ser asesinados es mayor. Las favelas están controladas por bandas de narcotraficantes.
Además, los policías brasileños trabajan como guardias de seguridad en sus horas libres y los que mueren en esas funciones engrosan la lista de los muertos fuera de servicio.
Brasil, con 180 millones de habitantes, registró 44.000 homicidios en 2003, informó la Secretaría nacional de Derechos Humanos.
4 de agosto de 2004
©mipunto
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