VERDONK DEFIENDE POLÍTICA DE INTEGRACIÓN
La notoria ministro de Extranjería, Verdonk, defiende ante el Parlamento su política de integración denunciada en numerosas ocasiones por sus rasgos fascistoides. Ahora la ministro se permite también hacer mofa del fallecido Príncipe Claus, que afirmaba ser antes ciudadano del mundo que holandés. Da a conocer la lista de países cuyos nacionales pueden casarse con nativos holandeses y vivir en Holanda, con exclusión del resto de nacionalidades.
Obtener la nacionalidad holandesa es la "principal recompensa" que esperan los extranjeros que se mudan a Holanda y renunciar a su nacionalidad original no debe significar un problema, dijo la ministro de Inmigración, Rita Verdonk el jueves. "Al adoptar la nacionalidad holandesa, se implica que uno tiene un vínculo con la sociedad holandesa", dijo. La ministro se expresó así en el Parlamento durante un debate sobre la política de integración del gobierno holandés y su último episodio, que obligará a muchos inmigrantes a renunciar a su nacionalidad original si deciden naturalizarse holandeses. La Verdonk dijo que los inmigrantes quieren transformarse primero en holandeses, después en europeos y finalmente en ciudadanos del mundo, informó el diario De Telegraaf. La ministro, del partido de extrema derecha VVD, comentó de este modo una famosa declaración del difunto Príncipe Claus, recordada el jueves por la líder de los verdes de GroenLinks, Fenke Halsema. Hablando en 2001, el Príncipe Claus invirtió el orden de lealtades. "Una pregunta que me cuesta mucho responder y que me preguntan repetidas veces es qué significa ser holandés. Mi respuesta es que no lo sé. Tengo varias lealtades. Soy ciudadano del mundo, soy europeo y soy holandés", dijo. La Verdonk dijo que no veía cómo la restricción de las oportunidades de los extranjeros de obtener una nacionalidad doble podía impedir la integración de los extranjeros en Holanda.
Respondía así a preocupaciones expresadas por el líder de los laboristas Wouter Bos, el líder de los liberales-demócratas del partido D66, Boris Dittrich, y de Halsema, que dijo que la legislación del gobierno impulsará a los inmigrantes a decidir no adoptar la nacionalidad holandesa para mantener su nacionalidad original. Dijeron que eso obstaculizaría la integración. Pero la Verdonk dijo que tenía esperanzas de que los inmigrantes optaran por la nacionalidad holandesa. Una ceremonia especial de naturalización estimularía esa decisión, dijo.
Pero la ministro no pudo probar sus afirmaciones con hechos concretos. Bos recordó a la ministro que el número de naturalizaciones ha disminuido últimamente, basándose en estadísticas proporcionadas por la propia ministro.
Con los planes del gobierno -aprobados por el ministros del gabinete este 27 de agosto-, los extranjeros perderán la nacionalidad original si se casan con su pareja holandesa y optan por la nacionalidad holandesa. La legislación no será retroactiva y debe ser todavía ratificada por el Parlamento. Se espera que entre en vigor el próximo año. Las restricciones también afectarán a los inmigrantes nacidos en Holanda, las Antillas Holandesas y Aruba. A los inmigrantes que han vivido en esos países durante al menos cinco años en su infancia se les pedirá que renuncien a su pasaporte extranjero al adoptar la nacionalidad holandesa. Al inicio de su discurso el jueves, la Verdonk indicó que tenía dificultades en mostrar una actitud positiva hacia la fe musulmana debido que en su opinión mucha gente inocente ha sufrido a nombre del islam. Pero espers romper el clima negativo en torno al islam estableciendo un grupo de contacto entre el gobierno y los musulmanes CMO.
También dijo que el gabinete no tiene intenciones de imponer restricciones al uso del velo musulmán ni prohibir a la manera francesa el uso de símbolos religiosos. Pero el gobierno está ideando nuevas maneras de intervenir en casos donde haya indicios de que el uso del velo ha sido impuesto compulsivamente. La ministro también dijo que el gobierno no tiene intenciones de obligar a inmigrantes viejos ya integrados a seguir el curso de integración, pero a los refugiados se les ofrecerá cursos en lengua y cultura holandesa en los centros de acogida. Además, el gobierno quiere introducir cuanto antes cursos para los imanes musulmanes, aunque no se tratará de decirles cómo vivir su fe religiosa. También dijo que grupos musulmanes se han expresado positivamente sobre el curso de integración, que informará a los imanes sobre el país. La política de integración del gobierno "es dura, pero clara" y el gobierno espera comenzar el próximo año con una campaña de integración que involucrará tanto a inmigrantes como a aborígenes.
Holanda, según sostiene la ministro, ha tenido fuertes problemas de polarización social en los últimos años y la coalición de gobierno formada por los demócrata-cristianos CDA, los liberales' de extrema derecha VVD y los demócrata-liberales D66, cree que la integración de los extranjeros y la restricción de la inmigración ayudará a aliviar las tensiones sociales. Estos puntos de vista fueron defendidos, sostiene, antes y después del auge y ocaso de Pim Fortuyn -el político de extrema derecha anti-inmigración ultimado en Hilversum en mayo de 2002-, pero sus políticas entonces incorrectas se han transformado en sinónimo de corrección política en la Holanda de hoy. El gobierno holandés se aproxima así a la integración obligatoria de los nuevos y viejos inmigrantes y espera deportar a 26 mil refugiados en los años venideros. Es también el primer país en imponer cursos de integración obligatoria antes del establecimiento en el país de candidatos a la inmigración que quieran reunirse con sus parejas holandesas en Holanda. Nacionales de Estados Unidos, Australia, Nueva Zelanda y Japón que quieran reunirse para formar familia con sus parejas holandesas están excluidos del curso debido a los tratados firmados por el gobierno holandés con esos países, sostiene la ministro.
3 de septiembre de 2004
©expatica
mQh
Obtener la nacionalidad holandesa es la "principal recompensa" que esperan los extranjeros que se mudan a Holanda y renunciar a su nacionalidad original no debe significar un problema, dijo la ministro de Inmigración, Rita Verdonk el jueves. "Al adoptar la nacionalidad holandesa, se implica que uno tiene un vínculo con la sociedad holandesa", dijo. La ministro se expresó así en el Parlamento durante un debate sobre la política de integración del gobierno holandés y su último episodio, que obligará a muchos inmigrantes a renunciar a su nacionalidad original si deciden naturalizarse holandeses. La Verdonk dijo que los inmigrantes quieren transformarse primero en holandeses, después en europeos y finalmente en ciudadanos del mundo, informó el diario De Telegraaf. La ministro, del partido de extrema derecha VVD, comentó de este modo una famosa declaración del difunto Príncipe Claus, recordada el jueves por la líder de los verdes de GroenLinks, Fenke Halsema. Hablando en 2001, el Príncipe Claus invirtió el orden de lealtades. "Una pregunta que me cuesta mucho responder y que me preguntan repetidas veces es qué significa ser holandés. Mi respuesta es que no lo sé. Tengo varias lealtades. Soy ciudadano del mundo, soy europeo y soy holandés", dijo. La Verdonk dijo que no veía cómo la restricción de las oportunidades de los extranjeros de obtener una nacionalidad doble podía impedir la integración de los extranjeros en Holanda.Respondía así a preocupaciones expresadas por el líder de los laboristas Wouter Bos, el líder de los liberales-demócratas del partido D66, Boris Dittrich, y de Halsema, que dijo que la legislación del gobierno impulsará a los inmigrantes a decidir no adoptar la nacionalidad holandesa para mantener su nacionalidad original. Dijeron que eso obstaculizaría la integración. Pero la Verdonk dijo que tenía esperanzas de que los inmigrantes optaran por la nacionalidad holandesa. Una ceremonia especial de naturalización estimularía esa decisión, dijo.
Pero la ministro no pudo probar sus afirmaciones con hechos concretos. Bos recordó a la ministro que el número de naturalizaciones ha disminuido últimamente, basándose en estadísticas proporcionadas por la propia ministro.
Con los planes del gobierno -aprobados por el ministros del gabinete este 27 de agosto-, los extranjeros perderán la nacionalidad original si se casan con su pareja holandesa y optan por la nacionalidad holandesa. La legislación no será retroactiva y debe ser todavía ratificada por el Parlamento. Se espera que entre en vigor el próximo año. Las restricciones también afectarán a los inmigrantes nacidos en Holanda, las Antillas Holandesas y Aruba. A los inmigrantes que han vivido en esos países durante al menos cinco años en su infancia se les pedirá que renuncien a su pasaporte extranjero al adoptar la nacionalidad holandesa. Al inicio de su discurso el jueves, la Verdonk indicó que tenía dificultades en mostrar una actitud positiva hacia la fe musulmana debido que en su opinión mucha gente inocente ha sufrido a nombre del islam. Pero espers romper el clima negativo en torno al islam estableciendo un grupo de contacto entre el gobierno y los musulmanes CMO.
También dijo que el gabinete no tiene intenciones de imponer restricciones al uso del velo musulmán ni prohibir a la manera francesa el uso de símbolos religiosos. Pero el gobierno está ideando nuevas maneras de intervenir en casos donde haya indicios de que el uso del velo ha sido impuesto compulsivamente. La ministro también dijo que el gobierno no tiene intenciones de obligar a inmigrantes viejos ya integrados a seguir el curso de integración, pero a los refugiados se les ofrecerá cursos en lengua y cultura holandesa en los centros de acogida. Además, el gobierno quiere introducir cuanto antes cursos para los imanes musulmanes, aunque no se tratará de decirles cómo vivir su fe religiosa. También dijo que grupos musulmanes se han expresado positivamente sobre el curso de integración, que informará a los imanes sobre el país. La política de integración del gobierno "es dura, pero clara" y el gobierno espera comenzar el próximo año con una campaña de integración que involucrará tanto a inmigrantes como a aborígenes.
Holanda, según sostiene la ministro, ha tenido fuertes problemas de polarización social en los últimos años y la coalición de gobierno formada por los demócrata-cristianos CDA, los liberales' de extrema derecha VVD y los demócrata-liberales D66, cree que la integración de los extranjeros y la restricción de la inmigración ayudará a aliviar las tensiones sociales. Estos puntos de vista fueron defendidos, sostiene, antes y después del auge y ocaso de Pim Fortuyn -el político de extrema derecha anti-inmigración ultimado en Hilversum en mayo de 2002-, pero sus políticas entonces incorrectas se han transformado en sinónimo de corrección política en la Holanda de hoy. El gobierno holandés se aproxima así a la integración obligatoria de los nuevos y viejos inmigrantes y espera deportar a 26 mil refugiados en los años venideros. Es también el primer país en imponer cursos de integración obligatoria antes del establecimiento en el país de candidatos a la inmigración que quieran reunirse con sus parejas holandesas en Holanda. Nacionales de Estados Unidos, Australia, Nueva Zelanda y Japón que quieran reunirse para formar familia con sus parejas holandesas están excluidos del curso debido a los tratados firmados por el gobierno holandés con esos países, sostiene la ministro.
3 de septiembre de 2004
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