emergencia bajo seguridad interior
[Wubby Luyendijk y Rob Schoof] La reciente propuesta de gobierno de poner a los servicios de asistencia regionales, incluyendo las policías locales, bomberos y servicios médicos bajo el control de servicios de seguridad interior, ha caído mal a los gobiernos locales. También los cuerpos de policía se oponen al plan de control.
Rótterdam, Holanda. Ayuntamientos, alcaldes, bomberos, policía y servicios médicos se oponen al plan del ministro del Interior, Remkes, de crear un nuevo organismo de control de crisis junto a los servicios regionales ya existentes.
Los socorristas temen que se originen situaciones caóticas con dos organizaciones de coordinación, de las que una se ocupe de las catástrofes y la otra de la detección y prevención de entre otras cosas atentados terroristas. Así lo dio a conocer a los ministros Remkes y Hoogervorst la Coordinación de Seguridad [`Veiligheidskoepel´], que agrupa a la Asociación de Ayuntamientos Holandeses, bomberos y varios servicios de ayuda médica que son responsables de la asistencia médica y sanitaria en casos de accidentes y catástrofes. La Directiva del Cuerpo de Administradores y el Consejo de Jefes de Policía apoyan la resistencia de la Coordinación.
La coordinación de la ayuda en casos de catástrofes o accidentes está ahora en manos de 25 órganos regionales, que incluyen a los ayuntamientos, bomberos y servicios médicos que colaboran con la policía. Remkes opina que esa organización "está insuficientemente preparada para hacer frente a amenazas que son más complejas y de mayor escala y que afectan a más sectores que antes", según escribió en el plan de gestión para el control de crisis 2004-2007 que apareció en junio. Por esa razón, dice, quiere crear ese organismo de control de crisis, al que el gabinete quiere ahora agregar a los servicios de seguridad interior. Además, no es el ministro Remkes, de Interior, sino el ministro Donner, de Justicia, el que estará a cargo de este organismo de coordinación.
"No es lógico", dice Dick de Cloe, de la organización de ayuda médica en casos de accidente y catástrofes GHOR. "La preparación de la ayuda después de una catástrofe no es fundamentalmente diferente de la que debe prestarse después de un atentado. El efecto es el mismo. Hay que salvar vidas humanas, hay gente que debe ser tratada y transportada a hospitales. Naturalmente hay otros factores que deben ser tomados en cuenta, como la seguridad de los socorristas y la detención de los hechores en casos de atentados, pero esos factores no afectan la colaboración entre las organizaciones participantes".
Antes este año una investigación constató que la organización de la ayuda médica en casos de accidentes y catástrofes presenta insuficiencias. Los funcionarios sanitarios regionales no tienen, como coordinadores médicos, ningún poder, los equipos de traumas no funcionan las 24 horas del día y se hacen muy pocos ejercicios prácticos, entre otras cosas porque algunos servicios de ambulancia y 21 de las 58 centrales de aviso son privadas.
En la carta los socorristas piden que el estado vuelva a ocuparse de todas las centrales de aviso de los servicios de ambulancias, que el coordinador médico reciba más atribuciones y que se destine más dinero para ejercicios.
27 de septiembre de 2004
1 de octubre de 2004
©nrc
©traducción mQh
Rótterdam, Holanda. Ayuntamientos, alcaldes, bomberos, policía y servicios médicos se oponen al plan del ministro del Interior, Remkes, de crear un nuevo organismo de control de crisis junto a los servicios regionales ya existentes.Los socorristas temen que se originen situaciones caóticas con dos organizaciones de coordinación, de las que una se ocupe de las catástrofes y la otra de la detección y prevención de entre otras cosas atentados terroristas. Así lo dio a conocer a los ministros Remkes y Hoogervorst la Coordinación de Seguridad [`Veiligheidskoepel´], que agrupa a la Asociación de Ayuntamientos Holandeses, bomberos y varios servicios de ayuda médica que son responsables de la asistencia médica y sanitaria en casos de accidentes y catástrofes. La Directiva del Cuerpo de Administradores y el Consejo de Jefes de Policía apoyan la resistencia de la Coordinación.
La coordinación de la ayuda en casos de catástrofes o accidentes está ahora en manos de 25 órganos regionales, que incluyen a los ayuntamientos, bomberos y servicios médicos que colaboran con la policía. Remkes opina que esa organización "está insuficientemente preparada para hacer frente a amenazas que son más complejas y de mayor escala y que afectan a más sectores que antes", según escribió en el plan de gestión para el control de crisis 2004-2007 que apareció en junio. Por esa razón, dice, quiere crear ese organismo de control de crisis, al que el gabinete quiere ahora agregar a los servicios de seguridad interior. Además, no es el ministro Remkes, de Interior, sino el ministro Donner, de Justicia, el que estará a cargo de este organismo de coordinación.
"No es lógico", dice Dick de Cloe, de la organización de ayuda médica en casos de accidente y catástrofes GHOR. "La preparación de la ayuda después de una catástrofe no es fundamentalmente diferente de la que debe prestarse después de un atentado. El efecto es el mismo. Hay que salvar vidas humanas, hay gente que debe ser tratada y transportada a hospitales. Naturalmente hay otros factores que deben ser tomados en cuenta, como la seguridad de los socorristas y la detención de los hechores en casos de atentados, pero esos factores no afectan la colaboración entre las organizaciones participantes".
Antes este año una investigación constató que la organización de la ayuda médica en casos de accidentes y catástrofes presenta insuficiencias. Los funcionarios sanitarios regionales no tienen, como coordinadores médicos, ningún poder, los equipos de traumas no funcionan las 24 horas del día y se hacen muy pocos ejercicios prácticos, entre otras cosas porque algunos servicios de ambulancia y 21 de las 58 centrales de aviso son privadas.
En la carta los socorristas piden que el estado vuelva a ocuparse de todas las centrales de aviso de los servicios de ambulancias, que el coordinador médico reciba más atribuciones y que se destine más dinero para ejercicios.
27 de septiembre de 2004
1 de octubre de 2004
©nrc
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