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archivo secreto del genocidio


[Nicholas D. Kristof] Europa y Estados Unidos deben intervenir en Sudán para parar el genocidio y llevar a justicia a los asesinos. Le guste a rusos y chinos o no.


Normalmente en esta página no aparecen fotos. Pero es hora para todos nosotros de mirar derechamente a las víctimas de nuestra indiferencia.
Estas son apenas cuatro fotografías de un archivo secreto de miles de fotos e informes que documentan el genocidio en curso en Darfur. Los materiales fueron reunidos por observadores de la Unión Africana, que son casi los únicos que pueden viajar ampliamente en esa parte de Sudán.
Este archivo de la Unión Africana es clasificado, pero me lo dio a conocer una persona que cree que los americanos se conmoverán si pueden ver las consecuencias de su complacencia.
La foto en el ángulo superior izquierdo fue tomada en la aldea de Hamada el 15 de enero, justo después de que la milicia janjaweed, respaldada por el gobierno sudanés, la atacara y matara a 107 personas. Una de esas era este niño. No muestro la foto de su hermano mayor, de unos cinco años, que yace junto a él, porque su hermano fue golpeado tan brutalmente que no quedó nada de su cara. Y junto a los niños estaba el cuerpo de su madre.
La foto de la derecha muestra el cuerpo de un hombre con una pierna herida que aparentemente no pudo escapar cuando atacaron las milicias janjaweed.
En el ángulo inferior izquierdo hay un hombre que huyó descalzo y casi logró refugiarse en la selva antes de que lo mataran.
La última es el esqueleto de un hombre o mujer cuyas muñecas están todavía amarradas. Los agresores le bajaron la ropa hasta las rodillas, presumiblemente para violar sexualmente a la víctima antes de matarla. Si la víctima es un hombre, fue probablemente castrado; si fue una mujer, fue probablemente violada.
Hay miles fotos más. Muchas de ellas muestran los ataques contra los niños y son demasiado horribles como para ser publicadas en un diario.
Una desgarradora fotografía en el archivo muestra las manos esposadas de una adolescente de una escuela de niñas en Suleia que fue quemada viva. Ha sido la norma que las milicias sudanesas violen colectivamente a las adolescentes y luego las mutilen o maten.
Otra foto muestra el cuerpo de un niña, quizás de unos 10 años, mirando hacia arriba desde el lugar donde la mataron. Otra muestra a un hombre que fue castrado y disparado en la cabeza.
Este archivo, que incluye cientos de informes de los observadores, subraya que esta carnicería está siendo llevada a cabo con el apoyo del gobierno sudanés en su intento de limpiar la región de la población no-árabe. Muchas de las fotos muestran a hombres con el uniforme del Ejército sudanés saqueando y quemando aldeas africanas. Espero que la Unión Africana abra sus archivos para mostrar públicamente lo que está pasando en Darfur.
El archivo también incluye un extraordinario documento requisado a un oficial janjaweed que aparentemente bosqueja una política general de genocidio. Datado en agosto último, el documento pide que se "lleven a cabo todas las órdenes del presidente de la república" y está dirigida a los comandantes regionales y funcionarios de seguridad.
"Cambien la demografía de Darfur y vacíenla de tribus africanas", insta el documento. Alienta el "asesinato, quema de aldeas y granjas, aterrorizar a la gente, confiscar la propiedad de los miembros de tribus africanas y obligarlos a abandonar Darfur".
Vale la pena mostrarse escéptico ante cualquier documento porque es posible que haya falsificaciones. Pero la Unión Africana cree que este documento es auténtico. Yo consulté con varios expertos en Sudán y les mostré el documento, y la opinión general es que parece un documento auténtico.
Ciertamente, no hay dudas de que ha habido una carnicería, aunque las cifras son confusas. La cifra de 70.000 es a veces avanzada como una estimación de las bajas totales, pero es simplemente un cálculo de Naciones Unidas para las muertes por causas no violentas durante un período de siete meses. Es difícil saber la mortalidad total en dos años de genocidio, en parte debido a que el gobierno sudanés está impidiendo que la delegación de Naciones Unidas viaje a Darfur y haga un cálculo. Pero cálculos independientes exceden las 220.000 muertes, y la cifra crece con 10.000 muertes cada mes que pasa.
Así, ¿cómo detener el genocidio? En un nivel, la respuesta es técnica: sanciones contra Sudán, establecer una zona prohibida, congelar los capitales oficiales de Sudán, hacer que el Tribunal Internacional de Justicia procese a los asesinos, una delegación de países africanos y árabes que presionen a Sudán y una fuerza internacional de tropas africanas con financiamiento y apoyo logístico de Occidente.
Pero esa es una respuesta limitada. Lo que realmente detendrá este genocidio es la indignación. El senador Paul Simon, que murió en 2003, dijo después del genocidio ruandés: "Si cada miembro de la Cámara y del Senado hubiera recibido 100 cartas de gente de sus regiones diciendo que debemos hacer algo sobre Ruanda, cuando la crisis se estaba desarrollando, entonces creo que la respuesta habría sido diferente".
Lo mismo es verdad esta vez. Sitios en la web como www.darfurgenocide.org y www.savedarfur.org están tratando de mover a los americanos, pero la respuesta ha sido patética.
Lamento en obligarles a mirar estas horrorosas fotos. Pero la verdadera obscenidad no está en mostrar fotos de bebés muertos: está en nuestra pasividad, que permite que esta gente sea matada.
Durante los genocidios pasados contra armenios, judíos y camboyanos, era posible decir que no sabíamos completamente lo que estaba pasando. Esta vez, el presidente Bush, el Congreso y el Parlamento europeo ya han declarado que hay un genocidio en curso. Y tenemos las fotos.
Esta vez no tenemos excusas.

Se puede escribir al autor a: nicholas@nytimes.com

27 de febrero de 2005
©new york times
©traducción mQh

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