Blogia
mQh

elogio de la lechuga


[Betty Baboujon] En las copas de lechuga contrastan los rellenos picantes con frescos exteriores. Son tan deliciosas que se olvida la salsa.
Las copas de lechuga en un restaurante chino parecen un cliché -un plato que se hace fácilmente sospechoso como uno de esos platos chinos falsos hechos para placer al paladar occidental.
En realidad, es un plato tradicional auténtico, hecho popular en los restaurantes de Hong Kong hace décadas.
Fue un toque de genialidad menor cuando los cocineros cantoneses tomaron el yang de un caliente sofrito y agregaron el yin de una fría hoja de lechuga.
El maravilloso contraste de la copa de lechuga se extiende al relleno, que reúne verduras crujientes y carne blanda -cerdo, pollo o pichón, un ave de carnes oscuras de delicado sabor. A menudo se sirve con salsa hoisin al lado, pero lo propio de un gran relleno es que la salsa es optativa.
Ciertamente, uno puede pedir copa de lechuga en un restaurante, pero hacerla en casa proporciona amplias recompensas. Todo lo que necesita hacer un cocinero es incorporar el sabor desde el principio, mucho antes de que el relleno llegue a la lechuga. Sólo porque el restaurante chino a la vuelta de la esquina lo haga insulso, no quiere decir que las posibilidades no sean grandiosas.
También ocurre que uno de los rellenos cantoneses más tradicionales se basa en un ingrediente de intenso sabor que se ve en estos días rara vez en un menú: ostras secas.
Tienen un concentrado sabor a mar, y los cocineros chinos tienden a usarlas frugalmente, agregando, con la adición de unas pocas, profundidad a cocidos de verduras o cerdo. Las ostras secas se usan más generosamente en ocasiones especiales, en parte debido a que son consideradas un lujo y quizás en gran parte porque su nombre cantonés, hoe see, suena como las palabras "cosas buenas". Juntas con un homónimo de lechuga, saang choy, se obtiene un plato que dice que hay cosas buenas acercándose a usted. Piensa en noches viejas y cumpleaños.
Un antiguo libro de cocina familiar de Hong Kong, titulado ‘Chopsticks Recipes, Traditional Dishes', ofreció una receta algo críptica que resultó ser espectacularmente buena. La lista de ingredientes es más bien larga, resaltando los ingredientes tradicionales como retoños de bambú, castañas de agua frescas, verduras en escabeche y champiñones shiitake secos.
Intente hacer una copa de lechuga con ostras secas y verá que son muy especiales por otra razón: Exigen tiempo y esfuerzo. La cocción misma toma apenas unos minutos, pero primero hay que reunir los ingredientes y cortarlos, picarlos en cubitos y rallarlos. Y a menos que ya tengamos una alacena china, tendremos que ir de compras.
Las ostras, que se pueden hablandar con unas horas de remojo, se mezclan con dos tipos de cerdo, un surtido de verduras frescas (habas chinas, retoños de bambú, zanahoria y castañas de agua) que crujan, y varias hierbas, especias y condimentos, incluyendo cilantro, jengibre y aceite de sésamo, para redondear los sabores.
Cuando compremos las ostras, escogeremos las más grandes y carnosas. El plato también exige, en su versión de Sichuan, verduras en conserva, lo que quiere decir que hay que conseguir el tubérculo en escabeche de las hojas verdes de mostaza (y no las hojas). Y si los encontramos, compraremos también retoños de bambú frescos (vendidos en bolsas de plástico al vacío o a granel en un supermercado chino) y castañas de agua frescas, que son más crujientes y más dulces (como la jícama) que sus contrapartes enlatadas.
Como con todo en este plato, cada parte de esfuerzo lo recompensa con un montón de sabor. La recompensa es un plato único y delicioso -uno que no probará probablemente a menos que lo hagas usted mismo.
El chef Andrew deGroot ofrece una versión moderna en el Restaurante Yu de Santa Mónica. Para su bistec envuelto en hojas de lechuga, introduce un batallón de sabores, combinando carne molida dorada con una tentadora combinación de salsas dulces, saladas y picantes, terminándolas con menta fresca y cilantro.
DeGroot sirve el relleno con lechuga mantecosa, llamada también de Boston o cabeza de mantequilla, que se presta más para envolver que para la copa porque las rugosas hojas se pueden doblar sobre el relleno. "Hemos usado lechuga iceberg y romana", dice, "pero descubrimos que es mejor con la lechuga mantecosa, porque tiene forma de copa".
Las lechugas pueden ser mezcladas y combinadas con los rellenos, e incluso podemos aventurarnos más allá de los sospechosos habituales.
Las hojas de achicoria roja, por ejemplo, envuelven maravillosamente un relleno de gambas con alcachofas. En esta versión, las crujientes y frescas gambas adquieren el toque de sabor de la hierbalimón y de los corazones de alcachofa ligeramente crujientes, que son un apto reemplazo moderno de los retoños de bambú y las castañas de agua. El relleno adquiere una textura adicional con el arroz de pasta frito y el toque agradablemente amargo de la hoja de achicoria (que no es lechuga, pero funciona igual de bien en una copa).
Con las copas de lechugas no hay límites para los sabores, dentro o fuera. Ni debería haberlos. Para hacer un plato tan divertido se necesita espíritu de aventura -sea que queramos experimentar con nuestras propias versiones o probar una vieja receta con ingredientes exóticos.

Rollos de Lechuga de Bistec
25 minutos
4 raciones
Nota: Del chef Andrew deGroot, del Yu Restaurant & Lounge en Santa Monica.

285 g (20 por ciento grasa) de carne molida
2 cucharadas de aceite de semillas de uva
½ taza de castañas de agua picadas (escurridas)
1/4 taza de salsa tailandesa de guindilla (marca Mae Ploy)
2 cucharadas de salsa de soja
2 cucharadas de salsa de soja indonesia kechap manis
2 cucharadas de menta picada gruesa
2 cucharadas de cilantro picado grueso
2 cucharadas de cebollas verdes en rodajas
1 lechuga mantecosa grande, limpia, hojas separadas

Preparación:
1. Fría la carne molida hasta que esté completamente hecha, unos 5 minutos. Con un colador fino, escurra el bistec de todos sus jugos y aceites.
2. Coloque una sartén a fuego alto. Agregue el aceite de pepitas de uva. Fría las castañas de agua hasta que queden crujientes, 2 minutos. Agregue la carne, la salsa de guindilla, la salsa de soja y el kechap manis. Mezcle hasta que se fundan las salsas. Cocine durante 1 minuto. Agregue la menta y el cilantro, mezclando bien.
3. Traslade la mezcla a un cuenco de 115 gramos y decore con las cebollas verdes. Coloque el cuenco en otro plato más grande. Cubra el cuenco con hojas de lechuga. Use una cuchara para colocar el relleno en las hojas.

Cada ración: 225 de calorías; 13 gramos de proteínas; 8 gramos de carbohidratos; 2 gramos de fibra; 16 gramos de grasa; 4 gramos de grasa saturada; 41 miligramos de colesterol; 1.121 miligramos de sodio.

Copa de Lechuga de Ostras
1 hora, 45 minutos más el tiempo de remojo
4 raciones
Nota: Adaptada de ‘Chopsticks Recipes, Traditional Dishes', de Cecilia J. Au Yeung.

115 g de ostras escurridas
4 champiñones secos shiitake
pizca de sal y azúcar
1/3 de taza de cerdo magro cortado en cubitos
1 cucharadita de vino o jerez de arriz, dividido
2 cucharadas de maicena, dividida
2 cucharadas de salsa de soja, dividida
1/3 de taza de retoños de bambú picados, frescos
2 cucharadas más 1½ cucharadita de aceite, dividida
1 cucharadita de jengibre rallado2 cebollas verdes, en rodajas
½ taza de zanahoria picada fina
2/3 de taza de habas chinas
1/3 de taza de castañas de agua picadas (en 6 pedazos cada castaña), frescas
½ taza de cerdo asado chino char siu picado fino
3 cucharadas de verduras en conservas de Sichuan, picadas finas
1 cucharadita de salsa de ostras
½ cucharadita de aceite de sésamo
1 cucharada de cilantro picado
1 lechuga iceberg, lavada, deshojada

Preparación:
1. Lave las ostras escurridas y los champiñones shiitake. En cuencos separados, remójelos en agua fría hasta que ablanden, al menos 4 horas dependiendo del tamaño y dureza de las ostras. (Puede quedar durante la noche).
2. Saque del agua las ostras y champiñones y traslade a un cuenco. Reserve un cuarto de taza del agua de las ostras, cuidando de que no queden granitos de arena. Revuelva las ostras y champiñones con una pizca de sal, una de azúcar y la mitad de una cucharadita de aceite. Transfiera la mezcla a un vaporizador de una capa. Vaporice hasta que ablanden, unos 20 minutos. Cuando estén fríos, escurra el agua de los champiñones y píquelos finos. Corte las ostras en cubitos de un cuarto de pulgada. Aparte.
3. En un cuenco pequeño coloque el cerdo magro, media cucharadita de vino de arroz, 1 cucharadita de maicena y 1 cucharadita de salsa de soja. En otro cuenco pequeño, mezcle el agua reservada de las ostras con 1 cucharadita de maicena y 1 cucharadita de salsa de soja.
4. Ponga todos los ingredientes al alcance de la mano. Coloque los retoños de bambú en una sartén antiadherente. Fría en seco los retoños de bambú, dejando que se evapore algo de su agua, unos 2 minutos. (No deje que se doren; reduzca el fuego si es necesario y de vuelta para el segundo paso).
5. Agregue 2 cucharadas de aceite, el jengibre y las cebollas verdes, saltee durante 30 segundos. Agregue la zanahoria, friéndola hasta que quede crujiente, unos 2 minutos. Agregue revolviendo el cerdo marinado. Cuando el cerdo dore, agregue las habas chinas, cocinándolas durante 1 a 2 minutos. Suba el fuego y agregue las ostras, champiñones, castañas de agua, el cerdo asado y las verduras en conserva. Mezcle bien y caliente. Revuelva con la salsa de ostras, luego agregue la media cucharadita de vino de arroz. Haga una camita en el centro y coloque la mezcla de maicena, revolviendo y dejando cocer hasta que espese, un minuto. Apague el fuego; eche el aceite de sésamo, la cucharadita restante de aceite y el cilantro.
6. Sirva en un cuenco grande, con una cuchara, con las copas de lechuga a un lado.

Cada ración: 289 de calorías; 15 gramos de proteína; 27 gramos de carbohidratos; 3 gramos de fibra; 14 gramos de grasa; 3 gramos de grasa saturada; 50 miligramos de colesterol; 514 miligramos de sodio.

Copa de Lechuga de Gambas y Alcachofas
45 minutos
4 raciones, entradas
Nota: Puede substituir las hojas de lechuga romana por la achicoria.

2 alcachofas grandes (de 225 gramos cada una)
2 cucharaditas de zumo de limón
1 1/8 cucharadita de sal, dividida
½ cucharadita de azúcar
1 cucharadita de salsa de soja ligera
1 cucharadita de vino de arroz
2 cucharaditas de maicena
225 g de gambas peladas, cortadas gruesas
½ taza de palitos de arroz (optativo)
2 cucharadas de aceite, dividido, más 2 o 3 tazas adicionales para la freidora de inmersión
1 diente de ajo, cortado en tiras1 cucharada de hierlimón molida
1 cucharada de cebollas verdes picadas
1 cucharadita de vinagre de arroz sazonado
1 cucharada de cilantro picado
1/4 de cucharadita de pimienta blanca
1 cabeza de achicoria, deshojada, con los tallos recortados

Preparación:
1. Deshoje las alcachofas, retire las hojas y recorte todas las durezas verdes de la base. Corte el corazón en dos y deseche la base picosa. Hierva agua en una cazuela pequeña. Agregue el jugo de limón y una cucharadita de sal. Luego agregue las mitades de corazones, cociéndolas hasta que ablanden, 4 a 5 minutos. Escurra. Cuando enfríe lo suficiente, corte la alcachofa.
2. En un cuenco pequeño, mezcle el azúcar, la salsa de soja, el vino de arroz y la maicena. Revuelva con las gambas. Deje reposar unos 15 minutos.
3. Si usa palitos de arroz, coloque 2 a 3 tazas de aceite en un pequeño cazo hondo. Caliente el aceite a 375 grados Celsius. Agregue los palitos de arroz y remueva cuando floten a la superficie, algunos segundos. Pase a una bandeja o plancha para hornear forrada en una toalla de papel. Deje enfriar los fideos. Desmenuce y coloque en un cuenco de mesa. Aparte.
4. Caliente una cucharada de aceite en una sartén antiadherente. Agregue el ajo y dore, alrededor de un minuto. Agregue las gambas y saltee. Antes de que estén las gambas, agregue la cucharada de aceite restante, corte la alcachofa, la hierbalimón, las cebollas verdes, el vinagre y el cilantro. Caliente. Sazone con sal y pimienta blanca.
5. Transfiera el relleno a un cuenco y sirva con hojas de achicoria.

Cada ración: 181 calorías; 15 gramos de proteínas; 14 gramos de carbohidratos; 5 gramos de fibra; 8 gramos de grasa; 1 gramo de grasa saturada; 86 miligramos de colesterol; 561 miligramos de sodio.

8 de septiembre de 2005
©los angeles times
©traducción mQh

0 comentarios