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asesinato de hashim el cojo


[Ellen Knickmeyer] Iraquíes acusan a marines de asesinato de civil. Familia de hombre lisiado refuta versión de las tropas.
Bagdad, Iraq. Todas las partes del caso de Hashim Ibrahim Awad al-Zobaie están de acuerdo en fue matado por marines del Tercer Batallón, del Quinto Regimiento, el 26 de abril pasado en el pequeño pueblo de Hamdaniyah en el centro de Iraq. Pero hay versiones contradictorias sobre su muerte, y están en el centro de otra investigación sobre el desempeño de las tropas estadounidenses en Iraq.
Miembros de una patrulla pedestre de la marina bajo investigación dijeron que cogieron a Hashim cavando un hoyo para colocar una bomba, a pasos de su casa en el pueblo árabe sunní de unas treinta casas cerca de Abu Ghraib, al oeste de Bagdad. Los marines dijeron que mataron a Hashim en una breve balacera y que encontraron un rifle de asalto AK-47 y una pala junto a él.
De acuerdo a las versiones entregadas por vecinos y familiares de Hashim, y aparentemente respaldadas por fotografías, los marines llegaron a casa de Hashim, sacaron fuera al inválido de 52 años y lo mataron disparándole cuatro veces en la cara. El rifle de asalto y la pala junto a su cuerpo fueron plantadas ahí por los marines, que las habían tomado de prestado de un vecino, dijeron vecinos y familiares.
La familia de Hashim dijo este fin de semana que un pequeño grupo de soldados estadounidenses les visitaron la semana pasada y les ofrecieron dinero a condición de que respaldaran la versión de los marines en cuanto al asesinato.
El asesinato de Hashim, conocido en el pueblo como Hashim el Cojo debido que tenía una barra de metal insertada quirúrgicamente en una pierna hace años, es el incidente menos prominente de dos que están siendo investigados a la fecha sobre acusaciones de muertes injustificadas y posibles encubrimientos. No se espera que la otra investigación, sobre la muerte de 24 iraquíes en la ciudad de Haditha al occidente de Iraq el 19 de noviembre, concluya antes de este verano, dijeron funcionarios del Pentágono. Pero un ex abogado militar familiarizado con el caso de Hashim dijo el domingo que se espera la formulación de cargos y que el caso "procederá rápidamente".
"Van a ser juzgados antes que los acusados en el caso de Haditha", dijo sobre los militares implicados, a condición de preservar el anonimato.
Abogados familiarizados con el caso dicen que siete marines y un militar de la marina están siendo investigados y los ocho fueron removidos de sus funciones en Iraq y están retenidos en Camp Pendleton, en California. La Associated Press dijo el viernes que la persona de más alto rango entre los ocho, era un sargento de segunda clase.
Miembros de la familia de Hashim entrevistados por un corresponsal especial del Washington Post el sábado dijeron que las últimas horas del lisiado empezaron a eso de las dos de la mañana del 26 de abril, cuando miembros de una patrulla pedestre de la marina estadounidense golpearon a la puerta de su casa amurallada, de un piso.
Los marines cogieron a Hashim de su túnica tan pronto como se asomó a la puerta, sacándolo de la casa, dijo uno de sus hijos, Nasir, 26, un estudiante de arte en Bagdad.
"Menos de una hora después, oímos disparos", dijo Nasir. La familia tenía demasiado miedo de las tropas estadounidenses como para salir a investigar qué ocurría, dijo Nasir.
Al llegar el día la familia encontró un hoyo en el camino de tierra a unos quinientos metros de su casa, con manchas de sangre todavía húmeda y cubierta de guantes de plástico desechados.
Buscando a Hashim, les dijeron a los familiares que los marines habían llevado su cuerpo a una comisaría de policía local, dijo Nasir. Finalmente la familia recuperó el cuerpo del padre en un hospital de Abu Ghraib, dijo Nasir.
El vecino de Hashim, Farhan Ahmed Hussein, dijo que los marines habían parado primero en su casa esa noche antes de ir a la de Hashim.
Hussein dijo que los marines se llevaron una pala y un rifle AK-47 de su casa. Fuerzas militares estadounidenses e iraquíes permiten que las familias iraquíes posean un arma por casa.
Tras la muerte de Hashim, Hussein recuperó de la policía iraquí su pala y el rifle. "Me hicieron varias preguntas para asegurarse de que era mi arma", dijo Hussein. "Luego me devolvieron el rifle".
El Post obtuvo una copia de otra declaración de los marines sobre la muerte, escrita en inglés y entregada a las autoridades iraquíes de Hamdaniyah. El Post también obtuvo una copia de una declaración en árabe entregada a las autoridades iraquíes en la zona y firmada por "Los Marines" y un panfleto repartido en el área por los marines inmediatamente después del asesinato que describen a Hashim como un insurgente que había sido eliminado después de que disparara contra la patrulla.
Después de que los militares estadounidenses del equipo de investigación visitaran Hamdaniyah, dijeron los vecinos el sábado, las fuerzas americanas en el área empezaron a retirar los panfletos y a destruirlos.
El Post también obtuvo fotografías del difunto, identificado por la familia y las autoridades iraquíes como Hashim, envuelto en sábanas de plástico en un ataúd de madera. En la foto se podía ver lo que parecen ser cuatro agujeros de bala: dos en una mejilla, uno en la barbilla y uno en los labios.
Las salidas de bala habían destruido la cabeza, que yacía en un charco de sangre en los plásticos.
La declaración en inglés sobre la muerte, escrita en una hoja de libreta, daba esta versión: "El 25 de abril, a eso de las tres de la mañana, divisamos desde nuestro puesto de observación a un hombre cavando en la berma de una calle. Lo llamé y disparé. Fue declarado muerto en el sitio, y tenía una pala y un AK-47".
La declaración estaba firmada por Lawrence G. Hutchins y observaba que era sargento. Un sargento de segunda clase llamado Bowen firmaba como testigo; su nombre de pila no era legible.
La declaración en árabe, también en una hoja de libreta, decía que el cuerpo llevado a la policía por los marines era el de un hombre que había sido sorprendido por las fuerzas estadounidenses "cavando en un lugar para colocar una carga explosiva y tenía su arma, un rifle con un cargador lleno, y una pala".
El panfleto repartido después del asesinato llamaba a Hashim "saboteador" y decía que los marines lo habían sorprendido a eso de las once de la mañana del 26 de abril cavando un hoyo en la carretera para colocar una bomba. "Los marines le dispararon y él devolvió el fuego con el AK-47 que tenía, lo que obligó a los marines a volver a disparar y matarlo", dice.
"Las fuerzas iraquíes y los marines han advertido antes que la colocación de bombas en la calle es considerada una acción agresiva y que dispararan a matar para impedirlo".
Familiares de Hashim insisten en que él no era un insurgente y dicen que no saben por qué fue asesinado, aunque parece claro que las tensiones sobre las bombas improvisadas que causan la mayoría de las bajas estadounidenses en Iraq jugaron un papel.
La policía local, que está formada por chiíes, aunque es zona sunní, también dijo que no sabía que el pequeño hombre lisiado de incipiente barba canosa tuviera lazos con la resistencia.
Un equipo de investigación norteamericano -una mezcla de tropas uniformadas y civiles- llegó a Hamdaniyah el miércoles, de acuerdo a Saadoun Ibrahim, el hermano de Hashim. Ibrahim les mostró la tumba de su hermano y accedió a que los estadounidenses exhumaran el cuerpo cuando volvieran, dijo el sábado.
"Uno de ellos... dijo: ‘Somos un equipo de investigación y queremos mostrar la verdad, y compensar a la familia si se demuestra que es inocente'", dijo Ibrahim. "Yo accedí".
Otro grupo de tropas americanas llegaron a la casa al día siguiente, a eso de las nueve de la mañana y hablaron con Ibrahim, 60, en presencia de su esposa, su hijo de 13 años y otros niños, dijo. Un hombre se identificó a sí mismo como sargento, a través del intérprete, dijo Ibrahim.
El americano, que según Ibrahim parecía estar a cargo del grupo, preguntó primero si el equipo de investigación había hablado con él. Él dijo que sí lo había hecho.
De acuerdo a Ibrahim, el americano dijo: "Estamos dispuestos a pagarle la indemnización monetaria que usted quiera, pero con una condición, que es que cuando el equipo de investigación vuelva, usted les diga que su hermano trabajaba con la resistencia y tenía conexiones con los insurgentes, y que él acostumbraba a salir de noche a lugares que usted desconocía".
El americano no mencionó una cifra, dijo Ibrahim, diciendo solamente que sería "más de lo que le darán a usted los militares" según las indemnizaciones corrientes en caso de muertes que los comandantes determinan más tarde que fueron injustificadas.
Ibrahim dijo que lo había rechazado. "Les dije que contaría lo que sé", dijo. "Y ninguna cantidad de dinero podría compensar la pérdida de un hermano y la pérdida que significa para los 13 miembros de su familia".
El americano consultó entonces brevemente con otro militar que estaba con él y se marcharon, dijo Ibrahim.
Ibrahim dijo que no conocía los nombres de los militares ni a qué rama de las fuerzas armadas pertenecían. Los civiles iraquíes suelen tener dificultad en reconocer los uniformes de las diferentes ramas de los militares estadounidenses.
La versión de la familia no pudo ser corroborada independientemente.
El Post describió las acusaciones de la familia en cuanto al ofrecimiento de pago antes portavoces militares americanos en Bagdad y en Camp Pendleton, el sábado y domingo.
El teniente Lawton King, portavoz de la Primera División de la Marina en Camp Pendleton, dijo en un e-mail el domingo que los oficiales habían visitado a la familia en varias ocasiones como parte de la investigación del homicidio.
"No sabemos nada de la sugerencia de conductas inapropiadas de la naturaleza descrita por su periodista; sin embargo, lo investigaremos como parte de la investigación general", escribió King.
Las fuerzas estadounidenses anunciaron que su investigación del homicidio de Hamdaniyah el 25 de mayo, diciendo que líderes locales iraquíes habían hecho preguntas sobre el caso en una reunión previa el 1 de mayo. La primera declaración militar sobre el caso identificó erróneamente el lugar del asesinato como Hamandiyah, otro pueblo cercano.

Thomas E. Ricks en Washington contribuyó a este reportaje.

5 de junio de 2006
©washington post
©traducción mQh
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