clínica en londres, y narcotráfico
Santiago, Chile. La clínica donde estuvo internado Augusto Pinochet en 1998, mientras permaneció detenido en Londres por orden del juez español Baltasar Garzón, fue pagada con gastos reservados del Ejército.Así da cuenta una declaración policial que consta en el último informe entregado por la Brigada de Lavado de Activos de Investigaciones (Brilac), perteneciente al general (R) Javier Urbina Paredes. Este último aseguró a la policía que recuerda la existencia de un fax con fecha 21 de octubre de 1998 donde se señala la transferencia de 35 mil dólares desde el Banco Riggs de Washington, donde la misión militar tenía una cuenta. Estos dineros fueron transferidos al National Westminster Bank, ubicado en Picadilly, Londres, cuyo beneficiario era la London Clinic.
La declaración de Urbina es coincidente con la prestada por el jefe de finanzas de la misión militar de la capital estadounidense, coronel Roberto Guiza Castresana, quien firma el mencionado documento, publicado por La Nación en su edición del 6 de enero de 2005.
La novedad del informe de la Brilac es que en una de sus conclusiones detalla que la orden para usar los gastos reservados institucionales la dio el comandante en jefe de la época, el general Ricardo Izurieta Caffarena.
El argumento usado en la oportunidad, según Urbina, fueron los motivos de seguridad institucionales para con Pinochet y que el centro asistencial contaba con las instalaciones adecuadas para atender al ex dictador.
Si bien Guiza Castresana ya había sido interrogado por el anterior ministro del caso Riggs, Sergio Muñoz, lo hizo nuevamente ante la Brilac y posiblemente deba confirmar sus dichos ante el actual magistrado Carlos Cerda.
Fuentes allegadas a la investigación, Castresana habría mantenido sus dichos en torno a que los gastos reservados se pagaron las necesidades del ex dictador.
La información aparece en momentos en que el juez Cerda volvió sobre la pista de los gastos reservados institucionales. De hecho, a principios de junio envió dos exhortos internacionales para obtener información bancaria sobre esos activos. Uno fue dirigido a EEUU y el otro a Canadá. En ambos países las misiones militares contaban con cuentas para depositar los gastos reservados.
14 de julio de 2006
©la nación 
querella por tráfico de cocaína
El 11º Juzgado de Garantía declaró admisible la denuncia calumniosa presentada por Marco Antonio Pinochet -hijo del general (R) Augusto Pinochet- en contra del ex director de la DINA, Manuel Contreras, quien aseguró que parte de la fortuna de su familia, tenía orígenes en el narcotráfico.La decisión dada a conocer a primera hora de ayer al Ministerio Público, determinó que el fiscal jefe de la Unidad de Crimen Organizado y Delitos Funcionarios de la Fiscalía Sur, Héctor Barros, asumiera el análisis de la acción.
Esto se concretará, una vez que el tribunal remita el original de la denuncia a la Fiscalía y se determine si la acción es de ámbito público o privado. En el primer caso, el fiscal Barros iniciará un cúmulo de diligencias tendientes a determinar si existen pruebas que sustenten los dichos de Manuel Contreras y si concurre o no la denuncia en su contra. En caso contrario, el ex director de la DINA deberá retractarse y asumir las costas de sus palabras.
Experiencia Con los Malos
El fiscal Héctor Barros se desempeñó desde el 2000 como fiscal de la unidad antinarcóticos del Ministerio Público de La Serena, en donde consiguió una condena por 20 años y un día, la más alta otorgada en reforma a este tipo de delito, además de amplios resultados en el combate contra el tráfico de drogas.
Además Barros es el fiscal con más juicios orales en su currículum, 50 en total. Desde el 2004, forma parte del plantel de la Fiscalía Metropolitana Sur, donde se desempeña como uno de los expertos en Crimen Organizado y Secuestros.
Origen de la Querella
El 9 de julio, La Nación Domingo publicó el contenido del informe presentado por Contreras al ministro de la Corte de San Miguel, Claudio Pavez -que investiga el asesinato, en 1992, del coronel Gerardo Huber-, en el que aseveraba que parte de la fortuna de Augusto Pinochet provenía del tráfico de cocaína.
Según Contreras, la droga -conocida como ‘coca negra' debido a sus características de difícil rastreo-, se fabricaba en el Complejo Químico de Talagante por el químico de la DINA Eugenio Berríos, la que a su vez era enviada a Europa, donde era distribuida por Monser Al Kassar, tío político de Edgardo Bathich, socio de Marco Antonio Pinochet.
A partir de la publicación del informe, el hijo menor de Pinochet, Marco Antonio, calificó las aseveraciones como "una gran mentira e infamia", por lo que presentó el pasado martes una denuncia calumniosa ante el 11º Juzgado de Garantía, que corresponde a la jurisdicción de San Miguel, donde está emplazada la Corte ante la cual fueron emitidos los dichos de Contreras.
14 de julio de 2006
©la nación
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