amenazan a musulmanes con recortes
[Willem Beusekamp] La extrema derecha no pierde tiempo. Funcionarios políticos amenazan con nuevas, extremas medidas de acoso de musulmanes.
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Ámsterdam, Holanda. El distrito de Ámsterdam De Baarsjes de Ámsterdam Oeste ha presentado un contrato a las tres mezquitas del vecindario. Las que lo firmen se obligarán a notificar señales de fanatismo religioso. "Todo ha cambiado desde el asesinato de Theo van Gogh. La época de indiferencia ha terminado", dijo el presidente del distrito, Henk van Waveren.
"La interceptación de teléfonos y otra tecnología de punta están bien, pero ahora tomaremos este asunto por las astas. Sabemos que mucha gente vio los cambios en Mohammed B., pero nadie sabía qué hacer con esa información. Eso se ha acabado".
Los cambios se expresan en conductas religiosas observables, como dejar los vaqueros y la gorra por ropas tradicionales y el dejarse crecer barba.
Ese fue el caso de Khalid, el adolescente marroquí que viajó el año pasado a Chechenia, con Samir A. Su docente en la escuela observó los cambios exteriores, pero no sabía qué interpretar de ello.
El contrato, que según Van Waveren debe de ser firmado esta semana, determina además que en las mezquitas debe defenderse la libertad de expresión. Al que llame folladores de cabras a los musulmanes, debe respóndersele de igual manera o por escrito. Quien diga que los homosexuales deben ser arrojados al vacío, puede provocar actos delictivos y debe responsabilizarse ante el juez.
Además, en el contrato se determina que el que no respete los acuerdos y se mantenga aislado de la sociedad, puede sufrir recortes de castigo de su subsidio de la Seguridad Social. Sobre esto el distrito está todavía en negociaciones con el UWV.
En el barrio Chassé, que forma parte de De Baarsjes, se calcula que viven unas 150 mujeres extranjeras que reciben incorrectamente un subsidio básico.
El distrito recibió esta semana un millón de euros del Servicio de Seguridad Social para sacar a este grupo del aislamiento y poner fin al fraude.
8 de noviembre de 2004
©volkskrant
©traducción mQh
"La interceptación de teléfonos y otra tecnología de punta están bien, pero ahora tomaremos este asunto por las astas. Sabemos que mucha gente vio los cambios en Mohammed B., pero nadie sabía qué hacer con esa información. Eso se ha acabado".
Los cambios se expresan en conductas religiosas observables, como dejar los vaqueros y la gorra por ropas tradicionales y el dejarse crecer barba.
Ese fue el caso de Khalid, el adolescente marroquí que viajó el año pasado a Chechenia, con Samir A. Su docente en la escuela observó los cambios exteriores, pero no sabía qué interpretar de ello.
El contrato, que según Van Waveren debe de ser firmado esta semana, determina además que en las mezquitas debe defenderse la libertad de expresión. Al que llame folladores de cabras a los musulmanes, debe respóndersele de igual manera o por escrito. Quien diga que los homosexuales deben ser arrojados al vacío, puede provocar actos delictivos y debe responsabilizarse ante el juez.
Además, en el contrato se determina que el que no respete los acuerdos y se mantenga aislado de la sociedad, puede sufrir recortes de castigo de su subsidio de la Seguridad Social. Sobre esto el distrito está todavía en negociaciones con el UWV.
En el barrio Chassé, que forma parte de De Baarsjes, se calcula que viven unas 150 mujeres extranjeras que reciben incorrectamente un subsidio básico.
El distrito recibió esta semana un millón de euros del Servicio de Seguridad Social para sacar a este grupo del aislamiento y poner fin al fraude.
8 de noviembre de 2004
©volkskrant
©traducción mQh
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