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protestas en ceremonia


Durante la conmemoración de Srebrenica.
La Haya, Holanda. "Olvidar es fatal". Con esos textos y otros parecidos, decenas de las alrededor de 250 personas que asistieron el lunes en La Haya a la conmemoración de Srebrenica dejaron claro su descontento. Descontento por el hecho de que todavía hay una enorme cantidad de desaparecidos desde la caída del enclave en 1995, descontento sobre el modo en que han sido tratados los sobrevivientes, y descontento por el hecho de que los dos líderes serbo-bosnios, Karadzic y Mladic, aún no han sido castigados.
"Creemos que nos han dejado caer", dijo jehanne van Woerkom del Comité Político Staru Most, junto con el Consejo Intereclesiástico por la Paz [Interkerkelijk Vredesberaad] IKV, que organizó la conmemoración nacional de la caída de Srebrenica, hace diez años.
Luego de que los militares holandeses de la misión de Naciones Unidas entregaran el enclave el 11 de julio de 1995 bajo presión del ejército serbo-bosnio, los soldados serbios asesinaron a hombres y niños musulmanes que se habían refugiado en él. Se calcula que murieron unos 8.000 hombres y niños bosnios.
La reunión en La Haya contó con la presencia de sobrevivientes y familiares de las víctimas. Un gran número de ellos llegaron con pancartas y letreros de protesta. Luego de unas vueltas por la plaza en La Haya, se guardó un minuto de silencio, exactamente diez años después de la caída del enclave. Se soltaron balones blancos como un vínculo simbólico con la sepultura de los 600 caídos de Potocari. El lunes tuvo lugar allá una gran ceremonia de conmemoración en presencia de jefes de estado internacionales. También estuvieron presentes el ministro Bot (de Asuntos Exteriores) y la parlamentaria Karimo, de Izquierda Verde [GroenLinks]. A la conmemoración de La Haya asistieron algunos parlamentarios.

12 de julio de 2005
©http://www.volkskrant.nl/binnenland/1121061813718.html
©traducción mQh

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