Blogia
mQh

esperando a parra


[Andrés Gómez Bravo] Con 90 años, el autor de ‘Poemas & Antipoemas' continúa trabajando. A la espera del primer volumen de sus ‘Obras Completas', anunciado para septiembre en España, prepara su primer libro en 20 años y se apronta a debutar en un spot publicitario.
Antipoeta cachurero: Nicanor Parra va a su cabaña de Isla Negra -donde guarda parte de su biblioteca- y regresa a Las Cruces -donde vive- con una rareza bibliográfica, el ‘Diccionario filosófico', de Rosental y Judin, más conocido como el ‘Diccionario filosófico soviético'. "Es lectura para la depresión", dice Parra y se larga a reír. Leído hoy, el libro es toda una curiosidad: en una de sus entradas, por ejemplo, define al existencialismo como "un reflejo de la degeneración espiritual de la burguesía moderna". Ni más ni menos. "Ah", masculla Nicanor. "Es una joya".
Parra quiere el libro a mano: puede servirle para algún artefacto. En su casa de Las Cruces acumula innumerables textos inéditos. Cuadernos de versos, monos y garabatos. Desde ‘Hojas de Parra', editado en 1985, Nicanor ha sido reticente a publicar. "Los viejos pierden la autocrítica; creen que todos sus chistes son geniales. Los viejos son un lata, dice Hamlet", recuerda.
Pero la frase no es aplicable en su caso: Parra es un cerebro en permanente estado de ebullición. A la espera del primer volumen de sus ‘Obras Completas', anunciado para septiembre en España, y pese a las reticencias, accedió a romper su silencio editorial y publicar un nuevo libro con el sello Copa Rota, formado por Patricio Fernández y Pablo Dittborn. La obra aún está en fase proyecto, pero su autor ya se preocupa: "Habría que escribir algo mejor que ‘Poemas y Antipoemas', ah. ¿Se podrá?".

Car'e Palo
El día está nublado, la temperatura es baja en el litoral central y Parra capea el frío con un caldillo de congrio. El lugar elegido es el restaurante Entre Poetas. Un sitio ubicado entre Las Cruces e Isla Negra y hasta donde el propio Nicanor conduce su escarabajo gris. En las paredes cuelgan cuadros de Pablo Neruda y Vicente Huidobro. A la observación de que evidentemente en esa galería falta el tercer poeta de la costa central, responde socarrón: "Algunos dicen que falta el primero, ah... jajajá".
Nicanor está animado. Dice que está desarrollando un nuevo sujeto poético, distinto de las voces del energúmeno o el neurótico que construyó antes. Un sujeto que dice cosas como "Libro más aburrido que el Quijote no hay/ Para tonteras basta con la Biblia". O: "SAGRADA FAMILIA/ San José/ La Virgen/ ¿& quién era el otro?".
"¡Uh!", exclama Parra. "Es un un car'e palo. Habla como si no le importara nada, como si fuera un comentario de pasillo".
La actualidad, desde luego, también se cuela en sus cuadernos. Por ahí aparece Diego Portales con el título de "dictador ad honorem" y declarando "Nunca cobré el sueldo de ministro". Eso, anota Parra, "a prósito de los pinocheques/ quiero decir de los sobresueldos".
Tras apoyar a Fernando Flores, dice que hoy no tiene candidato. "Tengo afinidades erótico-políticas con la Michelle", confiesa, pero advierte que ha creado su propia vía: el Movimiento Buena Onda, cuyo eslogan es "Corrupción sustentable ¡Venceremos!". Aunque Flores rechazó la idea, Parra no afloja: "Yo estoy por la corrupción sustentable. Ese es el camino".
Nicanor es lo más parecido a un rock star dentro de la literatura chilena. Y a los 90 años grabará su primer comercial: un spot de 30 segundos que lo mostrará tomando un vaso de leche. "Algunos dicen que yo inventé la farándula. Los antipoemas son pura farándula, decía alguien por ahí", recuerda.
Eran otros tiempos, claro. Cuando el diccionario soviético era libro de cabecera y el antipoeta ofuscaba a la policía literaria. "Esas eran peleas -subraya-. Ahí yo me entretenía mucho. Lo pasaba bomba".

28 de julio de 2005
©tercera

0 comentarios