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agentes secuestraban y robaban


[David Heinzmann y Carlos Sadovi] Cuatro agentes son acusados de un largo listado de delitos graves.
Cuatro agentes de policía de Chicago acusados robar, secuestrar e intimidar a sospechosos de tráfico de drogas y a ciudadanos corrientes fueron formalizados el jueves en una investigación todavía en curso que podría resultar en más detenciones en el departamento de operaciones especiales del departamento de policía.
El jueves, el comisario de policía, Philip Cline, y el fiscal del estado del condado de Cook, Richard Devine, anunciaron los cargos largamente anticipados en una rueda de prensa conjunta. Ambos dijeron que estaban afligidos por los crímenes de sus agentes, pero dijeron que la opinión pública debía confiar en los resultados de la investigación interna.
"Cuando sacamos a los polis malos de la calle, estamos construyendo un mejor departamento de policía", dijo Cline.
Los cargos contra los cuatro agentes se formularon un año y medio después de que fiscales federales acusaran a cuatro agentes tácticos de Englewood de delitos similares. Como en ese caso, los fiscales están preocupados de que las acusaciones puedan poner en peligro detenciones no relacionadas llevadas a cabo por los agentes.
Los agentes acusados son Jerome Finnigan, 43, Keith Herrera, 28, y Thomas Sherry y Carl Suchocki, ambos de 32. Los agentes, todos miembros de la sección de operaciones especiales, están acusados de una gama de delitos, incluyendo agresión armada, invasión de morada, robos y secuestros. Podrían pasar 30 años en la cárcel si son condenados.
Finnigan es un veterano de 17 años en el cuerpo de policía, Herrera ha estado seis años en el departamento, Sherry 11 y Suchocki 10. Todos están acusados en múltiples casos.
Los cuatro serán suspendidos sin paga, y el departamento tomará las medidas para expulsarlos de sus filas, dijo Cline. Se esperan que comparezcan este viernes ante el juzgado criminal del condado de Cook.
Cline y Devine se negaron el jueves a dar detalles sobre las acusaciones, diciendo que primero debían ser presentadas ante un juez en el tribunal.
Los dos enfatizaron que la investigación, que empezó hace dos años, continúa. Al menos otro agente ha sido despojado de sus atribuciones policiales, y hay más cargos en camino, dijeron fuentes cercanas a la investigación. Hasta nueve agentes están siendo investigados, dijeron las fuentes.
La investigación en curso incluye una revisión de más de cien detenciones que hicieron los agentes, dijeron fuentes policiales. Algunos de los casos que están siendo revisados deberán ser abandonados, debido a las dudas sobre la integridad del trabajo policial, dijo Devine.
Cline dijo que él empezó a reorganizar los rangos y métodos de la sección de operaciones especiales después de revisar informes de la subcomisaria de policía, Debra Kirby, que dirige asuntos internos. Algunos supervisores, incluyendo un teniente a cargo de los agentes acusados, fueron reasignados a puestos diferentes debido a la investigación.

Signos de Problemas en 2002
En 2002 ya había indicios de posibles actos ilícitos cuando el ayuntamiento empezó a llegar a acuerdos en demandas interpuestas por gente que reclamaba que Finnigan, Suchocki, Sherry y Herrera los habían golpeado, robado y amenazado. Estas quejas cada vez más numerosas -se presentaron al menos cuatro demandas en el tribunal federal- fueron parte del catalizador de la investigación interna del departamento de policía, dijo Kirby.
Billy Glover interpuso una demanda contra el ayuntamiento en 2004, diciendo que nueve agentes -incluyendo a Finnigan, Herrera y Suchocki- lo habían sacado de su camión, golpeado, acosado a su abuela y acusado falsamente de posesión de una escopeta que estaba inscrita legalmente.
Los fiscales desecharon el cargo por posesión de armas. En cuanto a la demanda de Glover, el ayuntamiento llegó a un acuerdo por 25 mil dólares. La experiencia dejó al vecino del Lado Sur con una profunda resentimiento con la policía.
"No me gustan, no confío en ellos. Punto", dijo Glover, que perdió su trabajo como obrero de la construcción mientras salía de los problemas legales que le causó la detención. "Tienen que dejar de ser tan violentos. ‘Servir y proteger' -tienen que retirar ese lema de las patrulleras. No es lo que hacen".
Poco después del acuerdo de Glover, los detectives lo contactaron a través de sus abogados. Estaban buscando información sobre su caso para la investigación interna.
El mes pasado, René Gutiérrez y Alicia Negretre presentaron una demanda federal contra Finnigan y otros agentes que no ha sido acusados todavía. Esa demanda alega que Gutiérrez y Negrete fueron robados de más de 50 mil dólares en contante y unos 45 mil dólares en joyas cuando los agentes allanaron su casa en el bloque 5100 de la avenida de South Kolin. Gutiérrez posee un túnel de lavado y tenía dinero contante en su casa, dijo Lawrence Jackowiak, abogado de la pareja.
Gutiérrez y Negrete fueron acusados de posesión de narcóticos, pero esos cargos fueron desechados en 2004 y 2005 cuando los agentes no comparecieron repetidas veces ante el tribunal, dijo Jackowiak.

Fiscales Descubren Patrón
Devine dijo el jueves que los fiscales de su unidad de narcóticos empezaron a observar un patrón regular en que se hacían importantes detenciones en casos de drogas, pero los agentes no se presentaban ante el tribunal cuando eran citados. La repetición causó sospechas, llevando a los fiscales a unirse a una investigación de asuntos internos, que ha estado en curso durante más de un año, dijo Cline.
Cline dijo que las detenciones ilustraban el "compromiso inquebrantable" del departamento de policía de deshacerse de agentes implicados en actos ilícitos.
En otra demanda federal, el techador del Lado Noroeste José Hermosillo acusó que Finnigan, Sherry y otros agentes irrumpieron en su casa en 2004, lo golpearon, le robaron cinco mil dólares y le exigieron más.
"Estaba aterrorizado. Siguieron presionándolo y exigiéndole que encontrara más dinero", dijo el abogado de Hermosillo, Joel Whitehouse. "Hermosillo no tenía nada más que dar".
La policía dijo que había encontrado 900 gramos de cocaína en una caja de zapatos en la casa de Hermosillo. Hermosillo, que según las fuentes declaró ante un gran jurado del condado de Cook en el caso, alegó en una demanda civil interpuesta contra el ayuntamiento por 50 mil dólares que las drogas habían sido robadas a un traficante unas 24 horas antes, dijo Whitehouse.
Los fiscales del condado de Cook desecharon los cargos criminales el 17 de enero. Hermosillo también se siente reivindicado de los cargos del jueves, pero ha vivido desde entonces con miedo, dijo su abogado.
"Han pasado meses y meses y los agentes siguen en las calles, llevando sus vidas de siempre", dijo Whitehouse. Hermosillo está "preocupado de que si se les permite hacer más detenciones, otra gente inocente también terminará en la cárcel".

dheinzmann@tribune.com

csadovi@tribune.com

7 de septiembre de 2006
©chicago tribune
©traducción mQh
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