chiíes pelean tras atentado
[Saad Fakhrildeen y Garrett Therolf] Milicias rivales chiíes pelean tras atentado con bomba en Iraq. Un terrorista suicida mata a 16 y deja heridos a 70 en un mercado en la ciudad santa de Kufa, intensificando las tensiones entre los grupos chiíes.
Kufa, Iraq. Un terrorista suicida atacó un atiborrado mercado en esta ciudad santa chií el jueves, matando al menos a dieciséis personas y dejando heridas a otras setenta y avivando las tensiones entre las milicias chiíes rivales.
La bomba fue detonada en un sedán gris frente a un restaurante y al otro lado de la calle de una escuela primaria de niñas.
Una airada turba que incluía a miembros de la milicia Ejército al Mahdi del clérigo musulmán chií Muqtada Sáder se reunió rápidamente en torno al cráter de la explosión y acusaron ruidosamente a Estados Unidos y la policía iraquí por no haber impedido el atentado. La mayoría de los agentes de policía de Kufa están asociados a la milicia chií rival, la Organización Báder, el brazo armado del Consejo Supremo para la Revolución Islámica en Iraq, el partido político chií más grande del país.
Los manifestantes impidieron que la policía y otras fuerzas de seguridad entraran a la zona. Tres ambulancias fueron destruidas y muchos de los heridos fueron finalmente amontonados en camionetas para ser trasladados a hospitales cercanos.
El incidente es la prolongación de una serie de enfrentamientos en los últimos días entre los dos grupos en secciones remotas del país, incluyendo el este de Bagdad, Diwaniya, Basra y Nayaf, que colinda con Kufa a 161 kilómetros al sur de la capital. Las dos milicias están vinculadas a grupos políticos que rivalizan por la hegemonía entre la mayoría chií de Iraq.
El gran ayatollah Mohammed Saeed Hakim trató de minimizar el conflicto entre las sectas y responsabilizó del atentado a "los terroristas y partidarios de Saddam Hussein que continúan el espectáculo criminal que empezaron cuando cayó el régimen".
Iraq ha sufrido una serie de atentados en mercados en los últimos días, incluyendo explosiones en Ramadi que mataron a una docena de personas el lunes. Más de cuarenta iraquíes murieron el domingo al estallar un coche bomba en un popular mercado de Bayaa, al sur de Bagdad. Al menos ochenta personas resultaron heridas en el ataques.
Hoy el vicepresidente Dick Cheney llevó inesperadamente a Bagdad, informó la Associated Press. Cheney, en un visita de una semana a Oriente Medio, fue informado por el general de ejército David H. Petraeus y el embajador norteamericano Ryan Crocker.
Más tarde se reuniría con el primer ministro Nouri Maliki y otros.
El martes en la mañana en Bagdad una bomba improvisada destinada a explotar al paso de un convoy norteamericano, mató a tres iraquíes y dejó heridos a otros cinco.
La bomba fue detonada en un sedán gris frente a un restaurante y al otro lado de la calle de una escuela primaria de niñas.
Una airada turba que incluía a miembros de la milicia Ejército al Mahdi del clérigo musulmán chií Muqtada Sáder se reunió rápidamente en torno al cráter de la explosión y acusaron ruidosamente a Estados Unidos y la policía iraquí por no haber impedido el atentado. La mayoría de los agentes de policía de Kufa están asociados a la milicia chií rival, la Organización Báder, el brazo armado del Consejo Supremo para la Revolución Islámica en Iraq, el partido político chií más grande del país.
Los manifestantes impidieron que la policía y otras fuerzas de seguridad entraran a la zona. Tres ambulancias fueron destruidas y muchos de los heridos fueron finalmente amontonados en camionetas para ser trasladados a hospitales cercanos.
El incidente es la prolongación de una serie de enfrentamientos en los últimos días entre los dos grupos en secciones remotas del país, incluyendo el este de Bagdad, Diwaniya, Basra y Nayaf, que colinda con Kufa a 161 kilómetros al sur de la capital. Las dos milicias están vinculadas a grupos políticos que rivalizan por la hegemonía entre la mayoría chií de Iraq.
El gran ayatollah Mohammed Saeed Hakim trató de minimizar el conflicto entre las sectas y responsabilizó del atentado a "los terroristas y partidarios de Saddam Hussein que continúan el espectáculo criminal que empezaron cuando cayó el régimen".
Iraq ha sufrido una serie de atentados en mercados en los últimos días, incluyendo explosiones en Ramadi que mataron a una docena de personas el lunes. Más de cuarenta iraquíes murieron el domingo al estallar un coche bomba en un popular mercado de Bayaa, al sur de Bagdad. Al menos ochenta personas resultaron heridas en el ataques.
Hoy el vicepresidente Dick Cheney llevó inesperadamente a Bagdad, informó la Associated Press. Cheney, en un visita de una semana a Oriente Medio, fue informado por el general de ejército David H. Petraeus y el embajador norteamericano Ryan Crocker.
Más tarde se reuniría con el primer ministro Nouri Maliki y otros.
El martes en la mañana en Bagdad una bomba improvisada destinada a explotar al paso de un convoy norteamericano, mató a tres iraquíes y dejó heridos a otros cinco.
garrett.therolf@latimes.com
Fakhrildeen informó desde Kufa y Therolf desde Bagdad.
10 de mayo de 2007
9 de mayo de 2007
©los angeles times
©traducción mQh
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