acoso en ter appel
Los refugiados que llevan 33 días en huelga de hambre han sido trasladados y separados. Estaban en el campo de detención de Ter Apel.
Ter Apel, Holanda. Los cinco refugiados iraníes rechazados que llevan 33 días en huelga de hambre han sido trasladados el martes del centro de partida de Ter Apel hacia otras instalaciones. Los huelguistas partieron hacia las 9 de la mañana, en taxis minibuses, desde el centro de partidas hacia varios centros de refugiados AZC. Los cinco iraníes serán separados en cinco centros en Zweeloo, Franeker, Holten, Dongen en Emmen.
La salida desde el centro de partidas en Ter Apel transcurrió sin problemas. Un pequeño grupo de periodistas y el portavoz Hans Alderkamp, del Grupo de Trabajo Libertad para los Refugiados WVV vieron partir a los cinco minibuses con los pálidos y demacrados refugiados.
A petición de los huelguistas los choferes de los minibuses se detienen un momento para que los iraníes puedan hablar con la prensa. "Estamos muy mal", susurra Mohammad Mehdi Neshat, 29. "Pero seguiremos". La petición de que los refugiados no fueran enviados a cinco centros diferentes fue rechazada por la Autoridad Central para la Acogida de Refugiados COA [Centraal Orgaan Opvang Asielzoekers]. "Quieren quebrarnos, pero seguiremos", repite Mehdi Neshat, suavemente. "Esto debe cambiar, esto no puede seguir así. No abandonaremos".
Los refugiados rechazados sobreviven ya 33 días a base de agua y azúcar, porque el ministerio de Justicia no utiliza reglas claras en la preparación del retorno al país de origen. Es todavía posible que un refugiado reciba un permiso de residencia durante el trámite. Según los huelguistas no hay reglas clara ni acuerdos que el ministerio debe respetar.
Los buses paran una vez más, al borde del campo. Una mano flaca sale de la ventana del bus buscando a Alderkamp. Este la coge cariñosamente y la dobla hacia arriba para dar ánimo al iraní. "El COA no saca nada con dispersarlos", dice Alderkamp. "Hemos avisado a la prensa local de los pueblos adonde los llevan: están locos por publicar sus historias. Será contraproducente: más los jode el ministerio de Justicia, más atención recibirán".
3 de agosto de 2005
©volkskrant
©traducción mQh
Ter Apel, Holanda. Los cinco refugiados iraníes rechazados que llevan 33 días en huelga de hambre han sido trasladados el martes del centro de partida de Ter Apel hacia otras instalaciones. Los huelguistas partieron hacia las 9 de la mañana, en taxis minibuses, desde el centro de partidas hacia varios centros de refugiados AZC. Los cinco iraníes serán separados en cinco centros en Zweeloo, Franeker, Holten, Dongen en Emmen.La salida desde el centro de partidas en Ter Apel transcurrió sin problemas. Un pequeño grupo de periodistas y el portavoz Hans Alderkamp, del Grupo de Trabajo Libertad para los Refugiados WVV vieron partir a los cinco minibuses con los pálidos y demacrados refugiados.
A petición de los huelguistas los choferes de los minibuses se detienen un momento para que los iraníes puedan hablar con la prensa. "Estamos muy mal", susurra Mohammad Mehdi Neshat, 29. "Pero seguiremos". La petición de que los refugiados no fueran enviados a cinco centros diferentes fue rechazada por la Autoridad Central para la Acogida de Refugiados COA [Centraal Orgaan Opvang Asielzoekers]. "Quieren quebrarnos, pero seguiremos", repite Mehdi Neshat, suavemente. "Esto debe cambiar, esto no puede seguir así. No abandonaremos".
Los refugiados rechazados sobreviven ya 33 días a base de agua y azúcar, porque el ministerio de Justicia no utiliza reglas claras en la preparación del retorno al país de origen. Es todavía posible que un refugiado reciba un permiso de residencia durante el trámite. Según los huelguistas no hay reglas clara ni acuerdos que el ministerio debe respetar.
Los buses paran una vez más, al borde del campo. Una mano flaca sale de la ventana del bus buscando a Alderkamp. Este la coge cariñosamente y la dobla hacia arriba para dar ánimo al iraní. "El COA no saca nada con dispersarlos", dice Alderkamp. "Hemos avisado a la prensa local de los pueblos adonde los llevan: están locos por publicar sus historias. Será contraproducente: más los jode el ministerio de Justicia, más atención recibirán".
3 de agosto de 2005
©volkskrant
©traducción mQh
0 comentarios